102 El sol contra la Luna

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"Sentinel, ¿puedo saber cuál era la regla que mencionaste hace un rato?" 

Luna le preguntó al espíritu con cuidado. En este momento, Sentinel estaba acostado en su cama mientras ella estaba sentada en la silla al lado. 

Ella trató de curar el espíritu pero aparentemente, no funcionaría con él. Y entonces, ella solo lo hizo acostarse en la cama mientras tanto. 

"Para ser honesto, solo descubrí que las Bestias Antiguas tienen guardianes espirituales cuando te conocí. Parece que el conocimiento que me transmitieron mis antepasados ​​estaba incompleto".

"Sólo fuimos creados por los Dioses Bestia cuando pusieron a dormir a la Serpiente Negra", dijo Sentinel. "Ellos sabían que también tenían que irse a dormir porque sellar la Serpiente Negra agotaba su energía. Así que para asegurarse de que la Serpiente Negra fuera guiada en consecuencia mientras dormían, nos crearon. Los guardianes espirituales son técnicamente una parte de su fuerza de vida."

"Entonces, ¿no morirás mientras tu Dios Bestia esté vivo?"

"Podemos morir", dijo. "Pero nuestra" muerte es solo equivalente a que seamos absorbidos por el Dios Bestia de nuevo. Una vez que eso suceda, nuestra conciencia y forma humana desaparecerán. Seríamos otro trozo de fuerza vital para el Dios Bestia como antes ".

" Eso es muy triste ".

"No me importa", dijo casualmente. "Sé que fui creado únicamente para proteger el corazón del Fénix Rojo, y también para asegurarme de que la Serpiente Negra no se despierte hasta que sea el momento adecuado para que se despierte". La ira cruzó sus ojos. "Pero esa Serpiente Blanca casi me envía de regreso a mi señor de nuevo".

"¿Cuándo desapareció esa Serpiente Blanca, Centinela?"

"Desapareció tan pronto como la Serpiente Negra se durmió profundamente", dijo Sentinel con un toque de irritación en su voz. "Se suponía que debía guiar a la Serpiente Negra, pero de repente desapareció. Realmente voy a estrangularlo una vez que lo vea".

"¿Pero y si la Serpiente Blanca no desapareció por su propia voluntad?"

De repente se congeló como si solo se diera cuenta de eso ahora.

"Por eso digo que deberíamos encontrar a la Serpiente Blanca", dijo. "¿Y si nos necesita para salvarlo?"

La vacilación fue evidente en el rostro de Sentinel cuando volvió a hablar. "Los guardianes espirituales le prometieron a los Dioses Bestia que impediremos que la Serpiente Negra despierte. Pero aún así, cada uno de nosotros tiene un maestro al que servir". Colocó una mano sobre su pecho. "El Fénix Rojo me pidió que protegiera el corazón. Y no puedo mantener mi forma humana si estoy fuera de la sala de oración del Fénix Rojo. Tengo que estar cerca de Lady Nystrom. Si no, me veré obligado a quedarme dentro su corazón."

"Entonces, ¿debería buscar la Serpiente Blanca por mi cuenta?"

"No puedes dejar a Lady Nystrom mientras todavía está embarazada", le recordó. "Eres el médico de la duquesa, Luna."

"No es como si estuviera descuidando mi deber", dijo. "Solo quiero eliminar la amenaza que rodea a la duquesa para que tenga un parto seguro".

"Luna, somos las dos personas que no deberían dejar solos al duque y a la duquesa", le recordó. "Lo sé en este momento, solo tenemos unos pocos aliados. ¿Pero puedes pensar en alguien más para cazar a la Serpiente Blanca por nosotros?" Chasqueó los dedos como si recordara algo. "Ese espeluznante capitán del Dragón Azul está fuera de discusión, ¿de acuerdo? No confío en las personas que son tan fanáticas como ese niño".

《 Ła Đama Čon Ûn Mazo Đe Čangrejo 》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora