Un Hombre Casi Perfecto [Kacchako] Completo

Capítulo 44

Todos los personajes son de la serie Boku No Hero Academia (My Hero Academia) del mangaka Kōhei Horikoshi. Esta historia sólo utiliza los nombres de los personajes para entretenimiento sin fines de lucro.

La historia está basada en la novela de Linda Howard "El Hombre Perfecto", si deseas leer la historia original para comparar las tramas, envíame un mensajito y con gusto te paso el archivo PDF.

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Yaoyorozu estaba nerviosa, la identificación con Hatsume no había tomado tanto tiempo con ella a como lo estaba haciendo con Uraraka, no sabía porque pero algo le decía que no se fuera como su amiga había pedido, sentía que algo estaba mal, y realmente le preocupaba lo que le decía su sexto sentido.

Siguió sola en la sala de estar sin alguna señal de Midoriya y su hielo, el tiempo pasaba y estaba repitiendo la escena entre Hatsume y Uraraka varias veces intentando memorizar sus diálogos: algo había sucedido que había alterado a ambas, pero ¿Qué? Ellas siempre fueron amigas en todo momento, la última vez que vio a Hatsume fue cuando se iba a ir de la ciudad por un nuevo trabajo que había conseguido, se notaba incómoda, pero ella concluyó que había sido a causa del estrés por su repentina mudanza.

Era cierto que no tuvo mucho contacto con Hatsume desde su partida, pero así era su amiga, un alma libre, creía que simplemente con un par de mensajes de "¿Cómo está todo? ¿Qué tal el nuevo clima? ¿La comida es igual de buena?" Su amistad seguiría intacta, y con ella era así, pero con la castaña, su relación era todo un misterio.

Se resignó a que Midoriya no regresaría, pero en vez de buscarlo, decidió quedarse en los sillones y sacó su celular, siempre debía de aprovechar esos tiempos muertos que tenía para ponerse al corriente con sus redes.

Contestó un par de mensajes, respondió unos comentarios y en eso escuchó como la puerta de la sala de interrogación se abría, pero en lugar de salir sus dos amigas, salieron los oficiales que las estaban entrevistando.

— ¿Pasó algo? — Preguntó cuándo ellos cerraron la puerta, al parecer Hatsume y Uraraka se iban a quedar más tiempo ahí, pero no tenía lógica, Hatsume había abofeteado a su amiga y ahora las dejaban solas ¿Cómo estaban seguros de que no volvería a haber una pelea de ese tipo?

Los hombres la ignoraron y salieron hacia las oficinas, Yaoyorozu tuvo que guardar su celular, algo estaba sucediendo, y no se perdería ningún detalle sólo por estar frente a una pantalla.

Pasaron aproximadamente 10 minutos cuando alguien más llegó a dónde estaba, no eran los oficiales que la habían tratado, sólo era una chica, cabello corto, ojos grandes, potaba el uniforme policial y llevaba una libreta en sus brazos.

— ¿Es la única persona aquí? — Preguntó la desconocida cuándo notó que tenía su atención, la chica se veía agitada, como cuando alguien corre en tacones varias calles, aunque era imposible, ella llevaba botas.

— Sí. — Contestó Yaoyorozu algo recelosa — Bueno, y hay dos personas más en la sala.

La chica pareció analizar su oración por un momento.

— ¿Uraraka Ochako? — Yaoyorozu asintió. La chica bajó la mirada y susurró: — Pobrecilla, no me gustaría estar en su posición.

La diseñadora volvió a asentir, y en eso notó que la chica seguía con la mirada perdida.

— ¿Sucede algo? — Preguntó, intentando no alimentar más su pánico.

— ¿Eh? ¡No! — Soltó la oficial saliendo de sus pensamientos — Simplemente me quedé pensando... si ve a un oficial de cabello verde, o que responde a nombre de Midoriya Izuku por favor dígale que lo está buscando el comandante, es urgente que se encuentre con él.