Travis

66 5 0
                                    

-¡Em!-gritan detrás mío.

Me doy vuelta. Es Evan.

-¡Evan!-grito con emoción.

-¿Qué te ha sucedido que no venías al instituto?-me pregunta preocupado.

Me sorprendí. La verdad es que no creía que las personas notaran mi ausencia, pero él la notó. Ni siquiera Travis vino por mí. Pero Evan sí.

-Nada, solo que...-me quedo en silencio unos segundos y lo abrazo fuertemente.

-¿Estás bien?-pregunta abrazándome aún más fuerte.

-Solo quiero un abrazo.-respondo.

-Te quiero.-responde.

-Yo también, Evan. Gracias por preocuparte.

-Eres mi mejor amiga, ¿cómo no iba a hacerlo?

-¿Te puedo hacer una pregunta?

-Sí.

-¿No sabes dónde está Travis?

-Me dio hambre, ¿tú no tienes hambre? Vamos a desayunar, ¿te parece?-me tironea para entrar.

Noto que está intentando cambiar de conversación.

-¡EVAN!-grito soltándome de él.- ¿Dónde está Travis?

-Travis...-dice tartamudeando.- Travis no viene desde hace una semana. Pensé que era por ti, porque te estaba cuidando o algo parecido.

-Travis ni siquiera se molestó en pasar por casa.-digo un poco triste.

-Lo siento Em.

-Descuida.-respondo intentando sonreír.-Mejor entremos, no quiero llegar tarde a Literatura.

No puedo creer que Travis no haya venido. No puedo creer que no haya pasado por casa. No puedo creer que ni siquiera me mandó un maldito mensajo. Y lo peor de todo, no puedo creer que le interese tan poco como para no preocuparse por mí.

-Ey, al fin apareces.

-Teressa, hola.-respondo sentándome a su lado.

-Te andaba extrañando.-dice.

-¿En serio? ¿A mí?

-No, boba, a Josefina.-ríe.

Rio con ella. O por lo menos intento reír.

-¿Qué sucede?-pregunta.

-Nada...-respondo.

-Es por Travis, ¿cierto?

-¿Cómo sabes?

-Somos amigas, ¿no?

-Tienes razón. No sé por qué nunca me llamó o me mandó un mensaje o se apareció por mi casa.

-Tal vez tenga sus motivos.-dice Teressa.

-¿Qué motivos?

-No lo sé.-dice.-¿Por las dudas no te fijaste en tu casillero?

-¿Fijarme qué?-pregunto confundida.

-Tú solo fíjate. Travis te ama, no te va a dejar solo porque sí. Hazme caso.

Y así fue. Ni bien terminó la clase fui a revisar mi casillero. Había una carta, era de Travis:

"Mi cielo:
Si me buscas en estos días te aviso que no estaré, no puedo decirte que está sucediendo, lo siento, pero descuida, estaré contigo más pronto de lo que piensas.
Te amo.
Travis."

Mas allá del sufrimientoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora