Arranged? | Minsung ⇢ Traducción (en edición)

2.3

Minho cerró la puerta principal de su casa y dejó caer sus zapatos al suelo. Tenía tanta prisa por irse que ni siquiera se dio cuenta de que no se había puesto los zapatos. Miró al suelo y suspiró.

"¿Minho, cariño?" La madre de Minho salió de la sala de estar con una expresión muy preocupada en su rostro.

Minho la miró y sonrió levemente, "Hola, ¿Cuándo regresaste?"

"Ayer, tu padre tuvo que quedarse unos días más, así que tomé un taxi a casa", le dedicó una cálida y feliz sonrisa. "Minhee me dijo que no volviste a casa anoche y estaba preocupada, ¿Dónde estabas?"

Minho puso los ojos en blanco y se acercó a ella. "Salí con unos amigos, Seungmin regresó el otro día, así que nos íbamos a encontrar de nuevo".

"Entonces, ¿Por qué no estabas en casa anoche?" Preguntó de nuevo, cruzando los brazos. Ella sabía lo que había pasado, y Minho estaba tratando de evitar decirlo porque sabía que ella odiaba cuando bebía.

"Supongo que me emborraché un poco y me quedé dormido en el lugar en el que estábamos, así que un... Amigo, tuvo que llevarme a su casa por la noche porque era tarde".

Su madre suspiró y se frotó las sienes. "¿Sabes cómo me siento acerca de que bebas Minho, y quién era este amigo? Dudaste".

Minho se encogió de hombros, "Solo alguien, nadie importante", se burló, más destinado a Jisung a pesar de que no estaba allí.

"¿Quién?"

"Lo conoces, ¡Eso es todo lo que importa! Oye, estoy realmente cansado, así que debería irme, ¡Nos vemos!" Minho dijo rápidamente y pasó corriendo junto a su madre, subiendo las escaleras.

"¡Minho! —Ah, lo juro..."

"Así que sí, estoy hibernando en mi habitación hasta que esos dos idiotas perdedores se casen y, con suerte, se muden y nunca tendré que volver a ver a ninguno de ellos." Minho gritó por teléfono con falsa emoción.

Felix suspiró, "¿Qué pasó? Jisung te llevó a su casa anoche, ¿Verdad? Derrama el té".

"¿Qué té?, no hay té, de hecho, odio el té, es asqueroso"

"Minho, a ti te encanta el té, ¿De qué estás hablando? Te compré un paquete de veinticuatro tés para tu cumpleaños el año pasado..." 

"Como sea ¿Has tenido noticias de los demás? ¿Cómo están? ¿Todos están bien? "

Felix se quedó callado por un minuto antes de suspirar lo suficientemente fuerte como para que Minho pudiera escuchar su molestia. "Deja de intentar cambiar de tema, apesta. Ahora dime qué pasó".

Minho murmuró algo, que Felix no entendió en absoluto.

"¿Qué? No pude oír eso—"

"Me besó."

"Woah espera, qué demonios, no esperaba que yo... uh, ¿Por qué? ¿Estás bien?" Felix entró en pánico por teléfono.

"Sí, claro, supongo, pero le conté lo que pasó entre Minhee, Chan y yo, dijo que lo sentía y yo estaba como, ¿Por qué te disculpas por no haber hecho nada? Luego fue y me besó y lo aparté porque ajá, no, gracias perra," Minho susurró a su amigo, sin querer arriesgarse a que Minhee lo escuchara hablar.

"¿Le devolviste el beso?"

"No, diablos, no lo hice, ¿Por qué iba a hacerlo?"

Felix se encogió de hombros y se movió para sentirse más cómodo, "No sé, solo estoy haciendo las verdaderas preguntas aquí, amigo".

Minho puso los ojos en blanco, "Por supuesto".

"Sin embargo, deberías hablar con él, si te besó, obviamente significa algo", dijo Felix, y tenía razón, pero Minho no quería creer eso.

"Significa que tengo que ignorarlo hasta que se case con mi hermana—

"No estúpido, significa que probablemente, muy probablemente, le gustas. Maldita sea, qué tonto eres", murmuró Felix.

"Soy muy inteligente, muchas gracias", se burló Minho, "Y no le gusto".

Justo cuando Felix estaba a punto de decir algo más, el teléfono de Minho sonó. "Lo siento, alguien me está llamando", alejó el teléfono para mirarlo y casi se atragantó, se negó y se llevó el teléfono a la oreja, "Es la perra".

"¿La perra? ¿Te refieres a Jisung?" Felix cuestionó.

"Sí—"

"¿¡Y lo rechazaste !? ¡¡Si no le devuelves la llamada, destrozaré el certificado de mejor amigo !!" Felix estaba gritando tan fuerte que Minho tuvo que apartar el teléfono.

"Vaya, ¿De qué certificado estás hablando?" Minho preguntó, muy molesto.

"El de mi corazón".

Minho jadeó, "No lo harías".

"Pruébame. Perra."

Minho gimió y frunció el ceño, "Pensé que me amabas".

"Lo hago, hago esto porque te amo. ¡Ahora llámalo! ¡Adiós y buena suerte!" Felix gritó y colgó.

"Jaj, sike—" Minho estaba a punto de guardar su teléfono cuando su teléfono sonó de nuevo. Era Jisung, por supuesto.