video games; richie tozier

Final

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No olvidar

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1 mes después:

7:00 a.m:

El día de la partida había llegado. Ese día Sky y Cameron Miller se levantaron temprano y desayunaron té mientras escuchaban un disco de Elton John. Un silencio fantasmal invadía aquél comedor debido a un sentimiento de tristeza y tal vez melancolía que les dejaba un sabor amargo en la boca.

–Estoy emocionada, quiero saber cómo será nuestra nueva casa.–La joven chica comentó para quebrar el ambiente pesado.

–Yo también, estoy seguro que será bonita.–Él contesto con sus ojos verdes en el té.

–¿Podremos ir al Palacio de Westminster?–Ella insistió en una conversación.

–Claro, será divertido dar un recorrido por nuestra nueva ciudad.–

–Magnífico, será como una aventura.–

8:15 a.m:

Sus amigos se reunieron en la, ahora antigua, casa se los Miller. Sus rostros reflejaban la tristeza que parecía estrujar la felicidad existente.

–Recuerdo la primera vez que nos vimos, tú y Beverly aparecieron en la cantera, Richie me había contado sobre una bonita chica que conoció en la sala de video juegos y te invitó, sin dudas fue la mejor elección que hizo ese idiota. –Dijo Eddie abrazando a Sky.

–Voy a extrañarte por siempre, Eddie–Ella dijo intentando no quebrarse como una marchita mariposa.

–Yo también te extrañaré, no te imaginas cuanto.–El joven dijo con sus lágrimas enpañando sus ojos marrones.

Los amigos de Sky se acercaron a abrazarla y decirle cuánto la querían e iban a extrañar. Louis se acercó a ella y le sonrió.

–Estoy de acuerdo con que la primera vez que nos vimos y conocimos no fue la mejor de todas, terminamos ebrios y hablando sobre la duda de nuestras sexualidades por culpa de Roger Taylor...–Él dijo–Lo siento, eso sonó extraño.–Dijo el ojiazul por lo último mencionado. Sky soltó una pequeña carcajada.
–Pero estoy seguro que conocerte fue lo mejor que me pasó.

–Concuerdo contigo. Te quiero, Lou.–

–Yo también. –Los dos jóvenes se abrazaron, sabiendo que a lo mejor, esta era la última vez que se verían. Cuando se separaron, la muchacha se acercó a Richie, los ojos de este estaban rojos por el llanto.

–S-Sky, no hace falta decir cuánto te voy a extrañar.–Él dijo sintiendo como su alma se desvanecía ante la pena.

–Lo sé, te amo. Escúchame, duda de que sean fuego las estrellas, duda de que el sol se mueva, duda de que la verdad sea mentira, pero no dudes jamás de que te amo. –Mencionó Sky. Richie sonrió por aquellas palabras, esa misma frase le leyó con la ilusión de un amor puro e inocente, un día cualquiera que los dos se encontraban en la biblioteca de la escuela, pero significó mucho para cierto chico, en ese momento Richie supo que estaba perdidamente enamorado de la ojimiel.

–Nena, voy a amarte siempre. Te lo prometo, tu recuerdo siempre estará en mi. –Unieron sus labios por última vez. Se fundieron en un abrazo que duró hasta que Cameron interrumpió:

–Sky, creo que ya es hora de irnos, si nos demoramos perderemos el vuelo.–Dijo, creyéndose un bastardo al avisarle a su hermanita que era hora de separarse.

–Claro, ya nos vamos...–

–¡Adiós, chicos! ¡Buen viaje! ¡Espero que formen una nueva y maravillosa vida!

–¡Hasta siempre! Los quiero mucho!–Dijo Sky con lágrimas en sus ojos y una sonrisa sincera.

Antes de que la ojimiel entrara al auto junto a su hermano, Richie Tozier le dijo:

–Tu y yo nunca nos vamos a olvidar, ¿verdad?

–Nunca.

Y con esas palabras y una última sonrisa en sus labios, Miller subió al vehículo, los dos hermanos se alejaron de Derry, dejando atrás su antigua vida.

Todo mi amor para uds que llegaron hasta el final. Les ama, Mia.