𝓛𝓪 𝓒𝓻𝓲𝓪 𝓓𝓮𝓵 𝓛𝓮𝓸́𝓷 ᵗᵒᵐᵃʳʳʸ

Capítulo 96

Hola, miren se supone que este capítulo debió de haberse subido ayer, pero por algún raro motivo no fue así y aparte de que se borró, yo por mi parte apenas me vengo dando cuenta de eso y les pido una disculpa.

Letra en negritas y subrayada: Parsel

La boda de sus jóvenes seguidores fue todo un éxito, Tom en esos momentos estaba en su despacho terminando de firmar unas hojas que Naginni le había dejado en su escritorio. En esos momentos llevaba solo los pantalones, la camisa y los zapatos, su corbata, túnica y chaleco descansaban en el sillón que estaba frente a la chimenea de su estudio, pasaban de las dos de la madrugada, en algún momento debía de irse a descansar, lo sabía muy bien, pero no quería hacerlo.

La pluma traba el posible garabato que era su firma, la poca luz que había era gracias a una lámpara de escritorio y la luna creciente que iluminaba su estudio. Estaba entretenido, que si bien había escuchado la puerta abrirse, pensaba que podría ser su Mione que ni se preocupó en alzar la vista.

- Pensé que estabas dormida sobrina - comentó sus ojos azules aún recorrían el siguiente pergamino a firmar

- Mione lo está - respondieron

Tom parpadeó varias veces y al alzar la vista por poco y suelta el pergamino. Harry J. Potter estaba frente a él, llevaba una pijama de short gris y una playera de manga corta del mismo color, salvo que la pequeña Snitch que estaba en el centro le daba un brillo, su cabello ya despeinado estaba peor, sus ojos verdes brillaban con la misma intensidad que el hechizo Avada, su piel brillaba dándole una tentadora vista para que lo mordiera.

- Harry - susurró - ¿Qué haces aquí? ¿No puedes dormir?

El menor negó con la cabeza, sus mejillas se habían vuelto Rojas, como si estuviera avergonzado.

- ¿Ocurre algo? - cuestiono Tom

- Bueno, me quedaré pensando en unas cosas - comentó Harry mientras tomaba haciendo frente al escritorio de él - Si te hacías pasar por John el hermano de Mione, el beso que nos dimos también fue mentira

Los nervios lo delataban y le deleitaba.

- No - respondió con naturalidad - Ese beso te lo quise dar y te lo di, no me arrepiento de nada, es más, quiero volver a tomarte como en tu sueño  - murmuró eso último en parsel

Tom hubiera pensado que el jadeo que había escapado de los labios de Harry eran una alucinación, que su mente le estaba jugando mal, pero al verlo se dio cuenta que no era así.

- ¿Qué? - cuestiono Harry, sus mejillas Rojas eran una enorme tentación- pero que locura dices, Tom

En respuesta, el mayor le enseñó la túnica que reposaba en uno de los sillones individuales.

- ¿Quieres saber un secreto? - cuestiono en voz baja a lo que Harry asintió - te sueño sobre mí escritorio, gimiendo y llorando mi nombre, rogando a que te la meta hasta el fondo, reclamando tu cuerpo y boca

- Hazlo - siseo Harry

El pedido de Harry en parsel, gemiendo con miedo y esperanza hicieron que Tom atacara su boca, devorando la, agradecía que ya era Julio, si bien Hary aún no cumplía los 17 años, ya estaba en la fecha próxima. Las manos de los dos se tocaban con ansiedad, con necesidad, querían sentirse, pero algo en la mente de Tom lo paró, sonriendo como el Gato de Alicia en el país de las maravillas lo miro a los ojos.

- En tres día es 31 - comentó - te quiero para mi toda la noche, tu regalo será mi pene en tu hermoso trasero - susurro

La mano de Tom, tomó con firmeza el trasero de Harry haciendo que este gimiera.

- pero, yo - decía el de lentes mientras suspiraba, las manos de Tom eran traviesas - Te quiero ahora

- Y me tendrás, pero quiero ver que tanto aguantas en estos tres días - susurró sobre sus labios

Los pequeños colmillos de Tom mordió su labios, gimió en voz baja, su entrepierna dolía, quería que se lo cojieran, pero estaba seguro que el 31 en la noche, Tom Riddle no lo iba a soltar por nada del mundo.