Capítulo 12

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La caballero y la princesa salieron de la cocina con prisa, y pese a que el castillo estaba vacío no podían levantar sospechas y Clarke sabía que ya lo estaba haciendo con su ausencia en la entrada.

La princesa mientras caminaba hacia las puertas del castillo, veía de reojo al caballero. Realmente le intrigaba qué quería pedirle para que creyera en su palabra, pero a su vez, Clarke estaba interesada en que realmente esta le pudiera ayudar con lo que ella tenía en mente. Es así que antes de cruzar y salir hacia el jardín central, la princesa se giró deteniendo cualquier otro movimiento.

—Espera —dijo nada más voltear y si no fuera porque la caballero frenó en seco, ambas habrían chocado sus cuerpos.

—¿Qué sucede? —dijo en un tono claro pero bajo, la caballero.

—No podemos salir.

—¿Qué? Pero usted misma dijo que...

—Sé lo que dije —interrumpió y alzando levemente sus manos para dar más énfasis.

Lexa hasta ese momento estaba empezando a molestarse haciéndolo notar al resoplar dentro de su casco. La princesa lo notó.

—Dime qué necesitas —soltó la rubia.

—Se supone que es peligroso —le volvió a insistir la caballero.

—No, si lo hacemos rápido. —La princesa seguía bloqueando la puerta con su cuerpo.

La castaña tenía la expresión más confusa del lugar, ahora sí que era cierto que estaba desconfiando enormemente de ella pese a que le advirtiera que cualquiera podría ir a buscarlas por su ausencia.

—Bien, pero dudo que lo pueda cumplir ahora mismo.

—¿No es algo del castillo? —la rubia alzó una ceja.

—Sí y no.

La princesa seguía sin comprender. Mientras que la caballero miró a su alrededor para volver a cerciorarse de que nadie las oía ni las veía.

—¿Entonces?

—Quiero que mande otro barril de provisiones a las afueras del castillo.

La princesa tenía su entrecejo arrugado.

—¿Cómo es que...?

—La oí conversar con su madre —dijo con simpleza.

Clarke quedó un par de segundos en silencio, pensar que si no hubiese sido aquella chica caballero quien las hubiera escuchado, habría tenido graves problemas con su padre el rey de haber sido por alguno de los borregos soplones del capitán de caballeros quien las hubiera escuchado.

—Pero... ¿por qué quieres que envíe más? Es decir, con lo que envié es más que suficiente —su curiosidad fue evidente.

—Esta vez no de comida, sino de ropa y algunos materiales que puedan usar para reparaciones... —Lexa fue un poco más específica.

Clarke la miró con los labios ligeramente separados y quiso seguir preguntando, pero la caballero se enderezó dándole a entender que ella ya no diría nada más al respecto. Fue así que la princesa también se enderezó, y por alguna razón se sintió intimidada.

—Está bien... lo haré, pero no puedo mandarte a ti otra vez. Sería muy sospechoso.

La caballero por más de que le hubiese gustado ir nuevamente, concordaba con la princesa, teniendo en cuenta el regreso del rey, arriesgaría su posición enormemente.

—Lo único que sí te voy a pedir es un poco de paciencia, al menos dos días...

—¡¿Dos días?! —la caballero se alteró entre susurros provocando que la princesa retrocediera unos pasos.

La realeza [Clexa AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora