¡Min dame un hijo! [Y.M][#1] [✓]

22

Luego de bañarse y ponerse sus ropas ambos salieron de la habitación, Yoongi tomó de la mano a Jimin para salir y pagar por los tres días que estuvieron ahí, Jimin solo miraba como el peli negro agradecía.

—Tenemos que ir a casa Jimin. —sonrió mientras extendía su mano.

—Hyung debo pedirle una disculpa. —tomó la mano del alfa. —por haber olvidado mi celo.

—Jimin tranquilo. —sonrió. —además también a mí se me olvidó.

—Si, pero no quiero que nada cambie por lo que pasó. —lo vio preocupado. —es mi amigo y me dolería perderlo.

—No me perderás. —lo abrazo. —tampoco nuestra amistad.

Jimin sonrió y lo abrazó se alejó y vio el cuello del pálido el cual tenía chupones se sonrojó al recordar cuando se la hizo, llevó su mano al lugar para acariciarla.

—Perdón por los chupones. —lo vio a los ojos.

—Perdón por dejarte marcas de mordidas en tu vientre. —habló. —debemos de ir a casa para que te las cure.

El omega asintió y se fueron del lugar, un mes pasó luego de aquel hecho donde pasaron el celo junto, Jimin estaba en su casa, el hijo del primo de Yoongi ya estaba con su padre y a decir verdad Jimin extrañaba a ese bebé. También recordó las palabras de una señora que le dijo que se miraba bonito con su alfa y su hijo, Jimin tocó su vientre imaginándose a un cachorro junto con el pálido, pero había un problema o al menos así era para Jimin. Él y el alfa no eran destinados, pero algo dentro de él le decía que quería un hijo con ese alfa pálido y perezoso. Todo el día se la paso pensando en ese deseo incluso no se daba cuenta de los llamados que le hacía el alfa.

—Jimin. —lo movió el alfa.

El omega miró al pálido que lo miraba con cierta confusión, él había estado fotografiando las nuevas marcas de ropa, pero no se había dado cuenta que solo estaban ellos dos.

—Yoongi hyung. —susurro.

—¿Estás bien? —preguntó mientras se acercaba a él.

—Si. —asintió ante la profunda mirada que recibía. —ya, ya debemos irnos. —guardó su cámara.

—Claro. —asintió.

Los dos se dirigieron al auto del mayor Jimin seguía pensando en lo que su mente quería, pero ahora estaba si su hyung también quería, le era difícil saber, pero ¿No era más fácil adoptar? Él sí había pensado eso, pero él deseaba y anhelaba un hijo con su alfa favorito.

—¿Jimin qué ocurre? —le preguntó.

—Son cosas mías. —respondió.

—¿Te ha molestado un alfa de la empresa? —pregunto serio. —si es así dime quien es y hablaré seriamente con él.

—Son cosas de omegas hyung. —lo vio. —no debe preocuparse. —sonrió.

Yoongi no dijo ya nada si eran cosas de omegas no debía de preocuparse, pues sabía que Jimin iba a poder lidiar con eso.