Capítulo 4

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Arreglo mi saco por tercera vez mientras observo el gran edificio frente a mí. Las letras YK FASHION color negro brillantes resaltan en lo alto del edificio.

Observo la hora en mi celular notando que faltan exactamente 15 minutos para que sean las 9:00am. La hora de la reunión que tenemos en la revista YK con el mismísimo Nathan York y su equipo de trabajo.

Sip. Bertha, Karen, Amber de relaciones públicas, la odiosa de Emily y yo tendremos una importante reunión con aquel que me ayudo en mi vergonzoso estado de ebriedad.

Genial.

Callie y Erin se divirtieron mucho al enterarse que mi frase de 'si no lo recuerdo, no paso' definitivamente me escupió en la cara.

Ha pasado casi una semana desde aquella noche que me entere quien era aquel atractivo desconocido.

Después de quebrar uno de mis vasos favoritos, les conté en mi frustración a mi hermana y a mi mejor amiga. Lo cual claramente no fue buena idea.

Se rieron por más de 15 minutos sin parar, y por si fuera poco, Erin le llamo a Lucas contándole todo, lo cual ocasiono otros 10 minutos de risas y un feo dolor de cabeza.

Suspiro dando el primer paso hacia las enormes puertas de vidrio, siento un golpe en mi hombro haciendo que pierda el equilibro, sin embargo, a cómo puedo logro estabilizarme sin caer al suelo.

—¡Oh Dios mío, cuanto lo siento! —frunzo el ceño ante la voz chillona de Emily y veo como me da una sonrisa falsa.

Le devuelvo una sonrisa el triple de fingida y veo como entra pavoneándose hasta que se pierde en el ascensor.

Volteo alrededor y cuando noto que no hay nadie, hago un pequeño puchero. Este día no pudo empezar peor.

Emily es la aprendiz de Bertha y es odiosa a muerte, por alguna razón desde que llego no fui de su agrado y me juzgo sin siquiera dirigirme palabra.

Es un poco más baja que yo, con una abundante cabellera negra que hace juego con el oscuro de sus ojos. Tiene piel pálida y ojos más grandes que el promedio.

Y por si no lo mencione es la favorita de Bertha. Es de esas trabajadoras que se retuercen en los pies de la jefa para conseguir responsabilidades mayores.

Ella simplemente hace mi ambiente laboral más pesado del que debería ser.

Por suerte tengo a Erin, Amber y a Karen.

—Se profesional Carolina Rose, todo es trabajo.

Me obligo a caminar hasta llegar al ascensor, subo a él y presiono el piso 7 en donde Karen me indico que iba a ser la reunión.

Una vez en el piso correspondiente me acerco a una chica que se encuentra detrás de un enorme escritorio con su vista clavada en lo que parece ser su celular. Tiene una sonrisa enorme y noto sonrojo en sus mejillas.

Pienso en que tal vez su novio está mandándole mensajes calientes y probablemente interrumpiría su gran diversión laboral. Lástima que no puedo llegar tarde.

—Disculpa —levanta la vista con rapidez y parece avergonzada.

Mensajes calientes definitivamente.

—La sala de juntas es esa de ahí —señala una puerta transparente justo al lado del escritorio donde se encuentra.

Asiento murmurando un gracias y me apresuro a entrar.

Lo primero que veo es a Bertha charlando muy animadamente con zorremily y Amber. Karen por otro lado puedo notar que se encuentra muy incómoda por claramente estar fuera de su conversación.

Arte en N.Y • [Nathan York]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora