capitulo 8

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Estamos en su hermosa casa, me arreglo para ir a un "club de BDSM" me siento nerviosa, nunca e asistido a un club así, me pregunto como será. Mi corazón se acelera con tener una duda sobre ese club

—Samantha te quiero en diez minutos, maquillate — ordenó Damián mirándome desde la entrada de mi habitación

no digo nada y veo aquel traje de colegiala, es muy provocativo

<tendre que usar esa falda tan corta sin ropa interior? >

Es muy extraña esta regla sobre la ropa interior

Me coloco la blusa corta que me cubre un poco los pechos, la mini falda a cuadros, me miró en el espejo y se me todo mi culo expuesto para la vista de cualquiera

Me maquillo con un delineado super largo, me hace parecer los ojos achinados, muy chiquitos, labial rojo, las mejillas con un poco de rubor de todas formas mis mejillas enrojecerian más, tacones negros bien altos, me peino el cabello con dos coletas, me veo muy tierna, muy provocativa, parezco una actriz porno esperando a que llegue un chico como uno de los personajes de naruto a follarme muy duro, no dejo de verme en aquel espejo y decido bajar

veo aquel chico con traje totalmente negro y en sus manos tiene un collar rosa con picos tipo roquero 

— te ves.. tan.. sexy — dijo casi suspirando, sus ojos grisáceos se oscurecieron, apretó sus labios formando una línea y apretó con fuerza el collar

Me sentía nerviosa jamás use una vestimenta así

— Tengo que usar ese collar? — pregunté curiosa

— si.. date la vuelta — dijo con su voz ronca

Me coloca aquel collar rosa y sostiene la cadena con una de sus manos, tira de ella y me guía hacia la salida

— no te haz quitado el vibrador o sí? — pregunto firme

—no señor

— de acuerdo, te salvaste de un castigo — dijo serio — mi chófer nos va a llevar, se llama Andrés —dijo

— de acuerdo — dije con la cabeza gacha, una limocina negra aparece de repente, el chófer Andrés baja y abre la puerta para nosotros dos

subo primero y después Damián, cierra la puerta del auto y Damián me coloca el cinturón, lo apretá en mi cuerpo descubierto, el mira como el cinturón separa mis pechos y roza uno de mis pezones, al sentir fricción de la tela de la blusa mis pezones se notan, y juega con uno de ellos

— Hoy nos vamos a divertir mucho — susurro a mi oído

el chófer mantiene la vista en el camino y me lanza varias miradas

llegamos a nuestro destino el club de BDSM, habian muchas personas haciendo largas filas con sus parejas muchos hombres voltean a verme me siento muy avergonzada , un hombre de guarda espaldas me mira de arriba y abajo, mira a Damián y le permite el paso

Caminábamos sobre un pasillo iluminado con una luz Led morada y hay una cortina roja transparente Damián la hace a un lado para pasar, vemos a muchas personas con sus sumisos, sumisas, exclavos y exclavas con sus trajes provocativos y extravagantes en el centro hay una pista de baile, bailaban sensualmente, habían bailarinas colgando del techo con telas largas y otras bailando pol dance  en tarimas con tacones exageradamente altos

bailaban sensualmente, usaban poca ropa y no parecían avergonzarse, en el fondo había música sensual las luces parpadeaban y todo era muy interesante

se acerca un colega de Damián a saludarlo

— Hola hermano que tal? — dijo un colega de Damián, era ojiazul alto y rubio tenía edad aproximadamente unos treinta y dos, muy joven

Me enamore de un sádico Donde viven las historias. Descúbrelo ahora