THE PLAN 计划 - Park JiMin (pjm) +18

Capítulo 6

Terminamos de desayunar silenciosamente, ninguno de los dos ha dicho una palabra hasta el momento. Me sorprende encontrarlo tan callado pero no digo nada. Recojo la mesa robóticamente bajo su atenta mirada. Al cabo de unos minutos rompe el silencio.

—¿Anoche has estado soñando? Te escuché gritar mí nombre un par de veces —me estudia con la mirada detenidamente, en el fondo siento que lo sabe. Pero no hay manera, ¿Cómo puede saber que he tenido un orgasmo viendo su foto?

—Supongo, no importa. —respondo despreocupada. Si lo pienso demasiado me pondría nerviosa.

—Ya veo.

JiMin se queda en su lugar, observando mientras termino de ordenar. Ha estado demasiado dócil desde que lo amenacé, lo que él no sabe es que no he enviado su nota de voz a nadie, ni siquiera sería capaz de exponerlo de esa manera. Me importa demasiado. Lo quiero demasiado...

—¿Puedo ver la televisión aquí? —pregunta y yo pienso por un momento si debería dejarlo. No sé qué está tramando, pero de todos modos le dejo quedarse en la sala.

Él camina todo lo rápido que sus cadenas se lo permiten. Al llegar al sofá se sienta, en frente suyo está su laptop. Mierda. Corro hacia él rápidamente pero es tarde, ya lo ha visto. Su foto sexy en la pantalla. JiMin se queda inmóvil observando como quito el aparato de su vista. Está sonrojado al igual que yo.

—¿Has estado viendo mis fotos privadas? Eso no se hace, es intromisión. —me dice irritado. —¿Qué más has visto? —entonces hay más, tendré que buscar mejor.

—Oye, si no querías que lo vea no debiste dejarlo allí —me siento a su lado, obsevo mis uñas quitándole importancia.

—¡No sabía que ibas a venir tu a entrometerte en mí casa y en mi vida! —me grita con furia, sólo lo miro como si hubiera comentado alguna cosa acerca del clima.

—Te callas. Guardé un par de esas así que si no quieres que aparezcan en internet haces lo que te digo. —miento, ni siquiera recordé hacerlo. Sería demasiado arriesgado enviarlas desde su laptop a mí dirección de correo. —ahora haz lo que me has pedido hacer. Tengo asuntos que atender —me levanto del lugar. Busco el celular de JiMin para contestar algunos de sus mensajes. No quiero que piensen que algo le ha pasado y vengan aquí. Debe aparentar que está de viaje. —Por cierto, cuéntame quién es Erin. —JiMin voltea su cabeza para mirarme pero no habla —Harás lo que te diga, ¿Recuerdas?

—Es... Es una amiga.

—¿Qué más? No es sólo eso, sino no te enviaría este tipo de mensajes —desde la distancia le enseño la pantalla de su celular. Hay fotos de ella en ropa interior, otras en las que enseña sus pechos pequeños. Debe ser al menos cuatro tallas más pequeña que la mía, mis genes me han dado pechos enormes. Y para equilibrar, trasero enorme.

—Con quien me acuesto aveces —termina de decir sin más. Tiró el celular en la mesita y me acerco a él, JiMin se encoge en su lugar.

—Eres un promiscuo.

—No lo soy, ¿Acaso tu nunca te has acostado con alguien sin tener una relación real? —inquiere, aunque noto el interés en su pregunta.

—No, soy virgen —confieso de repente. Su rostro se transforma a uno de sorpresa. Al ver su expresión decido retractarme. Jamás querría tomarme si piensa que soy virgen. Entonces me hecho a reír de una carcajada —Vamos JiMin, ¿Lo has creído? Mírame, ¿parezco una inocente virgen? —pregunto intrigada realmente.

—No lo sé.

—No lo soy —miento, pero me pongo seria. No estoy lista para decirle la verdad aún —Pero no desvies el tema, aquí tú eres al que le gusta llevar putas a la cama. —escupo con arrogancia.