Capítulo 25.

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Suspiré. Decidí que necesitaba un respiro de todo este estrés que me causaba Noel y su nueva relación. Justo ahora estoy a punto de tomar un taxi en el Aeropuerto Internacional de Maiquetia, Venezuela.

–¿Aló? Mami.–La llamé montandome en el taxi.

–¡Eli! ¿Cómo estás? Dios te bendiga hijita.–Respondio a lo que yo sonreí.

–Bien mami. Amén, oye. ¿Tú estás en casa?–Pregunté mirando el paisaje de Caracas. Estaba feliz de salir de PR, me sentía liberada de un peso. El peso que me consumía estar aferrada a Noel.

–Sí, ¿Porqué mi amor?–Mi madre estaba confundida. La comprendía, ella no sabía nada.

–Estoy aquí. Vía al departamento mami.–Reí con emoción y escuché como gritó con emoción.

Narra Chistian.

–Sé que no es la forma en que se darían las cosas, pero ahora es así.–Le hablé a Lía. Ella estaba nerviosa, nuestras manos estaban entrelazadas. Un apretón fuerte en mi mano de su parte me hizo notar que tenía miedo.–Estarás bien, estarán bien.–Le aseguré abrazándola besando su frente y sus labios.

Oí un suspiro salir de sus labios.–¿Crees que piense que soy una zorra?–Susurró mirando al piso. Yo suspiré, levanté su mirada.

–No pasará eso.–Le sonreí.

Entramos a casa, mi madre me miró y visualizó a Lía. No tenía pensado presentarlas así pero debido a las circunstancias era necesario.

–Hola cariño.–Me saludó mi mamá.

–Mami. Mira, te presento a... Te presento a mi novia.–Hablé nervioso, no por qué se conocieran. Era lo de menos en este momento, estaba nervioso por su reacción al contarle.

–Hola...–La tímida voz de Lía se escuchó, mi mamá le sonrió.

–¿Quieren que les traiga algo? ¿Un jugo, agua? O...–Mi madre hablaba feliz pero yo la interrumpí.

–Mami, vinimos aquí para decirte algo importante... Siéntate mejor mami, porque lo que te vamos a contar no se como te lo vayas a tomar.–Le hablé y ella nos miraba confusa.

Lía estaba muy nerviosa, me senté junto a ella para tranquilizarla. Ella tenía 1 mes de embarazo.

–Bueno, ¿qué fue?–Habló mi madre sentándose al frente de nosotros.

– Pues lo que pas...–El sonido del teléfono de la casa me interrumpe.

Narra Marina.

Me levante a atender.

–¿Quién habla?–Respondí.

–Suegra, soy yo. Estamos aquí en el hospital porque Abby se estuvo sintiéndose mal. Y bueno le están haciendo unas pruebas a ver que tiene, dicen que no es nada grave. Pero igual le tire un call pa' que sepa.–Me informó Noel. Yo asusté un poco, ¿Que pasó?

–Por favor mi niño, avisame cualquier cosa.–Le pedí.–¿Donde están? Voy a ir.– Ya me estaba preocupando. Quería saber que le ocurría a mi niña, pero Christian también dijo que debía decirme algo... Dios Santísimo.

Al final no pude ir, Noel me rogó que me quedara en casa.

Narra Abby.

–Doctor, ¿que tengo?–Le pregunté a médico cerca de mí quien me monitoreaba. Estaba en una camilla con suero a mi lado.

Él me sonrió.

–Que bueno que despertaste. Te tomamos una prueba de sangre, ya que no pareces tener un cuadro anémico.–Aquel hombre aclaró, mirando sus informes. Eso sólo me puso más nerviosa...

El Gatito De Mi Ex. [Noriel Danger] ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora