Nada es lo que parece. Todos ocultan algo, pero solo uno guarda un gran secreto.
¿Pero, y la manada? Ellos serán los más afectados, no supieron valorar lo que tenían y ahora lo lamentarán.
Muchos sufrirán su desprecio y abandonó y ninguno será merec...
Llegue a la mansión Baker. La señora Camille me estaba esperando, la pequeña Liv se acercó y me abrazó. Estaba feliz porque había vuelto, hoy era el día en el que iban a celebrar el cumpleaños de Kelly. Pues él así lo quiso.
— Está en su habitación, cariño. Sube a verlo — me dice con dulzura
Asentí y subí rápidamente, moría por ver al chico que amo.
Toqué la puerta y escuché un débil "pasé" abrí la puerta y entre solo hasta la mitad de la habitación. Kelly estaba sentado en la esquina de su cama, lucia muy mal, emocionalmente. Cosa que hizo que me doliera el pecho.
Ignorando todo detalle, se encontraba hermoso con ese vestuario.
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No traía sus lentes, su mirada no tenía brillo.
— Colson — le llamé por su nombre, noté como contuvo el aliento. Volteo la cabeza hacía un lado impidiendo que lo vea de frente
— ¿Ya te dignaste aparecer? —exclamó en tono frío— ¿Mi madre te subió el sueldo? — pregunto con indiferencia
¿What? ¿Seriously honey?
— ¿Qué? ¡Estás equivocado! — exclamé sin darme cuenta y con indignación
— ¿Ah sí? — sarcasmo llenaba su voz
— Si. Déjame explicarte.
— Será mejor que te vayas, Stiles. Sabía que esto no funcionaría. Vamos, dime. ¿Quién querría salir con un ciego? — hizo una risa amarga, lo que hizo me enfadara aún más
— Pues yo. —respondí al toque— Yo saldría contigo, Colson Baker. No todo el mundo es malvado. Siento el haberme ido sin despedirme. Siento no haberte dicho nada, pero debía hacerlo. Quería estar seguro que en verdad te quería y que lo nuestro funcionaría, "aún si sé que me estoy condenando a muerte" — susurré lo último pero bajito para que el no escuchará
— ¿Ahora piensas en un nosotros? — ignorando su comentario continúe
— Renuncié al trabajo, rechace el dinero de tu madre, Kelly. No quiero que me paguen por cuidarte. ¿Cómo podría cobrar por cuidar del chico que amo?, ¿Qué clase de persona crees que soy? —dije triste, unos fuertes relámpagos comenzaron azotar fuertemente el cielo— No necesito el dinero, tengo lo suficiente como para que... "Un humano viva dos vidas" — susurré lo último
No es como que pudiera decirle para que viva toda la inmortalidad. Sonaría muy estúpido para un humano sin conocimiento del submundo
Pude notar que se encontraba nervioso y trataba de ocultarlo. Respiraba pesadamente y se veía confundido, sus ojos estaban irritados de nuevo y eso hizo que yo derramase una lágrima que limpié en cuestión de segundos
Puedo estar enamorado pero jamás voy a llorar, y menos por un humano que no sabe lo que se pierde. Tengo un sin fin de chicas/o tras de mí, cómo para venir y humillarme ante él.
— Vete.
¿Escucharon eso? Fue mi alma rompiéndose en miles de pedacitos
— ¿Qué? ¡Después de todo lo que te he dicho lo único que hacés es pedirme que me vaya! — exclamé furioso
El no sabe todo lo que yo estoy sufriendo y perdiendo en el proceso por estar enamorado de él.
— Vete, te pido, no. ¡Te exijo que te vayas ahora!
— ¿Te declaró mi amor y tú me pides que me vaya?
— Si. Vete cómo te fuiste ayer, sin despedirte. Incluso estando frente a frente, soy ciego no estúpido. — aclaró y limpió sus lágrimas
Él lo sabía, él sabía que yo me encontraba en su casa. Ambos sabíamos que lo sabía en aquel momento. No puedo decir que me duele el corazón, porque no tengo uno. Nosotros somos luz, energía, gravedad.... Pero igual lo diré.
Me siento la persona mas estúpida del mundo y una que no tiene corazón. La frase me salió igual porque siempre termina en mi verdad. Pero sí así lo quiere está bien.
— No te merezco, mereces a alguien mejor cómo, Tarah.
— ¡No quiero a Tarah! ¡Quiero a Stiles! Al Stiles que me hizo reír en mis peores días, quién me cuido allá fuera, al que me creía su amigo, su todo. No al Stiles de ayer. — finalizó
— Lo siento. Te escribí una carta ayer, la dejaré a tu lado derecho. Léela si quieres, y feliz cumpleaños, Kelly — deje la carta a su lado y salí rápidamente de su habitación dejando la puerta abierta
— No tiene nada de feliz — lo escuché decir pero ya no dije nada solo me fui
