༺ ᪥ ʀᴇʟᴀᴛᴏs ʏᴀɴᴅᴇʀᴇs

;; ✿ ¡Yᴀɴᴅᴇʀᴇ! Tᴀɪʟs Dᴏʟʟ

Creppypasta

Abvertencia: ¡Niña!Lectora, tortura psicológica. Si no te gusta este tipo de cosas, puedes retirarte.

Pequeña explicación.

(C/O) color de ojos.

(C/C) color de cabello.

(N/M) Nombre de tu madre.

(N/P) Nombre de tu padre.

(N/H) Nombre hermano.

(Nombre) es a como los personajes se dirigen hacía ti, aquí no hay, "____"

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La señorita Rose te observaba totalmente preocupada atravez de aquel enorme ventanal, tu rostro sin vida, y la falta de palabras, hacían que tu estadía en aquel psiquiátrico fuera difícil.

—Esta mañana, otra enfermera fue mordida de gravedad. —su asistente llegó a su lado, explicando los sucesos que habían sucedido contigo en esa mañana.— El director estaba muy dispuesto en comprar un bozal de perro, pero le expliqué que usted se encargaría.

La Rose asintió, aunque sintió mucho más peso en sus hombros, el caso de (Nombre) (apellido) era una gran misión que tenia en esos momentos, su único deseo era sacar a esa pequeña de ahí, y ponerla en un orfanato, ella estaba muy dispuesta en adoptarla.

—Por cierto, esta mañana también volvió a hablar de él.

La mujer de cabellos castaños suspiro con cansancio, por más que hablaba que todo era una imaginaciónes, esa pequeña seguía enfocado en ello.

—Realmente necesita mucha ayuda.

Fue su única respuesta, nuevamente observo atentamente tus movimientos.

Esperaba prontamente tu recuperación.

. . .

Cuando tus padres estaban contigo, tu vida era normal, (N/M) cada noche llegaba a tu cuarto a desearte buenas noches, eras una pequeña niña de apenas ocho años, una niña en crecimiento.

Toda tu vida cambió cuando llegó tu cumpleaños número nueve.

La sonrisa de oreja a oreja de tu hermano te causaba un buen augurio.

Era una caja, un regalo, la envoltura rosada te daba buena vibra, sin embargo tus ojos mostraron decepción al abrir la caja.

—¡Ella no es Amy! —, de un manotazo, tiraste aquel peluche de Tails hacia el suelo, era pocas veces que tu padres te veian de ese modo, y solamente era cuando estaba muy disgustada.

Tu hermano, simplemente sonrió forzadamente, claramente no muy feliz de tu directo rechazo, había comprado ese peluche de Tails en una barata, debido al poco sueldo de su trabajo, no pudo cumplir su palabra de comprar aquel enorme peluche de Amy, que habías visto en una de las tantas tiendas del centro comercial.

—Hija, sabes que rechazar las cosas esta mal— tu padre nego y recogió con una sonrisa cálida al peluche, sacudiendolo en el proceso, hizo que este quedará entre tus brazos, instintivamente lo abrazaste contra tu cuerpo, presentía que en ese momento tu padre no estaba feliz—. Lo que importa es con el sentimiento que se te dio.

Entonces en respuesta simplemente suspiraste, e observaste a tu hermano.

Un pequeño lo siento y gracias salieron de tus labios, y con aquello aquel asunto infantil había terminado.