Capitulo trece:¿Qué seremos mañana?
Un espolvoreo rosado cubrió sus mejillas como una suave brisa veraniega, en un perfecto conjunto con su palida piel, encantando a el rubio descolocado frente a el.La banda ninja de su niñez descansaba sobre sus manos, mientras el viento movía en un vaivén lento las puntas de la tela. Levanta su mirada avergonzada encontrándose con la celeste maravillada de Naruto. Ama esa mirada.
Aprieta el elemento entre sus manos con fuerza, es conciente de que este es solo otro intento desesperado de su compañero para mantenerlo a su lado. Un «Esto significa que este es tu hogar, quédate» al que le cuesta negarse. Pero tiene que hacerlo, el gran poder que tiene ahora es un tesoro que muchos desean y el hecho de que concidere Konoha su hogar lo obliga a alejarse.
Solo provocaría daños y conflictos, prefería estar a las afueras, protegiendo desde las sombras. Ese es su extraño estilo.
Suspira al ya no sentir las miradas de Kakashi y Sakura en su nuca, al parecer por fin les dieron su espacio. Nota como Naruto espera su respuesta, posiblemente algo como «me arrepiento, haré lo posible para quedarme» pero los corazones de los dos saben que es imposible.
Ni él, ni Konoha estaban preparados para perdonarlo aún; tal vez nunca.
– Gracias. – libera, es conciente de que es muy seco, pero dentro de su cabeza esa palabra está cargada de un millón y más de emociones.
Unos labios se posan sobre los suyos, callando cualquier intento para reacomodar tanto sus palabras como sus emociones. Se mueven de manera suave y lenta aunque la textura es más áspera de la que esperaba, seguramente por tanto gritar, después de todo es algo que Naruto desperdicia totalmente.
De una manera torpe le sigue el ritmo, los pocos besos que a dado no son más que picos de medio segundo que provocan un momento especial, pero esto era un estallido de emociones que revoleteaban en su panza haciéndole cosquillas penosas.
Un exquisito sentimiento de querer más lo invade, asemejando que el fuerte viento que los azota derrepente, moviendo violentamente las hojas de los árboles alrededor, es un reflejo de su necesidad.
Cierra sus ojos con fuerza al sentir las manos del rubio tomar su cintura, atrayendolo. Se cree algo tonto cuando casi se cae de frente al no ver venir el movimiento y sumando la falta de un brazo a la cual aún no se acostumbra. Rodea el cuello de Naruto con su brazo, en un vago intento de intensificar el beso, sientendo cómo se le eriza la piel cuando el rubio cola la lengua ajena dentro de su boca.
Un picor se empieza a extender por su pelvis obligándolo a separarse del beso, tomando bocanadas de aire, sabe lo que se avecina cuando se encuentra con esa sensación y no está preparado para irse con una erección en sus pantalones.
– Siempre tan malo teme. – habla relajado, fastidiando a Sasuke.
– eres un dobe. – mueve un poco las caderas, en busca de que el contrario lo suelte y lo logra, avergonzando a Naruto.
– Al final nos volvimos a ver. – lo mira directo a los ojos, con una sonrisa radiante.
La brisa frena y por un momento el tiempo se detiene, las nubes que cubrían los rayos solares se apartan iluminando los rostros de ambos dándoles un toque brillante a su piel. Sus miradas se profundizan y Sasuke tira las comisuras de sus labios en una suave sonrisa desbordante de cariño.
No sabe en qué momento pasó, tal vez desde aquella vez en el puente del lago o cuando ingresaron a la academia, pudo haber sido cuando le salvó en la trampa de espejos de Haku y quién sabe, también en ese local de ramen que tanto le gusta al rubio; pero definitivamente le dió un flechazo de un amor profundo que no se pudo quitar en tantos años.
En ese momento en que lo tiene justo en frente de él, se pregunta ¿Que seremos mañana? Recordando aquellos años en que no podía acomodar sus sentimientos, pasando de ser rivales a compañeros y de compañeros a enamorados de un día para el otro. Pensando en que hace unas cuentas atrás era un vengador y ahora intenta redimirce; que Naruto era un chico huérfano bueno para nada y ahora un héroe.
Lo único que faltaba es que cuando volviera a la aldea ya sea Hokage.
Una risa para nada disimulada le sale y escucha un carraspeo de parte de Naruto. Vaya, pareciera que está más alto ahora.
El rubio posa una de sus palmas en la mejilla del contrario, erizando su piel ante la diferencia de temperaturas, Sasuke siempre tuvo la piel más fría, nunca entendió la razón. Acaricia con su dedo pulgar el rostro ajeno mientras le mira con dulzura, siente que seguramente Sasuke piensa que todo esto es demasiado cursi, pero necesita hacerlo si sabe que no lo volverá a ver por un largo tiempo.
Si tiene que poner sus neuronas a trabajar para pensar en qué términos quedan realmente no tiene idea, cada vez que no sabe que hacer en una batalla solo crea clones de sombra y ya. Oh, la idea no estaba muy mal, capaz podía crear un clon de sombras que se encargue de acompañar a Sasuke. . . Pero no duraría mucho, pronto se le acabaría y el chacra y desaparecía.
Una mueca triste se forma en su rostro y Sasuke le deposita un par de besos rápidos por la mejilla y la nariz, tiene los ojos cerrados y las mejillas sonrosadas por la vergüenza así que no nota cuando le da en un ojo y tiene que aguantarse el dolor. Ah. . . Lo que uno hace por amor.
A veces se ponía a pensar en como hubiera sido tener unos padres presentes, una familia numerosa y amorosa, pero cuando Sasuke se le venía a la cabeza todo eso se iba para la mierda. Aunque bueno, el azabache era algo ausente, no tan amoroso y no podía darle una familia numerosa, poco le importaba, sabía que estaría allí en los momentos difíciles.
Ahora, separados por dos pasos de distancia, ya se quedaron sin palabras. Aunque bien saben que ellos no las necesitan para comunicarse. Quieren decirse millones de cosas, como se quieren, se necesitan, pero sus miradas todo lo dicen, el ojo negro con una profundidad interminable junto con el rinegan brillante y los celestes esperanzadores de Naruto.
Un llanto silencioso se da por parte de los dos, no saben cuánto tiempo estarán separados y eso los frustra de sobremanera, podría ser una espera interminable.
– Seré Hokage para cuando vuelvas así que preparate. – sonríe con satisfacción en medio de sus lágrimas.
– Cuando lo vea lo creeré.
Intenta tomar la última palabra, dándose la vuelta dispuesto a irse, pero no llega a levantar su mano en forma de despedida que Naruto lo tomo de la cintura y acerca sus rostros.
– Suerte.
Pronuncia antes de envolverlo en un fugaz beso que Sasuke corresponde gustoso.
– No necesito suerte. – susurra contra los labios ajenos, juntando sus frentes.
Naruto suelta una risilla por lo bajo, nunca cambiaría.
– Te amo. – hablan al mismo tiempo; y se sonríen.
Nomematenporfavor. 👊😔
Sé que quedó muy 💫para la mierda💫 pero quedó bien igual así que así queda.
Espero que les haya gustado, gracias por quedarse hasta el final, voten, comenten, sigan gracias gracias ✌️😭
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Nadie que nos explique.¡! Narusasu.
FanfictionNaruto y Sasuke son jóvenes entrando en la adolescencia, no tienen quién les explique los cambios en sus cuerpos. Encontrándose por la duda deciden ayudarse mutuamente. ¿cómo afectará esto en su relación? Portada en proceso. (🍅!¡ Historia Narusasu...