Capítulo 10.~Camille.

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Me arrepiento tanto de haber dejado el carrito abajo; esta mañana entré al edificio y caminé directamente al ascensor ignorando al guardia. Dejando al carrito...

Por alguna bendita razón él no dijo ninguna palabra, solo se dedicó a seguir mis pasos con la mirada.

Por fin se abrirán las puertas del elevador, tomo las bolsas de los sándwiches del suelo y las puertas se abren...

Él está ahí, mirando a mi dirección, y puedo jurar que mirándome. Sonrío y él también lo hace. Definitivamente me estaba viendo. Dejo los sándwiches correspondientes a los primeros cubículos hasta llegar hasta él.

- Por juzgar tu cara estas contento de verme- digo -pero para ser realistas estás mas contento por ver esto- digo levantando una de las bolsas.

Y el sonríe apenado.

Yo le correspondo la sonrisa.

- Siento a ver me ido sin despedir ayer- lamento.

-No te preocupes, después de esa cena quien no se hubiera ido a su casa a descansar-bromea.

Asiento con la cabeza. Empieza a caerme muy bien.

Busca en el cajón del escritorio algo, pero parece no encontrarlo y busca en el abajo no sin antes dedicarme una sonrisa nerviosa.

Rió a carcajadas en mi interior, Ed en serio comienza a caerme muy bien. Me limito a sonreír mientras busco un sándwich, especialmente para él. Entonces las puertas del ascensor se abren, y de nuevo gracias a la inercia volteo.....

El carrito esta ahí.... Junto con el guardia.

Un día tendré que saber su nombre; no se puede ir siempre por la vida poniendo "apodos" a la gente referentes a su empleo. El jefe, el carpintero, el panadero, el carnicero, otros que terminen con "ero".... Y finalmente el guardia. Pero como no lo sé: el guardia está parado en la puerta del ascensor con una mirada fría, mirando todo como si fuera insignificante. Creo que así es como verdaderamente ve a todas las chicas y a las demás personas.

Se acerca con pasos lentos, pero autoritarios. Me enderezo, tengo la necesidad de hacerlo. No entiendo pero se me ha ido la respiración.

Deja el carrito enfrente mío, sin cambiar su expresión. Da la vuelta para regresar al elevador. Y camina sin cambiar su ritmo.

Oh Dios que arrogante.

Las puertas se cierran y puedo respirar.

Veo a Ed de reojo se encuentra mirando el ascensor, también sorprendido.

Ed estaba a punto de decir algo pero no lo dice.

Y algo pasa por mi cabeza, una buena idea. Pero no de esas ideas buenas que son para hacer el bien...

- Cuida esto por favor- le pido a Ed.

El mira confundido las bolsas pero asiente.

Tomo el carrito y lo llevo de mala gana al ascensor. Presiono todos los pisos. Y salgo antes de que se cierre. Veamos que tan exigentes son los supervisores con su guardia de seguridad.

Pienso.

Ed esta perplejo. Diablos que impresión he dado... Pero comienza a reír, se para y finge que aplaude. Entiendo perfectamente porque finge aplaudir. Estamos en una oficina. Me agacho en forma de reverencia sonriendo como estúpida y me aproximo hacia él.

-Tendrás que salvarme de nuevo-digo apenada-¿Sabes dónde esta la puerta de emergencia?- le murmuro.

Él sonríe en forma de respuesta y señala a mi algo atrás de mí: una puerta gris que esta cerca del elevador y dice SALIDA DE EMERGENCIA.

°^°^°^°^°^°^°

He quedado de salir con Ed en dos días para comprar discos. Lo que me ha parecido perfecto.

Veo la hora en mí celular, 2:15, es muy temprano todavía. Se supone que llegaría a casa a las 5.

Pienso en llamar a Casey o alguno de los chicos... Pero no tengo ganas bromear. Vaya no tengo ganas de bromear quien diría que yo he dicho eso.

Sigo caminando entre las calles y me detengo frente a una joyería. No soy dada a las joyas ni nada de eso. Pero en la vitrina se encuentra un pequeño cofre: de madera, y otras piezas de metal para adornarla, creo que es plata... Creo. Es hermoso.

Me recuerda al cofre que mi papá le regalo a mi madre. Recuerdo ese día, no perfectamente pero lo recuerdo: mi papá llego temprano a casa. Yo me puse muy contenta dando brinquitos por toda la casa y gritándole a mi mamá quien había llegado. Ella estaba en el piso de arriba, al escuchar mis gritos se asomó por las escaleras con preocupación y al ver a mi papá cargándome su expresión cambio. No recuerdo con exactitud el momento en que mi papá sacó el cofre, pero si recuerdo la sonrisa de mi madre, una combinación de sorpresa y alegría.

Cambio mi rumbo completamente ya que mi nuevo destino esta en el lado opuesto de la ubicación de mi casa: tengo tiempo para ir a visitar a mi mamá.

^°^°^°^°^°^°^°^°^°^

El panteón esta solitario, pero es un panteón y a la mayoría de la gente no le gustan venir.

Camino entre las tumbas con cuidado, de alguna manera me hace sentir mejor porque se que no he sido la única con una experiencia así, pero el alma se me cae a los pies al llegar.

Me siento entre las 2 tumbas: la de mi hermana y la de mi mamá. No se que decir o hacer, me quedo en silencio...

El tiempo pasa sin darme cuenta y es hora de irme.

Me levanto y me agacho a la tumba de mi mamá. Beso la parte superior de mis dedos para despues depositarla en ella. Algo lo mismo con la de mi hermana. Y me marcho.

Camino entre las calles, cuando paso de nuevo por CAREP veo salir Ed, sería buena idea seguirlo y... Una chica va con él. Ambos sonríen y platican, no recuerdo haber visto a la chica en la oficina. Giro en la siguiente calle y los pierdo de vista. Me pregunto que será de él. Pero no me roba mucho el pensamiento: tengo una llamada entrante de Dante.

Siento la tardanza de mi parte para subir el capítulo. Pero no se preocupen me daré más auto-carrilla para escribir x3

Esperó y les guste saludos a todos y besos.

Voten y también comenten que les gusto (no me ignoren porfa como siempre XC)

Yahaira x3

Something Of LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora