-Que estáis, ¿qué?
-J-Juntos.
Mi madre, se levantó, y se puso delante de Álvaro, 'ya está, le echará de casa y a mi me dirá de todo...
-A mis brazos yerno.
-Pero mamá...
¿Qué es lo que acaba de pasar?-no hacía más que preguntarme-¿Le acaba de llamar...yerno? ¡Le ha aceptado! Ahora mismo, soy un manojo de nervios.
-Mamá, ¿qué?-respondió mi madre.
-Nada, que me alegro te lo tomes así de bien.
-Ruth, no es por nada, pero es la una y media-dijo mi tía mirando el reloj que estaba colgado en la pared.
-¡Mierda!-dije corriendo hacia mi habitación-, me voy a cambiar y ha hacerme la mochila.
-¿Quieres que te lleve?-preguntó Alvaro con una sonrisa.
-No, tú vete a dormir, que has estado conduciendo toda la noche.
Me fui a mi habitación como una bala, me cambié lo más rápido que pude y me fui a comer.
-¿Y cómo fue el flechazo?-preguntó mi tía María.
Álvaro sonrió-¿Os acordáis de los pantalones manchados de café?
-Sí,-respondió mi tia-, que la dejaste los pantalones.
-Bueno, pues-continuó Álvaro-, la miré a los ojos y...Se podría decir que me gustó, luego hablábamos mucho por whatsapp y... Hasta ahora.
-¿Lleváis un mes juntos y nadie sabía nada?
-Los chicos lo sabían-respondí-, es decir, Auryn.
-Ah, vale, vale-respondieron mi madre y mi tía a la vez.
Eran ya las dos de la tarde y les dije a mis amigos que me esperasen en el andén. Cuando llegué, me preguntaron por mi fin de semana y yo les conté todo lo que había pasado.
-Mirad lo que me regaló.
Les enseñé el móvil y la esclava.
-¡Qué bonita!-exclamaron todos a la vez.
-Y lo mejor de todo, vengo de empalme del viaje, a ver, la verdad es que he dormido en casa de Álvaro cuando hemos llegado a su casa, y a las doce o así me llamó y nos fuimos a casa, pero él no ha dormido nada.
Según transcurría la tarde, no recibí noticias de Álvaro, así que a las seis de la tarde le llamé, pero no me lo cogió. Me empecé a preocupar mucho y llamé a mi madre.
-Dime cariño-respondió mi madre al otro lado del teléfono.
-Mamá, ¿a qué hora se ha ido Álvaro?
-No se ha ido, sigue aquí, le he obligado a comer e irse a dormir, porque estaba muerto de sueño.
-Menos mal-dije en un suspiro-, es que quedé con él en que me mandaría un mensaje cuando llegara a casa, pero no me ha mandado ninguno.
-Tranquila, está aquí.
-Vale, bueno, entro a clase que tenemos educación física y como lleguemos tarde...
-Vale cariño, cuidate y tranquila que está en buenas manos.
Cuando colgué, Ainhoa y yo nos fuimos al gimnasio junto con nuestros compañeros de clase.
-Chicos-dijo nuestro compañero Juan-, no ha venido el profesor, ¿nos vamos al Burger?
-¡Sí!-respondimos todos a la vez.
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Vidas cruzadas (Alvaro Auryn) (Editando)
RomanceRuth, es una chica de diecisiete años que tiene cinco ídolos, pero ella está enamorada de uno, Álvaro. Vive en un pequeño barrio de Madrid. Él es un cantante de veinticinco años, es alto, guapo, ojos verdes, moreno, sonrisa deslumbrante con barba de...