...Hagamos el Amor...

Guada en el momento

Nos estuvimos actualizando, nos reímos muchísimo, contamos chistes, cuentos e historias, ya eran las tres de la tarde y seguíamos hablando, como no habíamos comido todavía, decidimos ir a un bar café y pedirnos unos tostados, estábamos esperando a que el mesero nos los trajera.

En ese segundo, la puerta de vidrio se abre, del lado de afuera estaba ese inútil pasajero y su amigo, no podía tener tanta suerte de cruzarmelo ahora que estaba tranquila, evité mirarlos mucho, así ellos no se sentirían perseguidos y no me descubrirían, pero mi amiga no pudo evitar quedarse mirándolos, puesto que ambos eran hermosos, dos chicos con una fachada rockera, ojos claros y cabello oscuro, ambos tenían una linda sonrisa, "el chico del problema del café" tiene hoyuelos en los cachetes al sonreír y una voz dulce y penetrante, muy sensual, ambos también tienen un gran físico, parecen salidos de unas películas o parecen hijos de brad pitt solo que morochos.

Lola me mira, luego de haberlos observado por un largo rato, estaba colgada en los brazos de ellos, su mirada se fijaba en cada detalle, creo que le parecieron lindos.... Al mirarme ella notó que hice cara de descontenta por su llegada, entonces me pregunta.

- Guada...-hizo unos segundos en silencio hasta que dejé de mirar el popote de mi coca~cola y continuó cuando le puse toda mi atención- ¿Te sientes bien?, ¿No has visto los pedazo de churros que entraron al bar?-ella tenia expresiones muy chistosas, por lo tanto Sonreí y le confesé.

- ay! Lola, si, soy dos bombonazos, pero uno de ellos es el que te conté, es el pasajero del café....- volví mi mirada a ellos y le dije- es el de la remera blanca con un gorila con lentes estampado.

Ella miró, fue obvia su expresión de felicidad y luego me fijo la mirada y me dijo enojada.

- y entonces, ¿ A ese chico tan sexy le reclazaste el beso, le pegaste una cachetada y le tiraste un café? ¡¿Pero se te han volado los tornillos?!.

Me pareció que exageraba, también me causaba gracia que hiciera tanto lío por ello, la miré retóricamente y le discutí.

-Oye, Oye, Oye... Primero que nada él me iba a robar un beso en el momento inapropiado, le pegué por insolente y lo del café fue sin querer...

Entre cerró los ojos, se mantenían en mi, esa mirada me estaba incomodando, ella lo sabía, pero lo hacia para que le diga algo más, consiguió lo que quería.

-Okay, si, estoy loca, esta muy bueno, pero ¿que tiene?, seguro tendré otra oportunidad...

Apenas terminé mis palabras y el mozo vino con nuestros tostados, Lola miraba a los chicos, ya que estaban en la mesa al lado de la que nosotras teníamos detrás, ellos estaban en su mundo, se reían muy fuerte, a carcajadas, contaban chistes y hablaban de chicas, si, se escuchaba todo desde nuestra mesa, ojalá no nos hayan escuchado hablar de ellos...

Nosotras habíamos terminado de comer pero ellos seguían tomando cerveza y hablando, cuando nos paramos, ellos se pararon para dirigirse al baño, al darme vuelta me choqué con uno de estos chicos, era el del café, me miró y me reconoció en el instante.

-Hola Guadalupe, ¿cierto? ¿Que hacen aquí?-dijo mientras miró a mi amiga y le estiraba la mano para saludarla- Hola, soy Travis.