15. Insípido interés.

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- Al parecer no pudiste conocer Sheffield. - comentó Miles riendo, se habían encontrado con Ruby para dar un paseo por el parque de Londres, Regent's.

- Oh, es cierto, me quedé con las ganas. - comentó Ruby apenada haciendo una mueca.

- Podemos ir por nuestra cuenta, fué una pena que hayas tenido que conocer un poco de la ciudad en esa situación.

- Alex repetía lo mismo, pero no me molesta en lo absoluto...

- Pobre Al, está en el horno con papas. - bromeó Miles pero sin reir.

- ¿Por qué? ¿Qué ocurrió?

- Taylor está realmente enfadada con él, parece que aún no lo perdona... Creí que lo sabías, ¿Te ha hablado a tí?

- Ahora que lo mencionas, desde que Tay llegó hace dos días no me ha hablado. En el hospital tampoco me saludó...

- Está furiosa porque has venido tu en su lugar. - Miles la miró divertido.

- Eso no tiene sentido... ¡David había tenido un paro y ella solo se preocupa por eso!- Ruby frunció el ceño. - Pero es Tay, Tay se enfada por todo... La conozco, es mi mejor amiga.

- ¿Han tenido peleas?

- Varias, y en todas actúa igual... Ella simplemente no te habla por dos semanas y luego vuelve arrepentida pidiendo perdón. - se encogió de hombros.

- Eso suena a comportamiento de una adolescente. - Miles hizo una mueca de disgusto.

- Alex debería saber eso desde que comenzó a andar con ella. - Ruby se encogió de hombros.

- Uf, sincera... Estás con todo ¿Huh?

- Es que siento que no están hechos uno para el otro. - soltó Ruby, pero al momento de hacerlo se maldijo a si misma y de arrepintió al instante. Miles la miró enseguida.

- Wow, pecas.

- Lo siento, no debí haber dicho eso. - Bajó su mirada y paró de caminar para sentarse en un banco.

- Tranquila, creo que es lo que pensamos todos. - rió Miles. Ruby alzó la mirada. - Quiero decir, Taylor es una increíble persona... Pero no creo que esté hecha para Alex.

- ¿Se lo has dicho?

- ¿A Alex? Ni loco, soy su amigo pero no me gusta meterme en sus relaciones... Si le va bien, genial... Y sino, pues él solo debe tener errores y aprender de ellos. No sirve de mucho que yo le advierta. - se encogió de hombros.

Ruby asintió con la cabeza. No sabía cómo terminaría aquella relación, pero ya no soltaría ninguna otra estupidez que la haga quedar mal enfrente de Miles o alguien más. Ya había abierto demasiado su boca.

-

- Soy Alex, abre por favor. - habló Alex desde el otro lado de la puerta del departamento que había rentado Taylor la noche anterior. Alex había insistido en qué duerma con él en su casa, pero la rubia no quería oírlo ni verlo más por esa noche.

Sólo habían cruzado un par de palabras el día que llegaron de Sheffield, pero no habían logrado solucionar nada debido al gran enojo de Taylor, y por lo tanto el de Alex.

Taylor pensó unos segundos antes de abrir la puerta, pero finalmente lo hizo y lo observó en silencio.

- ¿Podemos hablar?. - preguntó Alex. Lamentablemente Taylor no tenía la razón, pero a Alex no le gustaban las peleas ni la tensión. Prefería hablar las cosas y que queden más o menos... Bien.

- Pasa. - Taylor se hizo a un lado y Alex entró para luego cerrar la puerta tras dé sí. - ¿Y bien?

- ¿Podemos estar bien?

- No.

- Vamos Taylor, no es por traer más problemas pero mi padre ha tenido un Infarto, no puedes ponerte de ese modo en una situación así...

- Pues lo siento por eso, Alex. Pero hay otra realidad aquí. - señaló a su alrededor. Alex bufó.

- Bueno, lo siento por no haberte llamado. - rodó sus ojos. Taylor lo escuchó expectante. - ¿El problema de todo ésto es que haya ido con Ruby?

- Es mi mejor amiga, Alex.

- Justamente, Taylor. Es tu mejor amiga, ¿Por qué tanto problema?

- Porque las mejores amigas no hacen eso, y los novios mucho menos. - frunció el ceño.

- ¡Somos amigos Taylor! ¡Como Miles y yo!

- ¿Desde cuándo son amigos? Al principio ni siquiera le hablabas.

- ¿Qué? - Alex entrecerró sus ojos incrédulo. - No la conocía, Taylor...

- Dijiste que te caía mal.

- Repito, porque no la conocía bien, ¿Yo que sé?

- Increíble, me voy dos semanas a París y aquí todo el mundo se amigo, hacen planes sin mi y yo no me entero de nada.

Aquella tarde concurrió igual, Taylor enfadada y Alex igual, pero con más ganas de arreglar aquel desastre, que su propia novia. Finalmente entre algunos besos robados y abrazos forzados, las cosas lograron mejorar un poco. Alex no era una persona de decir muchas palabras, pero con una frase sincera y algún abrazo de por medio siempre solía arreglar las cosas... A su manera.

-

Por la noche, cuando regresó a su casa le llegó un mensaje de texto. Se extrañó ya que no utilizaba demasiado su celular, y los únicos que lo llamaban eran Taylor, Miles y su familia.

" Ruby: Pensando en comprarme un vinilo de The Smiths... ¿Alguna recomendación?"

Una sonrisa se asomó en el rostro del británico. No la veía hace tres días y ya comenzaba a extrañarla. Había admirado tanto aquel gesto de acompañarlo en el medio de la noche, y conducir para que el pueda descansar... Sintió seguridad, y eso no lo había sentido nunca con Taylor.

Estaba mal pensar de aquella manera, pero cada día que pasaba, aquel remordimiento parecía desaparecer cada vez más. Y lo que sentía por dentro por aquella muchacha, sea lo que sea, comenzaba a arder como una llama, una muy pequeña que apenas encendieron hace un segundo. Una insípida llama.

"Alex : Mañana te acompaño a elegir el mejor, es tan bueno que no lo puedo decir por un mensaje... Pasaré por ti a las cuatro."

Ruby se sorprendió al obtener una respuesta inmediata, conocía a Alex y sabía que no era muy amigo de la tecnología, sin embargo a ella le había respondido al instante. Sonrió amplio, lo vería una vez más después de dos días en los que lo había extrañado sin motivo aparente.

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Hola a todxs, gracias por leer! A pedido de lectoras, hoy subiré maratón especial. Espero que lo disfruten!! ❤️
Xx. Lo

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Stuck on the puzzle | Alex Turner.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora