♣Destinados desde un hilo invisible (+14)

Cap.#9

-Lucas.. estamos yendo un poco... mmm.. bastante..-Doy vueltas con mis ojos y me interrumpo..- rápido.

-Puede que sea cierto... pero...-Dice Lucas y se queda callado un rato.- Quiero volver a verte, Berni.-

-No lo sé, ya te dije que soy de Limbra, y no vivo acá y... no quisiera salir lastimada, ni sufrir, por que creo que ya es suficiente con mis problemas y agregar uno más.. quiero centrarme en mis estudios.. y.. DIOS, estoy deprimida, creo que no es un momento para mantener una relacion con alguien que no conozco, y afrontar los problem....-Decía yo mientras caminaba de un lado al otro, contradiciendome y poniendome nerviosa.

-¿Estas comprometida,verdad?.-Interrumpió Lucas.

-No, no es eso...-Me tranquilizé y me senté en un banco de allí.

Lucas, se sentó a mi lado, y me tomo de la mano.

-Quizás, no sea un psicólogo, no sea un sabio, ni siquiera tu amigo.. pero.. con gusto lo sería, a hasta algo mejor. Aunque ahora soy un completo desconocido para vos, si necesitas ayuda, un consejo o simplemente desahogarte, aqui estoy.-Dijo con confianza, y sinseridad.

-Mi abuela falleció hace unos meses, y no logro superarlo aún, sigo deprimida. Ese día le di fuerte abrazo y otro por las dudas. En su momento no sabia por qué, pero ahora que se fue, todo tiene sentido.

Lucas, sin comentar nada, me abrazó y me dio sus hombros para llorar.

Me sentí tan segura, no se si era esa altura que me traía cada vez más felicidad, o sus brazos largos que abarcaban toda mi cintura.

Lloré un poco.

-Cuando algo malo sucede, tienes tres opciones: podés dejar que te determine, te destruya o te fortalezca. La última es la más recomendanda...-Me dijo con una sonrisa.-Recordá una cosita más.. el mejor maestro es el tiempo, sin necesidad de que le hagas preguntas, te da las mejores respuestas..

Nos quedamos abrazados un largo tiempo, luego le dije en el oído:

-Tengo ganas de besarte.-

-Las cosas no se dicen se hacen, porque al hacerlas.. se dicen solas...-

Ahí estaba yo, ahí estaba él.

Acostados en el pasto, con las hojas otoñales dando una cálida compañía, mirando las estrellas.. mirando el infinito..

En un momento de silencio el comentó:

-Pienso igual que vos, Mel.. Sé que fuimos demasiado rapido, y que en pocos días no se puede enamorar.. pero, creo que si, me encantas, de verdad te conozco, lo siento adentro mío.

-Sé que fuimos rápido, pero  nadie dijo que era algo malo..

Nos quedamos hablando de la vida, de nuestras vidas, de nosotros, de los nuestros, y de todo..

 Le conté que era de España, que mi color favorito era el índigo, que fuí bulimica, que de pequeña me gustaba robar las deliciosas uvas del jardín de al lado, que mi mayor alegría era ir a la casa de mi abuela, ya que quedaba lejos de la ciudad y jugaba con los perros, gatos, con barro, con mi hermano.. y esas cosas hermosas de antes, que lastimosamente ya pasaron, nuestra infancia.

Eran las 4:40 y ya me había empezado a atrapar el sueño..

-Uf, no doy más, creo que lo mej.. - mientras me levantaba y decía esas palabras el me agarra de la mano y me empuja de ella para que caiga gusto en su pecho.

-No te vas a ir... Cerrá los ojos, te contaré algo..El diablo es real. Y él no es un hombre pequeño de color rojo con cuernos y cola. Él puede ser hermoso. Porque él es un ángel caído, y solía ser el favorito de Dios..Decía un amigo mío que las casualidades no existen. Que todo está escrito entre las nubes y las estrellas con tinta invisible. Que las personas van mezclándose en las páginas de las historias de otras personas para compartir y protagonizar un guión ya establecido. Mi amigo decía que todos somos actores principales y también secundarios, según la parte de la película en la que nos encontremos. Es una bonita manera de hablar del destino. ¿No crees?.

-Eres jodidamente el amor de mi vida.

-Duerme, yo mientras te hablaré de la distancia.. no es un problema. El problema somos los humanos, que no sabemos amar sin tocar, sin ver o sin escuchar. El amor se siente con el corazón, no con el cuerpo..