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Hago una mueca al ver el salón lleno, mi mirada busca a mi hermana mayor encontrandola en uno de los pupitres de al fondo. Camino hacia rápidamente con la mirada agachada y me siento en el pupitre de a lado, ella me mira y sonrie.
— ¿Dónde estabas? — Pregunta con una ceja alzada.
— Es que apenas me acabo de dar cuenta que en el pasillo principal, había una máquina de chocolates. — Me encogo de hombros.
— En serio, tienes serios problemas con el chocolate. — Rio mientras saco mis cosas y las pongo sobre la butaca.
El maestro de historia, ocea nuestro padre entra al salón haciendo que todos los demás vayan a sus asientos, este comienza a escribir en el pizarron datos suyos mientras que yo me dispongo a a escuchar música.
— Buenos días a todos. — Escucho su voz entre la música. — Soy el Sr.Yukimura. Reemplazare a su anterior profesor de historia. Mi familia y yo nos mudamos aquí hace tres semanas. — Por favor que no haga lo que estoy pensando. — Estoy seguro de que ya todos conocen a mis hijas, April y Kira. — Lo hizo. — O quizás no, ya que nunca han mencionado a nadie de la escuela. — Ruedo los ojos. — Ni traído a ningún amigo a casa. — De reojo veo como kira deja caer su cabeza en el pupitre provocando un fuerte ruido, la mirada de todos se posan en nosotras. — De cualquier forma, allá están.
Nos señala, levanto la mirada poco a poco topandome con la mirada de un chico moreno y de cabello café. Le regalo una sonrisa resibiendo una de su parte, dios mio era muy guapo.Suspiro y le pongo atención atención a la clase, en la cual me la pase mirando al moreno el cual me miraba de reojo en cada rato.
Cuando la clase terminó kira y yo tomamos nuestras cosas y salimos detrás de nuestro padre, el cual iba hacia la cafetería.
— Tu, el que se hace llamar nuestro padre. — Lo llamo colocándonos a su lado. —¿Querías dejarnos en vergüenza?
— Creí que dijeron que querían hacer amigos. — Se encoge de hombros.
— Pero no de esa manera. — Exclama en un Murmuro kira.
