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La respuesta al dilema llegó mientras organizaba los libros de HoSeok en orden alfabético.

No tenía que enamorarlo, no tenía que pensar en cómo, porqué, ni en lo mal que todo aquello podía terminar, lo único que tenía que hacer era ver a HoSeok sin camisa.

Era simple y conciso. Solo necesitaba ver el pecho de HoSeok y descubrir si es que cerca de su corazón tenía la misma media luna que HyungWon tenía, y así no tendría que pensar jamás en las palabras de su jefe. No tendría que imaginarse cómo sería ser amado por HoSeok, ni tendría que pensar en qué demonios se le había pasado por la cabeza cuando le sugirió "enamorarlo", tampoco se ilusionaría con algo que no podría tener, o se desviaría de lo que había ido a hacer.

Sabía casi por intuición que las relaciones para él no funcionaban, y que lo máximo que podría obtener de HoSeok, de no ser su Marcado, era una amistad que le apetecía por razones intangibles, así que las cosas necesitaban ser claras. O eran o no eran, no podían existir intentos.

Y no había nada más claro que una media luna como Marca.

Guardó un libro de Dostoyevski antes de notar que el reloj marcaba diez para las dos. Se giró para mirar a HoSeok quien aún lucía como si estuviera escribiendo un tratado de paz entre las dos Coreas y no pudo si no botar un suspiro. Quería decirle algo, preguntarle muchas cosas. Tenía unas ganas raras de acercarse y pasarle una mano por los hombros para que no luciera tan tenso, o decir un comentario gracioso que hiciera que levantara la vista del computador para que lo mirara por al menos un segundo.

Pero HoSeok continuaba allí, escribiendo como si el mundo se fuera a acabar mañana y con el semblante serio ligeramente iluminado por la luz de su laptop. Tenía el ceño fruncido, los labios apretados en una fina línea y los ojos moviéndose entre las palabras que sus dedos tecleaban, HyungWon lo observó un rato más, con la mente dando vuelta en todas partes.

- ¿Quieres una foto? - La voz de su jefe sonó fuerte y ronca, casi haciéndolo saltar del susto. Sus ojos negros por fin dejaron de ver el monitor y recorrieron cuidadosamente el rostro de HyungWon esperando una respuesta. Una pequeña sonrisa soberbia se formó en su boca ante el silencio.

HyungWon se sintió como un niño pillado con las manos en la masa, pero como estaba tratando con HoSeok no tenía tiempo de actuar como bola de nervios. Tenía que actuar rápido. - Solo estaba pensando en el almuerzo... - Y en verlo sin camisa también, no es como si lo fuera a decir en voz alta, pero darse cuenta de que la idea que HoSeok había plantado en su cabeza con un solo comentario, había brotado en toda esa idea loca de descubrir cuál era la Marca de su jefe, era todavía una situación demasiado imprevista como para hacerlo sentir cómodo y de la cual tenía que comenzar a acostumbrarse.

- Salgamos a comer. - Fue lo único que dijo HoSeok mientras cerraba la laptop y se levantaba de su silla. HyungWon lo siguió con los ojos.

- ¿Ahora? ¿A dónde?

HoSeok ni lo miró, simplemente se marchó de la oficina para regresar cinco segundos después con una chaqueta en los brazos.

- No sé, ¿Gaetano? - Se puso la chaqueta mientras HyungWon le clavaba una mirada.

- No tengo ropa tan elegante. ¿Qué tal el 230?

HoSeok lo miró como si acabara de sugerir ir a comer a McDonald's.

- La comida no está tan mal -Se defendió.

No estaba mintiendo, no era la mejor del mundo pero tenían buenos precios.

- Ni muerto - Dijo y comenzó a caminar hacia la puerta.

HyungWon se fue a su cuarto a buscar una chaqueta y luego se apresuró para alcanzar a HoSeok quien ya estaba camino al ascensor.

❛Mi marca en ti❜ 2won [Adaptación]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora