𝐃𝐞𝐚𝐫 𝐒𝐚𝐧𝐭𝐚 ➳ 𝐌𝐢𝐜𝐡𝐚𝐞𝐧𝐠

𝐝𝐫𝐞𝐢

Mina miró a la joven muchacha que reposaba en su lado. Escuchaba los ligeros ronquidos que salían de su boca. Aquella no podía ser la misma chica que había visto hace tanto tiempo el día de navidad. Recordó la decepción en el rostro de la chica mientras miraba por la ventana buscando a su "novio" que había sido el primero en la parte superior de su lista de deseos.

Mina no pudo evitar admitir que era una vista adorable. Pero ahora la joven que una vez vio hace muchas navidades se había convertido en una hermosa muchacha que ahora había cambiado su preferencia por las mujeres. No le molestó la idea. Pero ella no había conocido la sensación de amar a otra chica. Ella misma tenía curiosidad por saber cómo se sentía amar a alguien. Mina siempre se preguntaba de vez en cuando ¿Qué es el amor?

Examinaba la forma en la que Chaeyoung respiraba pesadamente, la forma en la que sus pestañas revoloteaban y la forma en que arrugaba su pequeña nariz de aquí para allá sin esforzarse. Tocó suavemente el rostro de la más pequeña y le dio posó su tacto en el lunar que poseía la chica. Para su suerte esta no se movió. Sonrió y se sentó en la cama.

Mina asomó la cabeza fuera de la habitación. Ningún ser o criatura se movía, ni siquiera un ratón. Salió de puntillas a la sala de estar y jadeó de sorpresa al ver lo que se encontraba en ella. Frente a ella había un árbol de navidad aún iluminado y lleno de hermosos adornos ¿Cómo no había visto aquello anoche? Pasó el dedo por los adornos. Hermosas bolas doradas y rojas colgaban cómodamente del árbol. Mina pudo percibir el aroma de éste, fresco, real. Lo cual ocasionó una gran sonrisa en la nipona.

— ¿Siempre olfateas árboles? — Escuchó una voz adormilada preguntarle. Mina se volvió para ver a Chaeyoung frotándose los ojos con cansancio.

— Oh no. Pero este es encantador. — Respondió. Chaeyoung la miró sin comprender. — Estabas profundamente dormida cuando me fui ¿Algo te despertó? — Preguntó la más alta haciendo que las mejillas de la otra chica adquirieran un lindo tono rosáceo.

Flashback.

Chaeyoung soltó un quejido y movió su mano sobre el espacio vacío a su lado. Frunció el ceño cuando no sintió a Mina a su lado ¿A dónde podría haber ido? ¿Fue todo aquello un sueño? La chica agitó sus ojitos cansados y los abrió fijándose en que la puerta de su habitación se encontraba entreabierta. Rápidamente se levantó para buscar el cuerpo cálido que extrañaba a su lado.

Fin del Flashback.

Chaeyoung se aclaró la garganta y se encogió de hombros, acción que ocasionó que la nipona se riera entre dientes.

— ¿Quieres desayunar? Puedo preparar unos esponjosos panqueques, y puedo agregarles un poco de crema batida con chispas verdes y rojas ¡Oh, puedo poner la cara de Santa en los panqueques! — Mina soltó emocionada.

La coreana frunció el ceño y sólo le respondió con un "Uh, está bien". La nipona se encontraba tan feliz por lo que sonrió y se dirigió hacia la cocina. Tarareaba una canción mientras sacaba todas las cosas que necesitaría, desde utensilios de cocina, hasta para la mezcla de panqueques. Chaeyoung se sentó y miró a Mina con una expresión de sorpresa. Era como si supiera dónde estaba cada cosa en su cocina.