Drakalvania: La Larva de Bielarq

03 La Visita

La semana pasa con normalidad, hasta el viernes, la Sra. Kruise tuvo una complicación respiratoria y tuvo que ser llevada al hospital cuanto antes, tanto el Dr. Smith como la enfermera se quedaron con ella, Raine y la servidumbre están en casa haciendo los quehaceres domésticos bajo un ambiente tenso y de mucho temor, aunque las órdenes de la matrona es no detener las labores aunque esté ausente, no pueden evitar detenerse algún que otro momento para hablar de su estado de salud, unos a otros se preguntan si tenían noticias ya sean buenas o malas.

El teléfono suena, y antes de que Raine pudiera llegar, otra mano más veloz que la suya se interpone, la mano de Myrema, la única nieta de la matrona es quien atiende la llamada, sin dejar de mirar de manera ponzoñosa a Raine habla con el Dr. Smith, Raine no se deja intimidar por la chica, ambas mantienen una mirada desafiante hasta que la conversación termina. Myrema cuelga el teléfono y suspira con pesar, Raine levanta una ceja y cruza sus brazos esperando las noticias.

"Malas noticias..." Myrema pausa un segundo para ver la reacción de Raine y luego continúa "...para ti. Mi abuela sigue viva y volverá a casa el domingo al mediodía, tuvo un ataque de asma pero ya está controlada, debe quedarse en el hospital para ser supervisada." Concluye Myrema con una sonrisa cínica, Raine entrecierra sus ojos conteniendo su enfado, hay un silencio incómodo entre las dos chicas que parece durar siglos.

"¿Qué? ¿Esperabas que te dijera que murió?" Pregunta Myrema de forma sarcástica.

"¿Cómo te atreves a pensar de mí de esa forma? Yo jamás le desearía la muerte a alguien, ni siquiera a tu abuela." Sisea Raine, mientras se acerca a Myrema de forma amenazante, Myrema no se inmuta, tan solo mantiene su sonrisa y comienza a juguetear con un mechón de su cabello rojizo.

"Pero tampoco le desearías buena vida, tú no te atreves a mostrar tu odio y decides ser indiferente, eso es peor ¿sabías?" Responde Myrema.

Raine no responde inmediatamente, a penas dirige su mirada a su sombra proyectada en la pared detrás de Myrema, esta muestra una sonrisa terrible llena de colmillos.

"Sabes muy bien que es verdad." Respondió Eniar con un tono de voz burlón, como si estuviera cantando una canción infantil dulce y a la vez tenebrosa, Raine no le presta atención a su doble infernal.

"Para qué desearle buena vida, si ya la tuvo." Responde Raine, una respuesta muy inteligente que hizo que la sonrisa de Myrema se borrara instantáneamente, pero Raine apenas estaba empezando.

"Nada más mira a tu alrededor Myrema, tu abuela se casó con el hombre más rico del pueblo, heredó toda su fortuna, sus propiedades, viajó a donde quiso, tuvo todo lo que quiso, ¿buena vida? Tu abuela tuvo eso y más." Concluye Raine alzando el tono de voz lo necesario para no levantar sospechas y evitar que la servidumbre se involucrara.

Pero Myrema tiene un as bajo la manga, si hay algo que aprendió de su abuela, es hacer sentir a los demás como escoria a tal punto de que luego pida perdón.

"¿Y tú crees que la muerte de su única hija, mi madre, forma parte de su buena vida? ¿De verdad crees que todo esto supera el valor de mi madre para mi abuela? Ella quemaría todo lo que tiene por tenerla de vuelta." Esa pregunta toma por sorpresa a Raine pero no lo demuestra. Myrema respondió en el mismo tono desafiante y ambas chicas se miran fijamente por escasos segundos, Raine rompe el momento con una sonrisa torcida.

"En primer lugar, eso no es verdad y tú lo sabes mejor que nadie. En segundo lugar, tu abuela no es la única persona en este mundo que ha perdido un ser querido, así que deja de hacerla ver como alguien especial. Y por último, cuando tu abuela muera toda su fortuna quedará aquí para ti, no se lo llevará a la tumba, y adivina que Myrema, lo mismo pasará contigo cuando tú mueras, ¿a quién le dejarás tu fortuna? Venimos del polvo y volveremos al polvo, esa es la ley de la vida y todos estamos atados a ella nos guste o no." Concluye Raine.