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Me remuevo entre las colchas y tomo mi celular, este comienza a vibrar tras unos segundos y lo primero que hago es apagarlo.

Quito las mantas que me cubren y me arrepiento al instante, medio que sigue haciendo frío y el clima aún no quiere cambiar.

Me levanto y me cambio, me pongo la casaca de promoción del Blake - que me queda gigante y es calentita - y me pongo las medias y los zapatos.

Esta casaca en realidad no es mía. La mía era de mi talla, pero no me gustaba que fuera bastante pegada. A Manu, en cambio, le quedaba un poco grande, se confundieron de talla, y en cuanto le di la mía se la quedó, fue un intercambio equivalente. 

Termino y tomo mi mochila, meto un par de cuadernos, el celular y cargo en la mano el libro de inglés. Bajo las escaleras y veo a mamá en la cocina.

- Buenos días. - dejo mi mochila en el piso.

- Buenos días Carmín. - me abraza y nos separamos. - Cuelga tu mochila, aún no he limpiado el piso.

Hago lo que me dice y me siento en la isla mirándola.

- ¿Y Luna? - pregunto curiosa.

- Ve a despertar al oso. - bromea. - Yo termino de preparar el desayuno. 

Me levanto y mientras me ajusto la corbata me acerco al cuarto de mi hermana. Toco la puerta, no recibo respuesta y entro. Abro la puerta con cuidado y veo a mi hermana aún dormida.

Tomo algo de impulso y me tiro encima de ella. Ella grita y se remueve.

- ¡Pero que...- quita las colchas y me ve riendo. Me mira mal.

- Buenos días para ti también hermanita. - me levanto.

- Carmín...

- ¡Apúrate! Mamá ya está acabando el desayuno. 

Se levanta con pereza y me tira un cojín.

- ¡Hey!

- Tu primero viniste a despertarme, no me hago responsable de mis actos. - se encoje de hombros.

- Veo que si la despertaste. - mamá se asoma por la puerta.

- ¡Se tiró encima mío! - chilla indignada.

- Bueno, no fue la manera pero te levantó. - choco los cinco con mamá. - Apúrate Lu, cambiate que tienes que desayunar y Rey las lleva al colegio.

Ella bufa y nos hace salir de su cuarto. Ayudo a mamá a poner la mesa y, tras unos minutos, aparece mi hermana toda despeinada - aunque ya cambiada, cabe recalcar - y me da un peine y unas ligas.

- ¿Me peinas? 

- Dale Lu, siéntate. 

Ella toma algo de jugo mientras que le hago su trenza cascada, últimamente le ha gustado mucho peinarse así. No demoro mucho, y coloco la liga. Cepillo el cabello de Lu para que no se enrede y se hace ondulado en las puntas. Cuanto desearía que el mío se haga así también.

- ¿Para la tarde se van a peinar de otra forma? - mamá nos mira.

Yo siempre con mi cabello suelto y Luna con su trenza. Ambas nos miramos.

- Creo que Jazmín nos ayudará con el cabello en el Roller ma. - responde ella.

- Tengo su ropa ya guardada en dos mochilas, así que volviendo del colegio almuerzan, se cambian y van al Roller. Papá, el señor Alfredo y yo iremos más tarde. - las dos asentimos.

Mamá me acerca unas tostadas con algo de palta y para Lu un pan con queso. Mi hermana tiene algo en contra de la palta, estoy segura. Comemos, nos lavamos los dientes, me hago una media cola y salimos para el colegio. 

Dust 》CarmínDonde viven las historias. Descúbrelo ahora