Nunca mas (dabishiga)

Día a día

º La canción me encanta, no es que tenga algo que ver, sólo quise ponerla º
N.Z

Se puede decir que las noches son perfectas y están creadas para satisfacer el sueño, otros casos satisfacer otras necesidades.

Pero en ese ambiente del terror, en esa casa imposible de llamar hogar, las discusiones eran matutinas en las noches lluviosas, la lluvia era la perfecta en situaciones malas.

Nao, una mujer bella, cabello castaño, ojos rojos con un brillo que los hacia lucir, madre de dos niños; conforme y desconforme con su no tan feliz familia. Bastante amable, la mujer perfecta al lado de un hombre que no se la merece, lo que en su tiempo fue amor y cariño, se convirtió en un veneno mortal para la tranquila familia.

Kotaro, una persona seria y nada amistosa, alguien con un trabajo estable siendo el alguien inestable, con un problema serio ahí arriba; las típicas personas que solucionan las cosas a golpes como si harían un cambio.

Una vez que te adentras a ese infierno, es casi imposible salir ileso, si sales, es con alguna cicatriz permanente que atormenta día tras día.

En la noche calida, las nubes hicieron su numero, tirar gotas de agua sumando los ruidos atroces de los truenos, los vecinos hacían lo de siempre, ignorar la pelea proveniente de la casa Shimura, la casa que consideraban terrorífica, y para los residentes, el infierno.

Kotaro estaba enojado, ¿razones?, sus queridos hijos rompieron una regla de la casa, entrar a su lugar de trabajo, estúpido, pero cada uno con sus reglas.

El humano tiene un limite y nao, estaba a nada alcanzarlo, ya no sabia como parar a su esposo, como mantener la paz en esa casa; la casa donde vivía tan intranquila, donde sus hijos tenían miedo cada segundo, debía dejar todo y comenzar desde cero.
Su estabilidad mental estallaria en cualquier día, el complejo de familia feliz se iba al carajo con los días, no podía permitir mas golpes.

__ ¡ya no puedo con esto! __ exclamó nao, con el ceño fruncido, dando un golpe a la mesa de madera __ ¿¡donde quedo la familia feliz que queríamos!? __ pregunto con un ligero nudo en la garganta.

__ lo siento, pero ya conoces como funcionan las cosas __ le respondió con un tono de voz baja, sin cruzar miradas con su esposa.

Nao apretó los puños, ya no quería aceptar mas disculpas __ una cosa es regañarlo, otra muy diferente es levantarle la mano __ la lluvia de la noche aumento su volumen al igual que los truenos, la niebla tomo su papel creando el ambiente __ hana te tiene miedo, tenko piensa que lo odias; ambos piensan que eres un monstruo ¿¡te parece que eso deberían pensar de su padre!? __ le reprocho, pero hace unos días que dejo de interesarle el pensamiento de los demás __ kotaro, yo ya no puedo con esto, este ambiente no es apto para ellos __ dijo en bajo, con enojo y tristeza, el mencionado hizo una mueca de molestia ante el regaño de la castaña.

__ que piensen lo que quieran pensar, se los tiene que educar

__ ¡eso no se llama educación! __ interrumpió __ ¡vienes enojado casi siempre, no tienes porque desquitarte con nosotros! __ volvió a golpear la mesa __ ¡asustas a nuestros hijos, me das miedo kotaro! Ya no eres la persona que conocí... __ intentaba guardar ese nudo en la garganta, los menores aun no dormían por lo cual intentaba gritar lo mas bajo posible.

¿Cual debe ser el pensamiento de un niño cuando vive en un entorno de peleas?

__ ni vos, ni tus hijos, tienen porque quejarse de algo, no les falta nada conmigo __ dio un ligero golpe a la mesa levantándose de esa silla __ ¡deja de quejarte, yo se bien lo que hago! __ nao se alejo un poco tras el grito __ ¡cuando les falte algo recién veni a quejarte! __ la miro de reojo, con esa mirada tan como amigable.