Entré a casa, eran las 9:46 de la noche e iba llegando de entrenar todo el día con Jeongyeon. Esta vez nos excedimos un poco, pues los golpes fueron más fuertes al punto de ya no poder movernos por un rato.
Cuando dejé mi mochila en el suelo, Rosé estaba en la cocina junto con Lisa y Lisa vino corriendo a mi y me abrazó, pues siempre que llego ella me abraza y yo la cargo, pero esta vez me fue imposible.
– No amor, no te puedo cargar – Dije dando palmadas en su cabeza.
– ¿Por qué no? – Preguntó haciendo un puchero.
– Me duele un poco el cuerpo – Dije haciendo una mueca y acercandome a Rosé que estaba comenzando a hacer la cena.
– Hola – Dijo abrazándome y gemí de dolor.– ¿Otra vez llegas así?
– Lo siento – Deje un beso en sus labios.
– Cada vez llegas peor, un día llegarás con todos los huesos rotos – Dijo tocando el morete en mi brazo.
– Necesito tomar un baño largo y caliente – Dije dando un suspiro y recargandome en la pared.
– Ve a relajarte en el baño – Dijo riendo.– La cena tardará en estar.
– Lo haré – Sentí como metió sus manos por debajo de mi camiseta.– Amor, no – Dije quitando sus manos pero se negó.– Vas a ver lo mismo de siempre – Dije refiriéndome a los moretones.
– Cada vez tienes más – Dijo tocando mi abdomen.
– Duele – Dije mientras ella bajaba mi camiseta y me dejaba un beso en los labios.
– ¿Te bañaste allá? – Preguntó y yo asentí.– Entonces solo ve y relájate como te dije.
– Me encantaría que fueras conmigo – Dije pegandola a mi.
– Y a mi me encantaría ir contigo pero no puedo – Dijo besando mi mejilla.– Ve.
– Dame un beso primero – Agarré su mejilla y le sonreír. Ella se acercó a mi rostro y juntó nuestros labios, comenzamos a moverlos y se sincronizanban a la perfección mientras que ella agarraba mis manos y después se separó.– No me dejes de besar.
– Necesito hacer la cena – Dijo riendo.
– Está bien – Dije mientras la miraba.
– ¿Y Lisa?
– Está en la sala – Comencé a caminar hacia la otra salida de la cocina.
– ¡Boo Boo! – Dijo Lisa mientras me miraba pasar.– Juega conmigo.
– Amor...
– Cariño, tu mamá se irá a bañar – Dijo Rosé acercándose a mi.
– No me digas mamá – Dije riendo.
– Desde el primer día prometiste que jugarías conmigo – Dijo Lisa haciendo un puchero.
– Yo... aah... es verdad – Dije rascando mi cabeza.– Jugaré contigo mañana, lo prometo.
– Eso dijiste ayer – Dijo volteando a ver el televisor.– Y antier...
– Esta vez lo digo enserio – Subí un escalón – Jugaré todo el día contigo.
Ella no ignoró lo que dije, pero no se miraba muy convencida de mis palabras. Era verdad, desde hace días le prometí que jugaría con ella y llevo casi una semana poniendo pretextos...
Comencé a quitar mi ropa mientras la tina se llenaba de agua para meterme ahí, miraba mi cuerpo en el espejo y estaba lleno de moretones. Sonreí al ver eso, pues era verdad que me dolía pero el simple hecho de que fuera por entrenar me hacía feliz.
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La Novelita - Imagina Con Rosé
Teen FictionUna historia dónde se cuenta como es mi vida después de conocer a Rosé. La historia de amor perfecta.