Ese sentimiento de amargura ascendía cada vez más al punto de querer ahogarme, fue una noche terrible, de esas en las que el animo cambia tan repentinamente como de blanco a negro, en segundos. Mire el humo del cigarrillo mientras pensé que después de todo volví a estar sola, sentada y con el corazón roto, mi prioridad en ese momento era dormir y olvidar toda la tristeza que llenaba cada parte de mi cuerpo..... aunque sabia que dormir solo aliviaba mi alma por unas cuantas horas y que al despertar estaría igual o más rota que antes.
Recordando cada instante desagradable de mi vida y como me dolía en el alma no poder ser una persona mas sentimental y que me importaba tan poco lo que pasara que creo que eh llegado al punto en que hay pocas cosas que me duelen.