2. Príncipe azul.
Y como fue de esperarse, estábamos sentadas Vanessa y yo en una mesa para cuatro, cuando dos tipos llegaron a coquetearnos. ¡Vaya! Los mire de mala gana, me paré y me fui a servirme algo de tomar, todo por no verle a cara a esos bobos, en mi interior les mostraba mi dedo medio.
Me serví un ponche no muy cargado de licor, lo suficiente como para no embriagarme, no quería hacerlo. Recuerdo la ultima vez que lo hice, fue espantoso, veía doble, sentía que estaba más lejos del piso, era como si estuviera en una cuerda floja al borde de caer y matarme contra el piso. Caminaba como en " X", hablaba arrastrando mis palabras y finalmente terminé en un baño vomitando como loca, todo el licor se estaba yendo por dentro del baño, no paraba, mi garganta estaba destrozada. Nadie me había advertido lo terrible que seria, ni que antes de beber debía comer algo para que el licor no me entrara tan fuerte. Waw! Que inteligente Zoe me repetía hacia mis adentros esa vez. Desde ahí juré nunca más embriagarme.Con el vaso de ponche en mi mano salí de aquella fiesta, necesitaba aire, ¡Todos olían como si no se hubieran bañado hace un mes!. Que asco.
Me senté en el escalón de una escalera que estaba por allí. Veía como de la puerta salían borrachos que caían con un escalón no muy visible en el piso. Amé en ese momento a el que haya puesto ese escalón ahí, realmente me hizo la noche.
De repente salió un joven muy apuesto, con un cuerpo deseado por toda mujer, por suerte no estaba ebrio y vio el escalón. Miro hacia todas partes como en busca de alguien más, parecía muy preocupado. Entonces se acercó a mi, sentí como mi estomago dio vuelta al momento en que me hablo.-Oye preciosa, ¿has visto pasar por aquí a una chica baja, rubia y con una botella de vodka en la mano?
-¡Oh claro! Allí está con aquel chico -Señale en dirección a la chica rubia- Parece que le coquetea o algo así. -Le dije con una sonrisa, si que era guapo ese hombre.
Él muy furioso se dio la vuelta y se encamino a donde estaba la chica, cuando llego a el lugar, no muy lejos de mi. Vi que la regañaba, la gritaba. -Al parecer su rubia no se portó esta noche muy bien- dije hacia mis adentros mientras reía, al parecer me equivoque con la selección del ponche, el licor hacia efecto en mi, me sentía con un poco de calor en las mejillas. Cuando me aburrí de ver a la pareja pelear me paré y me encaminé a donde se encontraba mi mejor amiga.
Cuando llegue a la mesa, Vanessa se encontraba con un tipo que para mi gusto no era lo mejor que pudo conseguir esa noche, pero que más da. Parecía que estaba divertida con el, así que la iba a dejar.
-¡Estoy aburrida!- Grité. No me importaba si me escuchaban, realmente lo estaba, además la musica estaba demasiado alta para que me escucharan.
-Hola- Escuche tras de mi. Me voltee a mirar con quien me encontraba.
-¿Hola...?¿Que tal todo? -Despues de analizarlo de pies a cabeza .Le respondí casi gritando por la música tan alto.
-Supongo que nada bien, mis hermanos me obligaron a venir a esta fiesta solo por "diversión". -Exclamo haciendo énfasis a la palabra con sus dedos en forma de comillas. - Estoy muuuy aburrido y escuche que tu también lo estás. Entonces pensé...
-Antes de que digas algo sin sentido no me apetece tener nada con nadie esta noche si es para eso por lo que viniste - El chico muy sorprendido por lo que escuchó después de procesarlo sonrió. Que hermosa sonrisa, waw. Le Sonreí también tímidamente sin despegar mi mirada de su boca. Era muy lindo.
-Bueno, ya somos dos, yo tampoco busco algo esta noche. Si te apetece y no es problema vamos por bebidas y después no se.. Hablamos, te vez una chica muy interesante. - Y volvió a sonreír, con esa sonrisa de morirse.
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Asi empezó mi adolescencia.
RomanceZoe a sus 15 años empezó la dura etapa de la adolescencia. Dejar de creer en cuentos de hadas y barbies. Eso si que le dolió más que todo. Su infancia perfecta se fue desvaneciendo poco a poco, llegaban los momentos en los que no sabia que hacer ni...