Damián mientras usaba el vibrador, haciéndome débil cada vez más perdiendo la fuerza de mis piernas, llegando al clímax
con una de sus hábiles manos fuertes, abrió más mis piernas para hundir su mano entre ellas levantando la tela de aquella mini falda a cuadros
juega con el vibrador haciéndolo girar dentro de mí provocandome un orgasmo el chófer esta con la en su camino y Damián me prohíbe gemir
Me contengo para no recibir un castigo doloroso
Damián da un fuerte azote en mi sexo húmedo causando que mi clitoris hinchado palpita más, da un segundo azote y acaricia mi sexo mientras usa el vidrador sin dar descanso, estoy que me vengo en el auto con una de mis manos aprieta con fuerza el brazo de Damián, el solamente sonríe maliciosamente
detiene el vidrador y siento una liberación
lo saca de mi interior y hunde dos dedos en mi zona penetrandome suave y profundamente
<Es un experto, esto se siente como estar en un paraíso >
saca sus dedos y me siento frustrada, quería más de sus mágicos y ágiles dedos, chupa sus dedos
— Mmmm.. esto sabe delicioso — dijo
al ver que goza del sabor de mis jugos me exita mucho más
— Quítate el cinturón, ya casi llegamos — dijo y ordene
Me quite el cinturón y me hizo una señal en la que me acostara en los asientos del auto, abriendo las piernas dejando mi coño expuesto para el
el se quito el cinturón y abrío más mis piernas con brusquedad
sentí como repartía besos en mis músculos, hasta llegar a mi sexo
hizo lo mismo de la noche anterior, jugando con mi clitoris hasta hundir su lengua experta en mi entrada, logrando ponerme los ojos en blanco
Jugando con mi sexo que empezó a besarlo como si estuviera besándome a los labios de mi boca
— me encanta tu sabor — su respiración se puso pesada igual que la mía
se detiene y me ordena a sentarme, llegamos a su fortaleza, su hermosa fortaleza
el chófer abre la puerta del auto para nosotros y Damián tira de mi cadena, salgo del auto y me carga en sus brazos, le da las gracias a su chófer y el se retira, antes de entrar por la puerta una mujer nos abre la puerta
< es su ama de llaves? >
Entramos y Damián le da las gracias, aun teniendome en sus brazos firmes y fuertes, empieza a llevame hasta su habitación dejándome caer en su cama
Cierra la puerta detrás de él y se quita el traje desabotonando lentamente y sensual mente su camisa oscura. Quedando su pecho totalmente descubierto se dirige hacia su armario sacando el separador de piernas con tobilleras a los lados
— Abre las piernas — ordenó
Obedeci y con una de sus hábiles manos fuertes me coloco una tobillera y después la otra dejando mis piernas totalmente rectas sin poder doblarlas una vez más ato mis muñecas en los agarres de la cama que tenían un aro muy grande, me encontraba muy vulnerable, para el era cien por ciento suya podría hacerme lo que se le venga en gana
— oh Samantha.. estas.. tan vulnerable, me encanta esa minifalda que realmente me pone muchísimo
— hágame totalmente suya, quiero conocer mis límites — dije
Se agacha como un leon que asecha a su presa para deborala, hunde una vez más su lengua moviendola en círculos en mi entrada para después salir y tomar mi clitoris y pellizcarlo con sus dedos
— señor... — dije gimiendo
— ishh.. silencio no te ordene que hablaras
llegando al clímax gemi su nombre, hundió tres dedos en mi interior, metiendolos y sacándolos penetrandome salvajemente tan profundo para luego agregar uno más
Me llenaba de todos los sentidos, era mucho mejor que todos los que e tenido sexo, era un experto no se compara con ningun otro ser humano
Metió su miembro dentro de mi, hundiendolo poco a poco lentamente, penetrandome suave y lento
— tu.. eres mi perra — dijo entre gruñidos
— si señor soy su perra — dije entre gemidos, este hombre era un dios en la cama, volveria a repetir más de cuatro veces al día
Empezó a penetrarme más fuerte, más profundo, me encanta que me folle tan profundamente, tan rudo, que me hace sudar
Entre sus manos agarro la sabana gris haciéndolas puño con fuerza, tratando de llegar al clímax, se corrió dentro de mí y yo también me vine, se sintió tan bien tan delicioso
no podía moverme, apuñaba mis manos y mis piernas se debilitaban
una vez más salió de mi interior
desató mis muñecas, sujeto el tubo del separador y me dio la vuelta dejándome en una pose deliciosa, la pose de cuatro patas, se hundió una vez más y me penetro fuertemente
no podía conocer mis límites, quería mucho más y solo el puede complacerme y llenarme ese vacío
— me encanta que seas tan estrecha — dijo entre gruñidos
salió de mi y se dirigió al armario
sacó un plug con una perla rosada formando un corazón
acarició mi trasero en el plug puso lubricante y empezó a hundir la punta en mi anal, tenía un ardor increíble, me dolía, Hundió la mitad y no podía soportar
— te duele? — pregunto, su respiración aún seguía muy fuerte
— si señor y mucho.. — dije, mis lágrimas se notaban y estaban listas para salir de mis ojos
— me encanta verte tan débil, adolorida
Hundió completamente el plug en mi zona anal, quito el separador de mis piernas y aun quería más, tener el plug en esa zona me incomodaba
—De pie — ordenó
Me puse de pie y aún tenía ese ardor dentro de mi
— abre un poco las piernas — agregó
Obedeci y una vez más se hundió dentro de mí su lengua experta
< como este hombre sabe de mis deseos? >
se detuvo y me sentí satisfecha, y estoy segura que volveria a repetir una sesión con este señor
Hola!!... Aquí una idea sobre el separador de piernas con tobilleras
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Me enamore de un sádico
RomanceMe llamo Samantha tengo 20 años, soy amante de las fiestas y me gusta beber, soy popular y la típica niñita de papi, solía ser una chica muy coqueta con los demás chicos sin tener algún tipo de enamoramiento hacia a ellos, me gustaba jugar con los s...