10 El Kharadros

1 0 0
                                    

Al día siguiente, Raine despierta con energías renovadas y sus heridas están completamente sanadas gracias a la magia de la recámara de obsidiana.  Jazmín y Russ vuelven a su isla, pero son interceptados por un furioso Byron que quiere arreglar cuentas a como dé lugar. Jazmín no se sorprende de verlo, estaba segura de que él aparecería para defender a su preciada alumna, Russ comienza a ponerse nervioso al ver al Phoerivor de la Muerte con los brazos cruzados y mirando fijamente a su compañera, su aura emana una ira que está a punto de liberarse, no puede evitar sentirse confundido por lo que está ocurriendo, ¿acaso su compañera hizo algo indebido?, ella no le comentó nada cuando llegó a la habitación anoche.

"Oh Rainer, imaginé que pasarías por aquí pronto.  ¿Cómo está tu querida alumna?"   Dice Jazmín con una sonrisa burlona, Byron estrecha sus ojos muy ofendido por el tono de voz de su hermana de armas.

"Si me esperabas, entonces debes tener una idea del por qué estoy aquí."   Dice Byron obviando la pregunta y conteniendo su ira lo mejor que puede, Jazmín se acerca a él de manera retadora hasta que sus rostros quedan a centímetros de distancia.

"Si vas a terminar lo que tu alumna dejó inconcluso, adelante, yo no te tengo miedo."   Dice Jazmín en tono amenazante, Byron sonríe de manera maliciosa.

"O eres muy valiente o eres muy tonta, tu jamás me has ganado en una pelea y no espero que lo hagas pronto.  Y aunque me encantaría ponerte en tu lugar, tengo asuntos más importantes que atender, así que le concederé el honor al Gran Ente."   Dice Byron manteniendo su sonrisa maliciosa.

La expresión de Jazmín cambia de confiada a sorprendida, Byron la toma de los hombros y a pesar de las protestas de Russ, se la lleva ante El Gran Ente quien ya sabía lo ocurrido el día anterior.  Byron deja a Jazmín con el gran jefe, Él decidirá cuál será la mejor manera de reprenderla, sea cual sea el castigo, no será del agrado de Jazmín.

Al volver a la Isla de La Muerte, Byron se encuentra con una Raine muy ausente, está sentada sobre una roca mirando hacia el infinito con sus piernas recogidas a su pecho y abrazándolas como si su vida dependiera de ello.  Byron se acerca a ella cautelosamente y se sienta a su lado, Raine suspira y mira por un instante a su maestro con ojos llenos de decepción y los vuelve a dirigir al horizonte, mientras él piensa que hacer para levantar sus ánimos y sanar su orgullo herido.

"Ya me encargué de Jazmín.  El Gran Ente le dará un castigo apropiado."   Dice Byron mientras continúa acariciando la cabellera de su alumna.  Raine solo asiente y Byron la observa un poco preocupado.   "¿Ocurre algo?"

"Es solo que... estoy molesta por haber perdido esa pelea.  Yo no quería hacerlo, no quería pelear, pero ella me obligó y por más que me esforcé, no pude igualarla."   Responde Raine mientras esconde su rostro entre sus rodillas.  Byron suspira y abraza a su alumna para confortarla.

Byron puede entender a Raine, el hecho de haber sido humillada por casi toda su vida y ahora que tuvo la oportunidad de demostrar su valor, alguien más aparece para pisotearla, está seguro que Raine se debe sentir que su destino es estar por debajo de alguien, ser pisoteada por alguien que se considere superior y eso le está carcomiendo el alma.

"Oh Raine, sé cómo te sientes, pero no debes tomarte eso tan en serio.  Jazmín es una de las Phoerivors más antigua de la actualidad y tú eres la más joven.  Primero: El hecho de que ella se haya metido con un aprendiz, no la hace superior, al contrario, es simplemente una bravucona que teme meterse con alguien en igualdad de condiciones."   Dice Byron y toma el rostro de su alumna para que lo mire a los ojos.   "Segundo: Aún tienes mucho que aprender, batallas que pelear.  En el camino tendrás victorias y derrotas por igual, como todos nosotros. La victoria es una de las cúspides de la montaña de la vida y las derrotas son una lección, solo eso, no son el fin del mundo. Aprende de ellas y vuelve a intentarlo."   Concluye Byron sin dejar de mirarla a los ojos.

Drakalvania: La Larva de BielarqDonde viven las historias. Descúbrelo ahora