Tinta y pétalos [Hiatus]

Déjame ayudarte

Sus cuencas se sentían pesadas que costaba una cantidad grande de esfuerzo poder abrirlas más sin embargo cuando logró enfocar su mala visión de inmediato se percató que ya no estaba en su hogar.

- Vaya susto me has dado, creí que te había sucedido algo peor.- Habló una voz conocida pero su cráneo dolía mucho como para reconocer al dueño.

- Dónde estoy?-

- Estás en una zona de Doodle-Sphere, tuve que traerte a mi territorio, sabes que el tuyo me incomoda por el blanco.-

- Ink?-

- Sip ese mismo, creo que perdiste la conciencia, estabas vomitando demasiados pétalos y llorando como un niño pequeño.-

- Déjame morir en paz.- El glitch se colocó boca abajo, estaba recostado en un sillón muy mullido

- Me habías dicho que no puedes morir, qué te sucedió exactamente? Estaba libre hoy y quise ir a verte pero no me esperé encontrarte en ese estado, veo que tu enfermedad avanzó más.-

- No sé que me haya pasado sólo quiero arrancarme esta cosa!- Las fallas comenzaron a apoderarse de su cuerpo una vez más alterándolo.

- Cálmate!- El esqueleto blanco puso una expresión seria, la ansiedad del azabache lo estaba hartando mientras que el contrario lo miró mal por ello.

- No me digas que me calme! Me duele todo el jodido cuerpo y como si fuera poco me enteré que yo era alguien más hace muchos años!!! Así que si quieres silencio cierra la boca tu!- Las lágrimas comenzaron a escaparse sin el consentimiento de su dueño haciendo que su voz sonara rota.

- Alguien más?-

- Antes era otro monstruo, tenía mi propio universo pero algo le pasó y quedé atrapado con un niño, luego de eso sólo recuerdo muchas fallas hasta que todo se volvió color blanco.-

- Supongo que es algo perturbador... Pero ahora ya eres alguien distinto y me tienes a mi, sabes que te puedo ayudar si lo necesitas.-

- No importa, de todas maneras ya no hay esperanzas para mi...- El destructor dió un chillido distorsionado al sentir como el guardián se sentaba a su lado y le daba un abrazo.

- Si las hay, al menos ya no en tu lugar de origen pero con otras distintas pero si tienes salvación... déjame ayudarte, a fin de cuentas los dos sabemos lo que es estar atrapados en el olvido eterno del Anti-Void.-

Y ahí estaba nuevamente la calidez que su alma desprendió aquella tarde en Flowerfell pero ahora era acompañada de aquellas palabras suaves, se sentía tan bien que le incomodaba estar entre los brazos del pintor, quiso moverse pero el contrario sólo hizo más fuerte su abrazo llegando a hacer que recostara el cráneo en su caja torácica mientras comenzaba a recibir caricias muy leves en este. Su alma palpitaba con más fuerza de lo usual, algo le decía que estaba a salvo a pesar de no percibir el alma de Ink.

- Es cierto que no tienes alma?- Preguntó casi susurrando con las cuencas cerradas.

- Si... has visto mi cinturón con frascos de pintura?-

- Si.-

- No los uso para pintar, en realidad me tomo su contenido porque no puedo sentir por mi propia cuenta.-

- Que asco.- El esqueleto blanco río un poco ante la declaración del azabache.

- Pero no te preocupes por mi, estoy bien sin un alma, mientras tenga pintura siempre seré yo mismo.-

- Y quien dijo que yo estaba preocupado por ti? Estas abrazando a una deidad así que siéntete afortunado.-

- Ya estás mejor?-