Capitulo 13: Quebré el trato

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A pasado un buen rato desde que llegamos y Castiel aun no sale del despacho de Damon. No lo entiendo digo yo debería estar hablando con el; no el. Aunque aun no puedo creer que el castigo por amarlo sea la muerte.
"No hay peor castigo que seguir vivo una eternidad sin la persona que amas." las palabras de Astrid resonaron fuerte en mi cabeza y con ellas un sentimiento de angustia muy grande. Hoy todo cambiara al menos yo no moriré pues firme un contrato por mi alma y la única forma de morir seria que el decida matarme... pero que me pasa, ¿realmente estoy enamorada de el?, ¿realmente soy lo suficientemente madura para entablar una relacion después de una relacion tan destructiva como la que tuve? o simplemente me estoy dejando llevar por el calor del momento, esta típica frases de "un clavo saca otro clavo".
Sentí unas manos en mi espalda voltee y era el, sin pensarlo dos veces lo abrase con todas mis fuerzas. Y sin dudarlo correspondió a mi abrazo.
-Te extrañe.- se escapo de mis labios.
-Jamás pensé que llegaras a extrañar me, pero me agrada.- Su voz susurraba a mi oído esas palabras, solo para mi.- pero aun así creo que es momento de hablar.- volteo a ver a Castiel quien estaba aun en la entrada de esa habitación en la que ahora entraríamos solo Damon y yo.

Castiel imponente y con esa mirada fría se acerco a mi y me dio una pluma que cuando la deposito en mis manos a la mirada de todos se transformo en un precioso collar con una piedra increíble mente hermosa en la parte de en medio era un azul deslumbrante. - Con esto el no podrá manipularte de ninguna manera y tampoco podrá tocarte, asique todo lo que pase allí adentro será solo decisión tuya.- me dejó a su lado no sin antes dedicarle una mirada fulminante.

Nos sentamos uno frente al otro.- Creo que el dejarte a merced de él, no fue tan malo después de todo. Parece que te aprecia.

-La verdad no lo se es muy raro yo diría que le cuesta entender muchas emociones. Te fuiste- su mirada se fijo en la mía con suma atención.- te fuiste y supongo que me hice buena amiga de él.- aunque francamente no se si el sepa lo que es una amistad. - En ocasiones me hace sentir como si tratara de que no arruine mi vida, aunque siendo sinceros nunca he sido buena eligiendo pareja.

Sus ojos se fijaron a los míos y por un momento ninguno de los dos hablamos como si tratáramos que este momento se quedará grabado en la memoria de ambos.
-Sere directo -rompio el silencio- quiero estar contigo pero no te obligaré a estar a mi lado -saco de su chaqueta una hoja enrrollada, era el contrato que le firme tiempo atrás pues tenía mis iniciales grabadas en ese listón rojo que mantenía enrrollado aquel papel. Lo desenrollo y sutilmente lo extendió para que pudiera ver y confirmar que se trataba de mi contrato.- partir de ahora tu alma no me pertenecerá más...- por un momento se quedó callado. Acaso tendrá dudas.- así que te devuelvo tu libertad.- rompió el papel delante mío.
- No entiendo ¿por que haces esto?
- Renunció a ser dueño de tu vida ,de tus acciones, hoy no me perteneces más... Partir de ahora eres tú quien decidirá si te quedas o te vas.- Sin quererlo una lágrima todo por mis mejillas y apesar de no quería irme me sentí libre.
- No deseó irme ,quiero estar a tu lado.

Una sonrisa se dibujo en su rostro y nos sumergimos en un gran abrazo.
-Tu cuarto está tal cual pero si quieres puedes cambiarlo.- abrió la puerta y Astrid me acompaño de inmediato a mi habitación mientras Damon se quedaba a solas con Castiel.

-Sabes me da gusto que sean felices.
-Gracias, apesar de que no iniciamos bien me alegra tener una amiga.
-Descuida, para mí igual es agradable aunque no se que tipo de cosas hacen los amigos.

2 SEMANAS DESPUÉS
- Y dime amiga - dijo Astrid mientras se llevaba una palomita a la boca.- ya tuviste acción con Damon.- le puse mi mano sobre su boca y me la quitó sutilmente.- No tiene nada de malo es algo normal.
-Baja la voz.
-Vamos confiesa Damon no está nadie nos va a escuchar.
- Pues no, no he hecho nada de eso.
- y por qué no.
- Pues no la verdad no.
- No me digas que no te gusta de esa manera por dios si está bien bueno.
- No es eso- tome palomitas en mi mano mientras comencé a comerlas poco a poco- bueno emos tenido momentos a solas pero el sexo no es algo ya sabes...muy pronto.
- De que hablas. Entre más mejor.
-Sabes quiero que sea especial no sé si me explico pero me gustaría que los dos estuviéramos en un lugar tranquilo, que sea un momento romántico.
-Bueno yo puedo hablar de eso con el si quieres. o podemos planearlo tu y yo, te puedo volver la más sexi de todas.
-Estas loca.
-Ven...- me tomo de la mano y me jalo directo al armario y poco a poco empezó a sacar ropa- ya veraz cuando llegue no se va a aguantar.

La novia del diabloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora