━━━ Honor.
❪ 𝗺𝘆 𝗵𝗲𝗿𝗼 𝗮𝗰𝗮𝗱𝗲𝗺𝗶𝗮 ❫
Una historia más de
@Yuureid.
(Antiguo user; Lachicaotaku3xd.)
𝕬 ❯ 𝗱𝗶𝘀𝗰𝗹𝗮𝗶𝗺𝗲𝗿: están prohibidas las copias o adaptaciones de esta historia.
𝕬 ❯ 𝗲𝘀𝘁𝗮𝗱𝗼: en emisión + actualizaciones...
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"I will carry this
grief in my blood".
...
Pov Omnisciente.
—Shinmeiyo, ¡despierta!
Un dedo tembloroso se contrajo, y sus oídos se agudizaron para captar esa voz, familiar y persistente, pero que, a pesar de todo, no lograba asociar con un rostro. Todo su cuerpo estaba en un estado de dolor punzante, su nariz se retorcía ante un olor dulce y malsano que le revolvía el estómago en nudos.
Algo estaba mal. Algo estaba terriblemente mal.
—Joven Heredera, ¡despierte, por favor!
Alguien intentaba mover su cuerpo, arrastrándolo desde donde yacía boca abajo sobre la nieve. Quienquiera que fuera no tenía la fuerza suficiente para levantarla, y los sollozos solo se hacían más fuertes a cada segundo.
— ¡¡Llamen a los ancianos del templo!!
Quería extender la mano y consolar a la persona. Quería tocar su mejilla y decirle que todo estaría bien. Pero incluso en su confuso estado mental, es consciente de su incapacidad de hacer cualquier cosa en este momento. Había perdido tanto, ella había perdido tanto... de sí misma en solo unas horas.
El frío comenzaba a hacer mella en su conciencia, llevándolo lentamente hacia un estado de sopor.
— ¡Llamen al hospital más cercano!
No se había dado cuenta de que su mano ya estaba siendo sujetada por otra, con tal firmeza que parecía concentrar todas sus últimas fuerzas en no soltarla. Esta persona, con una mano más ancha y áspera que la suya, se sentía inusualmente... más fría que ella.
Algo dentro suyo quería llorar. Algo dentro suyo quería gritar. Algo dentro suyo quería comer, comer, comer... El aroma que había percibido antes regresaba con venganza, anulando sus otros sentidos, y lo siguiente que supo fue que estaba abriendo los ojos, con la saliva escurriendo por sus labios entreabiertos.
De repente, soltó un jadeo cuando todos los recuerdos volvieron a su mente. Durante ese movimiento, sus pulmones se contrajeron, obstruyendo la oxigenación de su cuerpo.
Ah, así que eso fue lo que ocurrió.
Así que había perdido.
Había fallado.
...
Entonces, Shinmeiyo despertó.
Y todo lo que vio fue el techo de su habitación.
Alcanzó su cuello, notando su pulso acelerado. Se concentró en su respiración, permitiendo que su cuerpo se relajara y esperando que los espasmos de ansiedad disminuyeran.
