Una molestia llamada...:

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El sol mostraba su brillo, demasiado calor para algunos, era raro que haga ese calor por la mañana; la naturaleza es extraña.

Las clases estaban a una hora de empezar, algunos llegaban antes, te distraes un rato y ya no tenes asiento; la campana comenzó a sonar, los estudiantes entraban de mala gana, con cara de cansancio, decaídos y esas caras de rebeldes, algunos no entraban y se iban de pinta. El turno mañana era insoportable, la mala fama que tenían daban mucho que decir, los estudiantes eran una bola de vagos y los profesores no hacían bien su trabajo, creo que merecen un aumento de sueldo.

Las piedrecitas del suelo se movían y el ruido del césped se dio a conocer __ ¡ten-chan! __ exclamó una joven con una gran sonrisa, cabello rubio y ojos amarillos con un gran brillo, de piel clara; estaba corriendo con el brazo en alto moviendolo de un lado al otro.

El mencionado paro su paso y dio media vuelta, tras ver de quien se trataba siguió caminando no sin antes saludar; era toga, una amiga.

La joven dejo de correr al estar al lado de su compañero __ las del otro curso están diciendo que ingresara un nuevo estudiante a nuestra clase __ comunico con una sonrisa mientras iba a la par del otro.

__ ¿debería importarme? __ contesto sin mirarla, era algo cortante a la hora de hacer conversaciones.

__ tal vez si, tal vez no __ se detuvo un momento y menos de lo que esperaba, su compañero ya estaba en la delantera __ ¡esperame!.

El salón era igual que todos los días, ahí no existía la organización, estaban todos dispersados y separados en grupos; un grupo molestando a otros, las chicas molestando a los chicos, los del fondo siempre callados y ni hablar del profesor, sus alumnos pueden estar matándose y el seguirá en lo suyo.
La mayoría se pregunta que diablos le paso a Yūei, de ser un colegio prestigioso y buen cuidado, paso a ser un lugar abandonado lleno de gente que no sirve para nada; era un colegio grande y los servicios económicos en Japón no estaban del todo bien, eso debe explicar algo.

El profesor dio un golpe a su escritorio para llamar la atención de los jóvenes, lo logro, todos miraron al frente __ tomen asiento un minuto __ hicieron caso con desgana __ tengo informado que hoy ingresará un nuevo estudiante, aun no llega, compórtense bien y todo eso __ corto el comunicado, siguió con lo suyo, y los jóvenes también.

Los murmurós no tardaron en aparecer, el grupo de chicas disque populares eran las mas intensas.

Aumno masculino nuevo = presa nueva

Entre tantos susurros salieron palabras claves, en increible como la gente investiga a todos, lo habrán echo contigo o cualquier otro.

__ dicen que es alguien con plata, no creo, la Yūei no es como antes __ comento toga para seguir tomando de su lata de Pepsi, estaba sentada con las piernas cruzadas, apoyaba en el pupitre el brazo con el que sostenía el celular __ ¿qué te pasó en el brazo? __ pregunto acercándose para mirar mejor, noto algo extraño, algo como marcas un tanto rojas.

__ no es nada __ contesto apartando el brazo algo incomodo, acomodo la manga de la campera para que no se notará nada; despertó la curiosidad de toga.

__ ten- __ no pudo terminar de hablar, la puerta se abrió de golpe.

Todos miraron al frente, algo extrañados, creo que es la primera vez que ven como meten ha alguien al salón por la fuerza; algunos se reían en voz baja.

__ ¡banca, deja de empujar! __ se quejo un chico un tanto alto, de unos 7,78 m; ojos azules claros, cabello color rojizo, tez blanca.
Literalmente lo obligaron a entrar y cerraron la puerta de un portazo __ no podes dejarme en esta cárcel, dale abrí __ la puerta se abrió.

Nunca mas (dabishiga)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora