Ocean Eyes -Regulus Black-

Capítulo 24

Colette Doherty amaba a sus hijas y aunque Genevieve no fuera suya biológicamente, ella la había críado desde que era una bebe,  podía decirse que era tan suya como lo eran Agatha y Bernedice.

Así que nada le dolía mas que el hecho de que su hija del medio ni siquiera volteara a mirarla durante esas reuniones del infierno en la mansión Malfoy. El único momento en que la veía.

Genevieve Black no quería saber nada de la familia que la había críado. A pesar de estar muy agradecida con ellos por haberle dado refugio y alimento durante toda su vida, no toleraba la idea de que le hayan mentido de esa forma por tantos años ni mucho menos que le hayan hecho tantas exigencias cuándo ni siquiera era su hija.

Cuándo ni siquiera era una sangre pura como ellos, ¿o lo era? Según lo que Tom le había dicho, Genevieve Riddle jamás había averiguado quienes eran sus padres, así que se limitaban a decir que era mestiza, como él (aunque sus seguidores no estaban al tanto de esto último)

Genevieve jamás pensó que volvería a conectarse con su madre adoptiva, una mujer a la que consideraba fría y superficial. Pero se llevó una gran sorpresa cuándo la vió sentada en una silla en los cuarteles de la Órden del Fénix, como si fuera su lugar en el mundo.

En tanto Regulus había comenzado a moverse nuevamente, él y Genevieve se comunicaron con Dumbledore, quien luego de escuchar todo lo que tenían para decirle, les ofreció ser parte de la organización secreta que había formado para detener a Tom, ambos en calidad de espías.

Las reacciones del resto de los miembros fue variada, algunos estaban de acuerdo y otros sospechaban fuertemente de dónde estaban sus lealtades realmente. Pero nadie era mas feliz que Lily Potter ni mas miserable que Sirius Black.

Lily, quien se había casado hace un año con James Potter, estaba feliz de ver a su vieja amiga nuevamente y aún mas de verla en su equipo. La hacía ser consciente del largo camino que Genevieve había recorrido de ser una niña obediente a una espía en el medio de una guerra en la que ni siquiera tenía que involucrarse.

Sirius veía lo mismo, y eso lo hacía sentirse peor. Durante dos años lo había reconfortado el hecho de que, al menos, ella no era tan perfecta como él creía. No si tenía un punto de vista que defendía las acciones de Lord Voldemort. Pero estaba equivocado.

-¡No puedo creer que estás embarazada!-gritó Lily en cuánto la reunión terminó, con clara emoción en su voz.

La pelirroja abrazó fuertemente a la rubia, ambas no se veían desde que la primera se graduó de Hogwarts. James se acercó también y le dió una sonrisa a Regulus, él la devolvió aunque sin tanta emoción, aún no lo perdonaba por haberle robado a su hermano.

-Esposas ¿eh?-bromeó James.
-Ni que lo digas-respondió Regulus en un tono que delataba ser falso.
-Felicidades por el bebe-dijo incómodo.
-Si, gracias-asintió-estamos emocionados.
-No pensé que llegaría el día-intervino Lily-aún eres una niña-dijo en dirección a su amiga.
-Fue una sorpresa para todos-río ella tomando la mano de Regulus.

La relación entre Genevieve y Regulus se había fortalecido más después de la boda, especialmente desde que salieron de Hogwarts y comenzaron a vivir juntos en la casa que Orion y Walburga les obsequiaron como regalo, pocos meses antes de que Orion falleciera y Walburga decidiera que no volvería a salir de su propia casa.

De esa forma, Regulus se sentía igual de solo que Genevieve y ambos decidieron que crearían una familia solos, ahora, ellos y el o la bebe que venía en camino.

Aún ninguno de sus amigos estaba enterado de la noticia, particularmente porque ninguno de ellos estaban en la ciudad.

Evan era un mortífago de tiempo completo, teniendo una gran fortuna familiar que respaldara su deseo de no trabajar. Contrario a Aria, que a pesar de poseer los millones de su marido, estaba trabajando como sanadora en San Mungo.

Adrian estaba escribiendo para "El Profeta" y planeaba escribir un libro propio muy pronto, el tema era aún desconocido pero se encontraba de viaje por algún lugar de Asia haciendo investigaciones.

Y Theo y Sateen habían contraído matrimonio recientemente y estaban en el sur de Francia en su luna de miel. Antes no podían estar dos segundos sin pelear y ahora simplemente no hablaban, solo se besaban todo el día para el disgusto de sus amigos.

-Es bueno tenerlos aquí-dijo Lily-nos alegra mucho.
-Creo que son los únicos que piensan eso-río Regulus sarcásticamente.
-Si lo dices por Sirius-intervino James-él solo necesita tiempo, esto es difícil para él. Y los demás tienen sus reservas, aún no los conocen bien.
-Colette Doherty...-comenzó a hablar Genevieve.
-Tu madre-intervino Lily.
-Si, ella-le restó importancia-¿Que hace aquí?
-Es parte de la órden, se unió luego de tu boda-explicó-ha estado aportando información.
-No creí para ver el día en que ella iría contra Charles-río Genevieve.

-Yo tampoco lo creí.

Los cuatro voltearon para ver a la mujer antes mencionada acercarse. Con emoción en sus ojos, emoción que no se presentaba en el resto de su cara. Genevieve la observó atentamente, parecía sana y había una luz rara en ella que nunca antes en su vida había visto.

-Con Agatha y tú ya casadas-dijo-mis funciones como madre y esposa terminaron. Ahora es tiempo de ser una mujer propia.

Genevieve sonrío sin darse cuenta, sin ser consciente del orgullo que le hacía sentir ver ese cambio en una mujer tan devota a su marido como Colette.

-Es bueno verte madre-dijo suavemente.
-También a ti querida-le sonrío.