~Confusión~

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-Muy bien señorita, adelante, el faraón la espera-

Entré a aquel lugar y observé a mí alrededor, para luego sentir como alguien me abrazaba

-¡Oye!- Intenté soltarme de su agarre y luego de girarme bruscamente me topé con aquellos ojos color violeta... -¿A-Atem?- Su piel era mucho más morena... y tenía ropa bastante extraña, como si fuera de un... "Faraón" Pensé y recordé a Yugi llamarlo de esa forma la otra vez, pero... ¿Acaso eso tenía sentido?

-¿Qué tienes?- Me preguntó algo confuso

-Es sólo que no me siento muy bien... creo que necesito recostarme- Empecé a sentirme mareada, todo esto se sentía demasiado real

-O-Oye...- Empecé a ver a Atem distorsionado, de pronto sentí como me desmayaba...

-¡HAYAMI!-

Desperté de un sobresalto y cuando giré mi rostro se encontraba Atem totalmente preocupado, al ver su apariencia supe que me encontraba nuevamente en la "realidad" o eso creía.

-¿Q-Qué sucedió?- Pregunté mientras sostenía mi cabeza

-Te desmayaste...- Me dijo mientras me ayudaba a ponerme de pie

-Cielos yo... lo siento, es sólo que todo esto me tomó por sorpresa- Atem me sostuvo con cuidado de la cintura y me ayudó a caminar ya que aún estaba un poco desorientada, quise evadir el tema del beso y también... mientras caminábamos me puse a pensar en el extraño sueño que había tenido ¿Había sido sólo un sueño? Todo se había sentido demasiado real...

Luego de un rato, por fin llegamos a casa, Atem me acompañó a mi habitación...

-¿Segura que te encuentras bien?- Preguntó preocupado, asentí levemente con la cabeza mientras me acomodaba en la cama –Sí...- Pude notar que su mirada había vuelto a la normalidad, aún estaba confundida sobre lo que había sucedido antes ¿Por qué me besó?... me sonrojé mientras cubría levemente la mitad de mi rostro con las sábanas, Atem colocó levemente su mano sobre mi cabeza y luego de unos segundos se retiró del lugar, como si nada hubiera pasado....

Cerré los ojos mientras me quedaba profundamente dormida...

~Sueño~

Me encontraba en un lugar oscuro, únicamente podía ver las palmas de mi mano pues extrañamente emitía un brillo... -¿Dónde estoy?- Musité mientras escuché la voz de alguien.

-Todo volverá a repetirse, es necesario que recuerdes todo...-

Era la voz de una mujer... aunque no me resultaba familiar ¿Quién era? Intenté buscar con la mirada para ver si encontraba el origen de aquella extraña voz, pero, sólo me encontraba yo, rodeada de toda esa oscuridad.

-Debes ayudar al faraón... para evitar que la tragedia vuelva a repetirse-

-¿Tragedia? ¿Qué tragedia? No entiendo nada... ¿Quién eres tú?- Pregunté mientras sentía que mi respiración se aceleraba.

De pronto presioné mis ojos pues un destello realmente fuerte hizo que cerrara los ojos, luego de unos momentos abrí lentamente los ojos y me encontraba sobre... ¿Egipto? ¿Qué estoy haciendo aquí? Estaba básicamente flotando sobre aquel lugar... al girar mi rostro vi a una hermosa mujer con un traje blanco, su tez de color morena resaltaba aquellos ojos color azul.

-Su alteza, es necesario que recuerde el pasado... que recuerde su origen- Ella se giró y yo simplemente no entendía a qué se refería con recordar el pasado ¿Qué es lo que realmente debía recordar? ¿Acaso tenía que ver con aquel sueño extraño que tuve?

-Yo, yo no entiendo que quieres decir...- Me limité a responder, de pronto escuché un estruendoso sonido y los gritos de las personas ¿Qué es lo que estaba pasando?

-La oscuridad está volviendo a aparecer... y sí no la detienen... tú morirás-

Luego de decir aquellas palabras, todo a mi alrededor empezó a desaparecer ¿Qué debía recordar? Realmente no había dicho nada más que decir aquello... y yo realmente no entendía absolutamente nada.... Pero de algo estaba segura, Atem sabía que es lo que estaba ocurriendo...

Fin del sueño

La pequeña alarma empezó a sonar y yo desperté sobresaltada, ya era de mañana y sentía realmente pesado mi cuerpo...

-Realmente esto es...- Suspiré mientras cerraba los ojos nuevamente -¿Por qué está pasando esto...?- Volví a murmurar mientras recordaba el beso que Atem me había dado y me sonrojé "Debo dejar de pensar en eso... seguramente fue por la situación que hizo eso" Pensé y empecé a arreglarme, había quedado con Yugi de adelantarnos para ir a la escuela, al parecer no quería que Atem nos acompañara, pues se sentía aún dolido con lo que había pasado, Atem no lo sabía, pero estoy segura que lo entendería...

-Vamos- Escuché a Yugi decir una vez salí de la habitación, asentí y ambos nos dirigimos afuera de una vez, ni siquiera tomamos el desayuno.

-¿Cómo te sientes?- Le pregunté mientras sentía el frío de la mañana, dirigí mi mirada hacia él y se miraba realmente deprimido, creo que había recibido mi respuesta –Yugi... sé que debe ser complicado después de lo que pasó ayer... pero no puedes estar enfadado con el faraón...-

De pronto sentí como Yugi se detuvo y yo me di cuenta de lo que había dicho -¿Dijiste faraón?- Preguntó mientras me observaba sorprendido.

-N-No, dije Atem...- Me limité a responder sonreí nerviosa -¿Por qué diría faraón? Eso no tiene sentido- Intenté evadir el tema y continué la marcha –Como sea... debes perdonarlo, esto segura que el faraón no tenía intención de que eso sucediera- le dije mientras Yugi nuevamente me alcanzaba –Supongo que tienes razón... aun así no quiero verlo por el momento-

Luego de un rato de estar caminando llegamos a la escuela, nos quedamos en el portón de fuera pues todavía no habían abierto, transcurrió media hora y por fin aquel encargado abrió el portón y ambos entramos, ya algunos estudiantes habían empezado a llegar, nosotros fuimos al salón y Yugi cambió de lugar... realmente se sentía dolido, fui a mi asiento y giré mi vista a la ventana, tenía la cabeza revuelta, quería ayudar a Yugi y Atem a que se reconciliaran, pero... lo que había sucedido el día anterior también me tenía bastante confundida, sobre todo por el extraño sueño que había tenido... porque era solo un sueño ¿verdad? Aunque de cierta forma las palabras de aquella mujer me desconcertaban ¿Iba a morir? ¿Qué todo se iba a repetir? ¿Acaso todo tenía que ver con Egipto... el faraón? Agité mi cabeza y cerré mis ojos, seguramente me estaba tomando todo demasiado en serio, digo... básicamente están diciendo que soy la reencarnación de alguien... pero la pregunta es ¿De quién? -¡Suficiente!- Exclamé y luego abrí los ojos y vi que varios que a habían ingresado a la casa me observaban, incluyendo Yugi, sonreí un poco nerviosa y desvié la mirada, minutos después entró el faraón junto a Tea ¿Es en serio? Lo que menos necesitaba Yugi era ver a esos dos llegar juntos, fruncí el ceño mientras me sentía molesta pero... ¿era por Yugi? O es que... me molesté al verlos juntos...

Continuará....

La flor blanca de EgiptoWhere stories live. Discover now