𝟐𝟒

582 74 5
                                    

–Hola chicos– Saludé a los compañeros de piso de George cuando entramos al departamento. Me devolvieron el saludo.

Hace dos horas habíamos aterrizado, pero por una u otra cosa habíamos tardado en llegar.

El frío que se sentía en las calles de Nueva York dejó de sentirse tan fuerte una vez que me encontré dentro. Retiré el largo abrigo para solo quedar en pants, sudadera y gorro, el cual le había robado con anterioridad a Joji.

Él asiático me dirigió a su habitación llenandome de recuerdos, solo reí y negué adentrándome a ésta. Dejamos nuestras maletas a lado de la puerta del baño y me lancé a la cama quedando boca abajo.

–Había olvidado lo cómoda que es ésta cama– Levanté mi brazo llamando a George– Ven, hay que dormir.

–Adeline, te has vuelto muy floja– Se acostó encima de mi sin dejar caer todo su peso– ¿Qué tienes?– Susurró en mi oído besandolo. En un intento de acomodarme mejor levanté mis caderas haciendo que mis glúteos rosaran con su masculinidad y bajé al instante.

–Lo siento– Me disculpe– Sólo estoy cansada, aparte el frío me da sueño ¿A ti no?

Salió de encima mío para acostarse a mi lado, pase mi brazo sobre su cintura abrazandolo.

–No, cuando estoy contigo lo que menos me da es sueño– Levantó sus cejas coqueto recibiendo un leve golpe de mi parte– Auch– Se quejó– Eso es violencia doméstica ¿Cuándo te he pegado?

–Deberías hacerlo, pero no en éstas circunstancias– Guiñé mi ojo riendo esperando a que entendiera.

–Adeline tranquila, ya se que fue hace mas de un mes, pero tampoco es tanto ¿O si? Yo estoy bien.

–Ni tu te la crees– Me levanté para entrar al baño pero sentí sus brazos rodear mi cintura atrayendome nuevamente a la cama, pero en lugar de sentir el suave colchón sentí los muslos de Joji, dejándome sentada arriba de él ¿He dicho lo cuán geniales son sus piernas?– Ahora tranquilizate tu, están tus amigos– Me removí entre sus brazos tratando de safarme.

–Te recomiendo que no te muevas estando encima de mi– Susurró en mi oído con esa voz ronca que me dejaba mal. Me quedé quieta esperando a que me soltara, eso hizo y me levanté de nuevo.

–¿A que hora se supone que tenemos que estar en Times Square?– Hablé desde el baño, solo quería recogerme el cabello.

–Sobre eso– George llegó recargandose en el marco de la puerta– Digamos que tengo un contacto que hará que nos ahorremos todos los filtros de seguridad y lleguemos a la hora que queramos.

–¿Quién es tu contacto?

–Post Malone.

–Casi nadie– Reí– ¿Va a cantar?– Asintió– Eso es genial.

(...)

A diferencia de ayer, el día de hoy no estaba tan frío, claro que hacía pero era más soportable. Faltaba menos de dos horas para el tan esperado 2020. Joji ya había saludo y presentado a Post, a lo cuál me puse nerviosa, no por ser del mundo artístico dejas de ser un ser humano sin sentimientos y emociones.

Era evidente que estábamos rodeados de miles de personas de las cuales alguna podría reconocernos lo cual no queríamos ninguno de los dos, por ello íbamos cubiertos lo mejor que podíamos hasta el punto de llevar cubrebocas, para que solo nuestros ojos se pudieran ver.

Pasamos el tiempo platicando de cosas al azar y viendo las presentaciones, hasta que la plantalla más alta que había se iluminó con fondo azul y el número '59' haciendo cuenta regresiva. Un minuto solo un minuto para que el año que nadie sabía que iba a ser el peor comenzara.

Los gritos de la gente haciendo la cuenta regresiva era lo único que se podía escuchar, por nuestra parte nos quedamos en silencio viéndonos a los ojos, cuando llegó el número '5' bajé mi cubrebocas junto con el de Joji.

–3... 2... 1... ¡Felíz año nuevo!– Gritó la gente y besé a George, él me recibió gustoso y pasó sus brazos por mi cintura.

–¡Felíz año nuevo!– Dijimos los dos al unísono una vez que nuestros labios se separaron. Le sonreí y volvió a juntar nuestros labios, me alzó en el aire y rodeé su cintura con mis piernas. Realmente lo quería, quería estar con él.

–George, ¿Quieres ser mi novio?– Hablé en su oído y sentí tocar de nuevo el piso.

–¿Qué? ¿Qué eso no lo debo preguntar yo?– Negué.

–No necesariamente, la mujer también puede tener la iniciativa– Me sonrió y besó nuevamente.

–Claro que sí– Me tomó de las mejillas– Pero pronto te lo pediré yo también.

(...)

–¿Y qué planes tienes para éste año?– Cuestioné.

Nos encontrábamos cenando en su departamento los dos solos, sus amigos habían salido de fiesta, claro que nos invitaron pero preferimos quedarnos.

–Si todo sale bien y según lo planeado, sacaré el disco a mediados del año.

–Todavía falta– Hice un puchero– ¿No puedes sacarlo mañana?

–Eso es imposible, aún quedan canciones por grabar, no comas ansias Adeline– Comió un bocado– Después de eso, probablemente se haga una gira. Por cierto, ¿Qué crees?

–Te deseo todo el éxito, George– Entrelacé nuestras manos y el inclinó su cabeza agradeciendo– ¿Qué creo?

–Éste año pasaré más tiempo en California, específicamente LA, la mayoría de los vídeos serán grabados allá.

–¿De verdad? Eso es increíble, ¿Me invitas a las grabaciones?

–Por supuesto, hasta podrías ser la modelo de los vídeos– Negué.

–Ni digas. ¿Te imaginas?– Reí– Siendo sincera lo que menos quiero es que nos vinculen, no quiero que nuestras relación se vea afectada por los medios. Créeme a mi me encantaría gritarle a todo mundo que soy novia del gran George Miller, pero por el momento creo que así estamos bien.

–Estoy completamente de acuerdo contigo. A parte que como ya lo sabes mi vida privada va muy aparte de mi trabajo, no suelo mezclarlas. Definitivamente así estamos bien. Te quiero mucho Line.

–Te quiero más, Joji.

sanctuary // joji  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora