Que más da... "Mis 17" [Mikellino]

11.Final Feliz

Javier ayer había pedido permiso para quedarse a dormir y por primera vez en su vida se despertó con alguien durmiendo sobre su pecho.

Miguel dormía como un niño pequeño, verlo respirar y frotarse sobre él, hicieron que su corazón latiera con fuerza, llenando sus mejillas de un tono carmesí.

Ambos traían la misma ropa de ayer; cuando sintieron que todo ya estaba en paz con ellos y entre ellos fueron a dormir, tras otra breve charla de cualquier cosa, que terminó a las 12 de la noche, quedaron dormidos así.

Con su mano libre, el chico acarició con delicadeza la mejilla del castaño.

- Estrellita - dijo susurrando para no levantar al contrario - lamento haberte hecho llorar.

Y entre sueños Miguel quitó la mano de Javier y rascó su mejilla, al parecer le daba una especie de picazon que le hicieran eso dormido.

- Hasta dormido eres tan tú - prosiguió Javier con una sonrisa.

Después de decir eso, cerró los ojos y se rindió ante la calidez que le propiciaba Mike.

Varias horas después despertaron por el hambre. Cuando Miguel abrió los ojos sintió sus mejillas arder como nunca.

Comenzó a hiperventilar y quitó con algo de brusquedad a Javier, haciendo que este por el susto caiga de la cama.

- ¡¿Qué pasa?! - gritó Javier - ¡¿Terremoto?!

Y como respuesta recibió una risita por parte del castaño.
Javier tomó una almohada y se la lanzó en la cara del contrario provocando una pelea de almohadas.

Después de su guerra que terminó en una bandera blanca por parte de Javier por casi romper un foco, bajaron a desayunar y para los dos, ese fue uno de los mejores desayunos en años.

Casi era hora de separarse y con ambos en el sofá viendo novelas de chinos en Netflix, Miguel tomó valor para hacer otro intento.

- Javier - Dijo, el nombrado evitó mirar a los ojos del castaño para no ponerlo nervioso - Ya estoy listo - las mejillas de Mike ardían y el corazón le latía rápidamente, sin embargo, continuó- y en todo este tiempo busqué valor y las palabras adecuadas para decirte que me gustas, pero viejo ya se debía suponer, me gustas Javier.

Este pausó la serie y lo regresó a ver con una gran sonrisa.

Con la adrenalina del momento Mike se acercó a Javier dispuesto a darle un beso o eso parecía, puesto que la adrenalina hizo que le diera un cabezazo.

- Lo...lo siento -Miguel desvió la mirada con ganas de que la tierra se lo trague.

- Estamos a mano - dijo Javier para tomar entre sus manos el rostro del castaño y darle un pequeño beso en la nariz - todavía no estas listo para...

Con la dulzura que le transmitió el contrario, Miguel lo besó.

Y ese fin de semana tomaron una decisión, que aquello que tenían iba a ser el inicio de un final feliz.