Capitulo 30

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Kagome miro a los caballos con alegría en su rostro mientras yako caminaba a su lado mirando a los caballos con atención. Sango la había llevado a los establos del palacio y gracias a ello había logrado ver a unos hermosos ejemplares

Los caballos al verla se movieron en sus corrales y acercaron sus grandes cabezas hacia ella en un intento de poder olerla mejor y algunas de ellas restregaron su rostro contra su mano cuando intentaba acariciar sus hocicos. Sango se había quedado a su lado vigilando que ningún caballo llegara a atacarla

Los cuidadores del lugar se quedaron a unos metros mirando lo que pasaba. No era común que una mujer fuera a visitar los establos y menos una mujer de aspecto noble como el de kagome. Aunque nunca la habían visto la reconocieron por los rumores que habían estado circulando por todo el palacio y debían de admitir que estaban emocionados de verla

Querían acercarse a ella, pero la guardia a su lado los miraba con ojos fríos y el cachorro les mostraba los dientes cada vez que los miraba dar un paso hacia ellos, así que al final tuvieron que resignarse a mirarla de lejos

"¿puedo montar uno?"

Kagome pregunto mientras miraba a sango, y su pregunta solo hizo que ella la mirara con pánico sin saber que hacer. Si la dejaba montar un caballo y se lastimaba el emperador la mataría, pero tampoco quería decepcionar a kagome al no dejarla montar. Viendo el silencio de sango y su expresión incomoda kagome no pudo evitar sonreír ligeramente

"le preguntare a sesshomaru-sama más tarde"

Hablo rápidamente en un intento de calmar a sango y lo logro con éxito. Vio con diversión como sango se relajó y un suspiro aliviado salió de sus labios haciendo que su sonrisa creciera. Sango era una protectora y guardiana ejemplar estaba realmente agradecida con sesshomaru por dejarla conocer a sango

"regresemos al palacio, escuche que hay un nuevo cocinero especializado en postres"

Su rostro brillo al escuchar a sango, aunque casi no pedía dulces los postres del palacio eran deliciosos. Sango no pudo evitar sonreír al ver el rostro emocionado de kagome

"entonces regresemos"

Como un buen escolta que era sango ofreció su brazo y escolto a kagome de regreso, pero mientras regresaban algo fue diferente de antes. Todos los guardias y caballeros del lugar le daban una reverencia a kagome mientras grandes sonrisas en sus rostros aparecían cuando la miraban

Incluso los sirvientes que antes le daban una pequeña reverencia como saludo ahora lo hacían con un gran respeto. Sin saber que estaba pasando solo pudo corresponder los saludos y mirar con desconcierto el trato diferente con el que la trataban ahora

Sin saberlo sesshomaru no había amenazado con guardar silencio al guardia que había ido por el sacerdote así que en su emoción por todo lo que escucho hablo con sus compañeros y ellos hablaron con el resto haciendo que se corriera la voz rápidamente por todo el palacio. Ahora casi todas las personas del palacio sabían que kagome era la última higurashi y también la próxima emperatriz

Aunque el guardia les había dicho que mantuvieran silencio sobre lo que escucho nadie pudo evitar hablar entre ellos sobre la próxima emperatriz. Estaban realmente alegres de que fuera kagome, y no alguna noble pretenciosa y arrogante que los trataba como si fueran menos que animales solo porque no eran nobles

Sango que también estaba desconcertada por el repentino cambio solo pudo sentirse orgullosa al ver que ahora kagome era más respetada. Yako por su parte solo se mantuvo cerca de kagome mientras miraba a todos los que intentaban acercarse a su amo, a algunos les gruño y a otros solo los miro fijamente esperando el momento para atacar, aunque apenas llegara a la rodilla de kagome podía morder bastante fuerte

El emperadorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora