Dead Is Not dead

Capitulo 6: El miedo es una mierda agridulce

Lamento la alta cantidad de tiempo que me tomó actualizar esos solo que la universidad me está matando... espero que disfruten del capitulo :D...

Dead

Bueno, esto sí que era una manera de levantarme. Y hablando de eso ¿en qué momento me quedé dormida? ¿Quién seriamente se queda dormida durante un momento como este? ¿Qué acaso mi cuerpo en serio deseaba morir? 

Pues si no lo deseaba estaba a unos pocos minutos de experimentarlo de todas maneras.

Cuando una potente cantidad de energía se acercó, fue como si mis sentidos solo cobraran vida. Un escalofrío recorrió mi cuerpo mientras me veía como si fuera otra persona voltear la cabeza, para ver hacia atrás en el auto y descubrir que ya no éramos perseguidas por un arcángel.

¡Oh no! ¡Claro que no! Porque solo un arcángel era ponérnoslo demasiado sencillo… en su lugar había dos pares de alas rastreándonos… no, no espera borra eso. No nos rastreaban de hecho ya nos había visto, ya que fuimos los suficientemente estúpidas para continuar con el mismo auto en el que habíamos escapado. Si nos ponemos a pensar en realidad era algo gracioso, si lo hubiese visto en una película probablemente me hubiese reído de las personas que fueron lo suficientemente tontas como para no predecir que serían perseguidas y que sería mejor solo abandonar el auto e ir en autobús.

Pero, no estábamos viendo una película de hecho estábamos siendo perseguidas y, créanme, no era nada gracioso.

Esto no podía ponerse mejor.

 —Oh… Señ—

No tengo ni la más mínima idea de en que termino la exclamación de Cat porque justo antes de que terminara yo estaba gritando—: ¡ACELERA!

Como si hubiese sido electrocutada o como si por fin entendiera que estábamos enfrentando a la muerte. Si, a mi tampoco se me escapa la ironía del asunto. Cat aceleró a todo lo que daba.

—Dispara, yo conduciré. —Cat susurraba, como si esos bastardos no pudiese oírnos, incluso con susurros.

—¿En qué puto momento los arcángeles decidieron reunirse a ir por un café? —¿Cuáles eran en serio las posibilidades de que dos arcángeles estuviese en la misma ciudad? Era tan malditamente ilógico—. ¿No se supone que se odian?

—Vamos a morir.

—¿Y tú hasta ahora lo notas?

—Todavía no podemos morir, tenemos que terminar lo que planeamos para los—

—Shhh —la silencie, no sé si en serio no sabía nada de ellos o simplemente el miedo la estaba traicionando—, ellos pueden oírnos.

El hecho que se encontraban a unos kilómetros por encima de nosotros no quería decir que no pudiesen escuchar a la perfección. 

Sacando el arma de Cat y la mía recién cargada, deje fluir la energía en mí.

¡Que el Viejo no ayude! luego escuche a Cat decirme—: Guarda energía Dead eres la que está peor y esto solo es el comienzo, dejalos que se acerquen.

Por supuesto que ella tenía que recordarme las cosas... Ella pensaba y yo actuaba, así habíamos sido siempre. No era que elle no pudiese actuar era solo que prefería no hacerlo, su actitud pacifista siempre presente.

Entonces deje que ellos fueran los que se acercaran, a pesar de que estaba apunto de morir tenía que reconocer una cosa. 

Era malditamente gloriosos. Eran de las cosas más hermosas que había podido ver. Tal vez ese fue el error del Viejo hacerlos tan perfectos y pensar que ellos no reaccionarían como tales. 

Eran asquerosos. No importa que tan bellos eran, o como sus alas se iluminaban a la luz del Sol como perfectos diamantes, siendo doloroso de observar. ¡Mierda Dead concentrate!

Estaban lo suficientemente lejos como para que un humano no pudiese localizarlos por sobre las nubes, pero yo no era una humana. Tampoco era un ángel sin embargo. Entonces ¿eso donde me dejaba? 

Esperen... ¡A quién le importa en este momento cosas como esas! ¿Por qué mi cerebro decidió filosofar en uno de los peores momentos de nuestras vidas? 

Disparé, quería que supieran que sabíamos que estaban ahí, de otra manera no bajarían. Y como era de esperarse ellos solo lo esquivaron pero pude ver sus caras en el momento en el que me vieron disparar. Era de sorpresa, ya que ningún humano hubiese podido verlos, no era posible que fuera capaz de apuntarles.

Ellos no sabían a qué se enfrentaban.

Bueno nosotras tampoco sabíamos que éramos... Buena suerte tratando de averiguarlo.

Y bueno la suerte de mierda no duró tanto, al menos no para nosotras…

Sabía que nos habían atacado con algo solo por el  insoportable dolor en mi cuerpo, parecía que había sido arrastrada por toda la carretera y después dejada bajo el sol… Oh esperen, más o menos eso paso…

No pude ver nada, no sé que nos atacó, mejor dicho no sabía cómo nos atacaron porque ciertamente sabía que las megas alas en el cielo eran los causantes, su única advertencia fue una luz blanca cegándome hasta que el carro estuvo destrozado, boca abajo, en una esquina. Estaba dentro del túnel, más allá podía ver la luz del día acariciar lo último que nos faltaba para escondernos en Flower Bay, el bosque.

No tengo idea de cómo salí de auto, solo sé que degusté bastante bien el asfalto, de hecho creo que tenía un poco todavía en mi boca, déjenme decirles algo, no sabe bien. Y arrastrarse por él duele como una perra.

Cuando la conmoción del golpe me pasó empecé a buscar.

Y… no encontraba a Cat. ¿Dónde demonios estaba Cat?

Entonces un ataqué de pánico surgió en mí. ¿Si le pasó algo? ¿Si quedó aplastada bajo el auto? Entonces comencé a gritar—: ¡CAT! ¡CAT!

Estaba demasiado nerviosa, demasiado angustiada, el miedo, el pánico y el dolor de que algo le pudo haber ocurrido a Cat me estaba inundando, ahogándome, arrastrándome hasta lo más profundo de mi mente. Podía sentir un tirón excesivo de adrenalina nadando en mi boca.

Me sentí como un espectador mientras corría hacia fuera del túnel, no podía encontrar a Cat. ¿QUÉ MIERDAS LE HABÍA PASADO A CAT?  

Corrí más rápido, una nueva energía llevándome la angustia, el dolor y la ira impulsándome. Escuchaba un pitido en mis oídos, ese que sientes después de exponerte a un alto ruido, pero este era insoportable… Corrí más.

Cuando salí del interminable túnel. La encontré.

Tenía en sus manos las dos armas, protegiendo la entrada del túnel. Disparando a algo encima de ella, el color rosa chillón de su energía vital rodeandola. El alivio que debía embargarme cuando la vi nunca llegó, en tan solo un segundo, lo que me tomó enfocar lo que nos rodeaba, uno de los arcángeles, Miguel imaginé por la espada que apareció en su mano, la levanto por el cuello acercando su espada a la garganta de Cat, como si quisiera arrancar su cabeza del cuerpo, pero mantenerla en sus manos como acto de victoria, como un trofeo.

Mientras tanto Gabriel me observaba, más que curioso, viendo mis reacciones, como decidiendose entre hacerme lo mismo o me dejarme ver como moría mi amiga. Bastardo.

La espada de Miguel estaba tan cerca.

Ten cerca, tan cerca…

Cada movimiento parecía en cámara lenta, cada sonido a mí alrededor se intensifico, el pitido explotó en mis oído mientras observaba como si no fuera mi cuerpo, un agridulce sabor inundó mi boca, un brillo verdoso destello en mis ojos, demasiado brillante…

Demasiado…

Y luego nada…

La oscuridad me trago.

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