West Coast (crepúsculo) (Pausada)

- La venganza -

La venganza.

Puede ser tan dulce y tan amarga. Siempre se ha dicho que la venganza se planea mejor en frío, con la mente clara y despejada. Skadi había tenido mucho tiempo para eso... bueno, toda la tarde y noche para ser exactos. Podía haber pensado algo mejor, haber planeado una venganza para Mary digna de ser recordada, pero realmente ella solo quería devolver el golpe y ya tenía el objetivo fijado.

Mary había traspasado una línea en el instante en que se metió con su zorro y quería darle una lección. Quería que sintiera algo similar a lo que ella había sentido. El horror, la rabia, la impotencia de no haber podido hacer nada. No supo de donde sacos aquel lado tan malvado pero no le disgustaba. Estaba cansada de Mary.

Estaban casada de sus constantes ataques, de sus provocaciones sin sentido. Estaba cansada de que todo el mundo le dijese que olvidara, que lo ignorará. No, eso no iba a funcionar, estaba claro. Así que pensó en actuar.

Ella observaba en el aparcamiento, ese día llegó antes solo para sentarse y esperar. Observó a los alumnos llegar algunos andando y otros en sus coches. Edward trajo a Bella de nuevo, ambos se adentraron en el instituto. El resto de los Cullen llegó en el coche rojo, al bajarse Jasper la miró con curiosidad y se acercó.

-¿Qué haces ahí sentada?

-Espero

Alice, Rosalie y Emmett siguieron al rubio y saludaron a la castaña. Esta les respondió pero estaba concentrada en el aparcamiento. Los Cullen siguieron su mirada, para ver que observaba con tanta concentración.

Mary acaba de aparcar su coche negro, no sabía de coches pero debía ser ostentoso (no al nivel de los Cullen) pero lo suficiente como para lucirlo orgullosa. Ella sonrió.

Esa era su venganza, aquel coche que tanto apreciaba iba a sufrir por lo que ella le había hecho a su mascota.

-No merece la pena. -dijo Alice viendo su intención.

Para ella si la merecía. No podía quedarse de brazos cruzados mientras su mente daba vueltas a lo que había hecho.  Ignoró su comentario y se levantó, sintió a Jasper caminar a su lado sin problema.

-No lo hagas.

-No sabes que voy a hacer.

-Si lo sé, y eso solo traerá más problemas...

Ella se paró en secó mirándolo, por un instante dudo. Él no le pedía muchas cosas, pero... ¿por qué eso? No podía dejar que Mary se saliera con la suya después del crimen que había cometido. Pensar en aquello solo la enfureció, fue como echar más leña al fuego.

-Tengo que hacerlo. - esperaba que él la entendiera.

Ella siguió su camino. No había nadie en el aparcamiento y entonces aprovechó y con las llaves de casa rayo el coche. No una una vez, sino todas las veces que quiso en diferentes sitios hasta que se sintió mejor.

Aquella acción no suponía ningún cambio, su zorro no se encontraría mejor, pero si tenía que reconocer que se sintió bien. El zorro con el tiempo se curaría de la intoxicación.

Se guardó las llaves y volvió para el instituto, dejando a los Cullen atrás.

-Recuerdame que no discuta con la fierecilla. -dijo Emmett al ver el estado del coche.

Al terminar las clases, Edward acompañó a Bella hasta su coche. Skadi caminaba junto a Alice, esta hablaba de un conjunto lindo que había visto ideal para ella.

Un grito aterrador hicieron que ambas se parasen en sus sitios. No era un grito de miedo, era más un alarido de furia.  Skadi sonrió diabólicamente. Sabía de quién era aquel alarido y por qué.

Mary se acercaba a ella hecha una furia. Iba a golpearla, sus manos estaban cerradas en un puño que al estar frente a Skadi estiró. Casi por puro instinto, retrocedió y esquivo el golpe pero detrás de ese venían más.Era el momento de poner en práctica lo aprendido con Jasper.

¿Ella quería golpearla? Bien. Llegados a ese punto ya no le importaba ser expulsada, pero iba a desquitarse con Mary de una vez. Sabía que no estaba bien aquello, pero... iba a hacerlo de todas formas.

La pelirroja la agarró del pelo, fue doloroso pero era el impulso necesario para golpearla. Un golpe en su estómago que provocó que la soltará y tuviera que retroceder.

-Basta, tenéis que parar esto ahora mismo. -dijo Alice sin poder meterse.

Los puños cerrados de Mary iban directos hacia la castaña algunos los esquivo pero uno impactó en el labio. Skadi la agarró del pelo tirando hacia abajo, iba a golpearla cuando unos brazos la envolvieron levantándola del suelo.

Jasper la arrastró lo más lejos posible con la respiración contenida. Alice y Rosalie despejaron los ojos curiosos que habían observado la pelea.

-Déjame Jasper. -gruñó ella.

De nada servía retorcerse, era un vampiro más fuerte que ella que la sostenía en alto desde atrás. Él la alejó todo lo que pudo de la pelea pero por desgracia en esta ocasión si hubo espectadores por lo que las acciones de Skadi tendrían consecuencias.

-No hasta que te calmes.  -él la dejó apoyada en la pared de un edificio con su mano apoyada en en su hombro ejerciendo presión para que no se moviera.- Tu labio está sangrando.

Ella lamió su labio y sintió el sabor metálico de la sangre, miró a Jasper a los ojos. Su mirada se había oscurecido hasta una negrura absoluta. Podía controlarse pero tenía sus límites y a veces se sentía demasiado cerca de ellos. Ella colocó su mano agarrando la muñeca de él, piel con piel, solo entonces él pareció calmarse pues sus ojos ya no tenían esa negrura.

-Estoy en un buen lío ¿verdad?

-Probablemente. -él la sintió más tranquila por lo que se alejó. Necesitaba alejarse del olor a sangre. Ella se cruzó de brazos y desvió la mirada desanimada.- Debo admitir que me has sorprendido. Esquivaste bien los golpes.

En realidad Jasper pensaba, si Skadi era así siendo humana, que le esperaba si ella... No terminó aquel pensamiento, no quería imaginarlo.

Ella lo miró con una sonrisa. Sus pensamientos se habían perdido, pensando en aquella muy posible expulsión que la esperaba pero había merecido la pena.

-¿Tú crees? -él asintió.

Ella suspiró dejándose caer en aquella pared.

-Sé que debería sentirme mal, pero... Sé lo merecía, no me importa acabar expulsada...

-Skadi, déjalo. Esta vez no hagas nada. -dijo él muy serio- Esto tiene que acabar, así que déjamelo a mí. -dijo con una sonrisa maliciosa.

Una profesora llamó a Skadi en ese momento y ella se levantó sin problema. Sabía a dónde iba, iría con el director y la expulsarían 3 días escolares, también mandaría una carta a su casa, así que sus abuelos se enterarían de lo ocurrido.

Tenía que pensar una manera de explicar todo lo que había pasado, pero aún así ya se veía castigada de por vida...

Lamento si es más breve que los anteriores :3

Jasper haría lo que fuera por ella, y eso me gusta me parece tan adorable.

Ambos tienen sentimientos que no saben manejar... Pero tan solo necesitan tiempo.