Espera. No te vayas.

Capítulo 8: Marcos

Cuelgo el teléfono. La situación se me ha ido totalmente de las manos. El tono con el que me ha hablado mi amigo Iván me ha hecho ver la dimensión de la situación. Estoy roto. No me reconozco ¿Cómo puedo recuperar al Marcos que fui antes de empezar con Marga? Lo más que me he acercado a esa persona que era, ha sido al conocer a Nerea. Me encanta esta chica.

Ella es luz, es calma, es risa, es serenidad, es... es la mejor persona que he conocido en mucho tiempo. Nunca se ha interesado en mi pasado mediático relacionado con Marga. Siempre me ha tratado con una naturalidad que desde el minuto uno me llegó directo al corazón. 

Sí, me enamoré de ella desde el primer momento que la vi distraída mientras Marta ligaba con Iván. La vi allí, tan ella, tan inmersa en todo lo que fluía por su cabeza, tan segura de todo pero a la vez con mucho miedo de descubrir algo que la pudiera asustar. 

De verdad que yo no quería complicar las cosas. No quería besarla en la casa del pueblo de mis padres. No quería hacerle el amor. No quería tocarla porque sabía que el día que lo hiciera me iba a volver adicto a ella. Cuando me dijo que su ex la estaba llamando me rompí en mil pedazos. No podía mirarla porque solo deseaba quedarme con ella allí con una copa de vino, muchas risas y mil anécdotas. Yo quería protegerla de todo y lo único que he sabido hacer ha sido exponerla.

Nerea es una de esas personas que te reta sin que tú te des cuenta. Es de esas personas que te anima, que te da un empujón que te ayuda a pensar: "tío, lucha por ti" y eso es lo que yo no he hecho nunca, jamás. Soy un cobarde por seguir con Marga sin quererla y sin que ella me quiera. Tengo que poner un punto y final a esto pero sin hacer daño a nadie. Marga y yo hace mucho tiempo que ya no nos molestamos ni en parecer felices. Yo vivo en mi piso, ella en su mansión, pero estamos juntos de cara a la prensa.

Desbloqueo el Iphone, la busco en contactos y pulso para llamar. 

- ¿Cómo has sabido que era ella? Siempre has sido una víbora Marga. Déjala tranquila. 

- Hola a ti también amor - me dice con un tono sarcástico - ¿sabes que con dinero se llega a todos los lados? solo me ha hecho falta pagar para tener el vídeo en el que se os ve entrando al vestuario. No puedo poner en peligro nuestra relación por una muerta de hambre que solo busca rabo. - y esas últimas palabras me encienden tanto que quiero colgar - sabes que si me dejas retiro mi inversión. 

- Déjala en paz. No tiene culpa de nada. No le jodas la vida a ella también, conmigo ya lo has conseguido. Para. 

Marga me cuelga y yo me siento la peor persona que existe. Me siento en mi escritorio e intento acabar un plano que había empezado antes de que vinieran, pero mi padre (que es mi jefe) entra y me interrumpe. 

- Marcos hijo, qué ha ocurrido. No sé si tu madre va a poder aguantar un escándalo más. Lo pasa muy mal. 

- Papá, yo sé que esto es duro, muy duro. Sé que todo el mundo me conoce como el novio de Marga, sé que estoy expuesto, pero cuando me acosté con Nerea no estaba con Marga. 

- Hijo, haz lo que consideres pero corta de raíz con todo o nunca tendrás la oportunidad de avanzar. 

Mi padre me da un beso en la sien y se va. Si él supiera la verdad quizás me entendería, pero este secreto solo lo puedo mantener con Iván. Joder, es mi mejor amigo desde el instituto. Sé que está enfadado conmigo. Lo llamo. No me lo coge, le mando un audio. 

- "Iván, tío, lo siento. Sé que te he decepcionado pero de verdad que no quería que se liara de esta manera. Pensaba que Marga pararía para que no salga información a la luz. Necesito que nos veamos, hablar, eres mi mejor amigo y te necesito una vez más".