♣Destinados desde un hilo invisible (+14)

Cap.#3

Por fin, pude llegar a mi casa, me sentía bien...

 Ese beso, fue muy dulce, pero a la vez muy exitante, me gustó, fue divertido..
 Digo divertido, para no decir que fue solo un beso. Siento que Tobias, me esta jugando un mal juego, no lo sé.

Cuando llegué, ví que mi mamá estaba en la cocina..
-Mel, ¿puedes hacerme un favor?-Dijo preocupada..
 Pf, ni buen día no? Madre mía, no me pregunto ni como estaba y ya estaba pidiendome cosas la muy...

-¿Que quieres?-No quería que me cagara el día, ni hacer "quilombo", nada más le hablé cortante y seco.
-Mel, la abuela no se siente bien, yo tengo que ir al trabajo, ¿Puedes ir a ver como esta? Tendré el celular del trabajo disponible para que me llames.-
Hay veces, que me dice que tiene el celular ocupado, eso significa que solo llamada urgentes o de emergencia podia hacerle, me trata como si fuera su empleada. Hay dos opciones, o me dice "Tengo el celular ocupado, ya sabes que no tienes que hacer" o el "celular disponible, llamame", la segunda, no es válida del todo. También son de emergencia..
-Esta bien, lo único que pido es que me lleves, TÚ, en TÚ coche, haste cargo una vez de mí.-Dije con malhumor.
-¡NO ME COMPLIQUES LA VIDA Y VE EN UN TAXI!.-Dijo enojada y nerviosa.
-Vete a la mierda quieres..-Dije con indiferencia.

Tomé las llaves, el celular, un poco de dinero, y me fuí caminando hacía la casa de mi abuela.

Ella no se sentía bien, tenía dolor de estomago, y poco a poco se fue deshidratando..
 Fuí  hacia una farmacia que quedaba a 15 cuadras de su casa, y compre un remedio..
Volví, le dí el remedio, también le compré una bebida hidratante, todo, pero nada parecía curar..
 
Se hizo el mediodía, la abrazé bien fuerte, le di unos cuantos besos y me fuí a mi casa.
 

Ya, a la noche, la internaron, estaba muy preocupada. 
 Sí pensé en la muerte, pero trataba de que pensamientos negativos no se hicieran realidad. Se me calleron unas lagrimas, con tal solo pensar en como sería si ella se fuera de este mundo, cuanto vacío iba a dejar en mi corazón.

Me desperté, escuché que mi madre me llamaba desconsoladamente, mientras estaba en camino a su llanto, pensaba en el pensamiento negativo, que estaba pasando..
-Mamá tranquilizate, ¿Que pasa? No me asustes por favor!-Dije 
-LA ABUELA.... SE... SE... SEEEE... SE HA IDO!!.-Dijo.

Quedé en pleno shock mental, el tiempo se paró, mi mente no respondía a aquellas palabras.
-No puede ser, no, no no no no.-

Mi mente no creía en eso.. 
Con tan solo pensar, que ese abrazo y beso era el último, lo hubiera echo toda mi eternidad.

Ese mismo día, paso el velorio, muy triste, es una puta mierda, todos llorando, abrazandose, lamentandose, pensando en aquellos días junto a ella.

Ahí estaba ella, tranquila, en su ataúd, con tan solo verla, se me venían los ojos verdes que tenía, sus calidas manos, sus abrazos totales, su olor, las caricias, era hermosa.
 Todavía no lo creia, no lloraba, pense que era fuerte, pero.. no era así.

No respondía a el "¿como estas?", no sabia que responder.

Pasaron las horas, y pude sentir, que si, era verdad, que estaba en una realidad, que la vida tenía sentido.

Estaba pasando por "un mal momento", y no estaba ella para decirme que todo iba a estar bien y decirme sus consejos, si no, que ella era eso.