DERIVA

Introducción

Noah

...Y no podía fijar bien la vista, sus ojos, de un verde demasiado claro, no le servían de nada a Noah, eran tan transparentes que el sol se le colaba por ellos insoportablemente cuando intentaba hacer una foto al mar, estaba atardeciendo.

- ¡Joder! - Dijo mientras tropezaba con una piedra. Cerró los ojos, apretándolos, los volvió a abrir y le empezaron a llorar. Se mordió el labio inferior, incómodo. Cogió su guitarra y se la colgó a la espalda. Comenzaba un nuevo verano.

Clic.

Dakota

- ¡Oh! No puede ser, ¡¡No puede ser!! - Exclamó Verona - ¡y mírala! Callada... dile algo Em.

- Vamos Dakota anímate, es perfecto, ¡Perfecto! - Gritó Emily

- Si... bueno, tampoco es para tanto. - Balbuceó Dakota intentando apartarse el flequillo rubio de su cara, siempre le tapaba los ojos, <<una lástima>> solía decir su madre.

- ...Y además, popular, ¡Juega en el equipo de futbol! Es súper cool tías y tu amiguito del alma.

- No sé lo que haré Verona...

- ¿Cómo que no? Mira, irás a la fiesta, con John, Verona con Kevin y yo con Ian, todas súper monas y nos lo pasaremos súper guay, así que no digas que no vas a ir a la fiesta Koti.

- Y es la fiesta de fin de curso, serás el bicho raro si no vas tía. ¿A que sí Em?

- Verona tiene razón, - rió - yo iré con Ian... quizás después de la fiesta...

- Eres una guarra tía - Le dijo Verona en tono de burla.

- Pero porque yo puedo. A todo esto... ¿Qué os vais a poner?

- ¡SEXYS! ¡Ah! Hay que buscarle un vestido a Dakota, no pienso dejarla que vaya de negro y con vaqueros, oh dios mío, negación.

- ¡Perfecto! Mañana todas de compras, Dakota, ¡te vamos a convertir en una súper princess yeah!

- No vuelvas a decir eso Em... - Dijo Dakota, poniendo los ojos en blanco.

- Será una noche inolvidable, ya verás...