Invierno

14 1 0
                                    

Llueve tanto y aún no es invierno, mi alma es un barco que navega por las islas de tu abandono, poco a poco te estas desvaneciendo mi vida, minuto a minuto se me hace difícil dejarte ir; debo aceptar que ya no estás.

Como quisiera explicarte lo que siento al saber que esos ojos no compartirán conmigo otra madrugada, bendito sea el ser que tenga la fortuna de verlos de cerca en un ambiente así, he tratado de no escribirte ni buscarte y pese a todo mírame estoy aquí invocando tu hermosa imagen mediante estas letras que espero algún día te atrevas a leerlas.

No te miento quisiera partir muy lejos ya que tengo muy seguro de que no soportaré verte sin que seas mía, quisiera volar a un mundo en donde no tenga que caer en esta agonía de no ir de tu mano.

El tiempo pasa y me duele más que todas las cosas que pude vivir en mi infancia, no me perdono dejarte ir, me odio por no haberte dicho que eras esa luz que guiaba mi existencia oscura.

Sintiendo sollozar al cielo recuerdo esa vez en que nos besamos bajo una lluvia y con ella compartimos un miedo me llena de nostalgia recordar eso es una de las cosas que más recuerdo de ti y aunque te diga muchas cosas por miedo o ira, ten presente muy en el fondo que una parte de mí te pertenece incluso antes de vernos, tocarnos o besarnos.

Quisiera despedirme con un beso que me quema, lo he guardado tanto para ti.

Te pertenece igual que mi alma, mi corazón y todas estas palabras que te escribo derramando un invierno entre mis pupilas.

Posdata: Te amo



MIS DÍAS SIN ELLADonde viven las historias. Descúbrelo ahora