Capítulo 11.

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Tras la partida de Wei Wuxian, el Jingshi quedó en silencio por unos momentos.
Lan Wangji se sentía preocupado por la manera de actuar del primer discípulo de Yunmeng Jiang, ¿cómo había tomado realmente la noticia de su posible futuro matrimonio? Era difícil saberlo hasta no hablar con él, pero el verlo alejarse físicamente de ellos hace unos momentos no sentó bien. Y si bien quería dar un paso más en su aún en etapa de desarrollo que tenían por relación, debía tener muy en cuenta los sentimientos de Wei Ying.

"Hanguang Jun, sé que debes estar preocupado por él maestro Wei y por cómo tomó la noticia. He convivido toda mi vida con usted como para no saber lo que piensa sobre mi padre." Lan Sizhui le miró a los ojos. Tornando su expresión seria. "Es por eso que quiero aclarar el tema lo más que pueda y quizá brindarte información que puede evitar que se separe de nosotros en el futuro. Considerando que yo seguiré aquí por un tiempo o indefinidamente."

Lan Wangji tragó con dificultad. Este niño, su hijo, lo conocía más de lo que esperaba. Para vivir como el Segundo Jade de Gusu Lan tuvo que crear un fuerte muro de hielo frente a su personalidad y sentimientos para evitar que el resto tomara ventaja de él, apegarse a las reglas era lo más prudente para mantenerse a salvo y fuera de problemas en un mundo donde su tío se preocupaba mucho por la imagen, su hermano tenía que cargar con el peso de una secta a tan temprana edad y un padre que jamás estuvo presente e incluso teniendo que consolar a Lan Wangji en la muerte de su madre, poniéndolo por encima de su propio dolor. Fue ahí cuando decidió no ser una carga para los demás.
Todos le miraban con respeto y miedo. Nadie le conocía como Lan Xichen lo hacía y eso estaba bien.

No quería ser conocido.

No quería ser visto.

Pero entonces Wei Wuxian llegó y todo el mundo de Lan Wangji de volteó de cabeza. Repentinamente sus muros de hielo fueron derrumbados por una sonrisa deslumbrante, una actitud despreocupada y una voluntad de hierro que deseaba mejorar el mundo.

Y Lan Wangji quería ser visto.

Quería ser notado por este individuo.

Su poca falta de socialización le dificultó acercarse a él pero Wei Wuxian se encargó de hacer el trabajo por ambos. El pánico de ser repentinamente visto le hizo tratarle con fiereza, queriéndo sentir la protección de sus muros nuevamente pero esto solo fue un reto más qué superar para Wei Wuxian, a quien superar lo imposible le era posible.

Y Lan Wangji descubrió el amor. Nombre asignado gracias a la orientación de su hermano, a quien graciosamente no se preocupó en informar cuando encontró el nombre para dar al sentimiento que había surgido en su joven persona.

Pero ¿qué seguía? ¿Era necesario hacer algo al respecto?
¿Qué hace una persona al enamorarse?

Lan Wangji no tenía idea. Nadie a su alrededor se había enamorado. Su madre no estaba enamorada de su padre. Fue obligada a casarse. Su hermano era muy joven para conocer el amor y su tío muy cerrado como para preguntar sobre el tema. Incluso se atrevía a pensar que jamás había estado enamorado. Y su padre... Su padre no era la persona correcta para cuestionar sobre el tema. Dejando de lado el hecho de que era imposible verlo, su preferencia por el secuestro y matrimonio forzado era algo a lo que Lan Wangji aspiraba jamás cometer.
Esto lo dejaba sin opciones así que hizo lo que mejor se le daba: quedarse sentado, admirando la existencia de Wei Wuxian y esperando a que el otro se encargara de hacer avanzar las cosas.

Pueden llamarlo tonto por hacer esto, pero al menos sabía que no estaba obligando a Wei Wuxian a nada.

Y ahora Lan Sizhui había aparecido en sus vidas y sus muros no fueron derribados, simplemente desaparecieron frente al chico.
Le conocía de pies a cabeza, sabía el rumbo por el cual viajaban sus pensamientos y Lan Wangji se sentía vulnerable porque alguien más aparte de Wei Ying sabía lo que pensaba.
Pero Lan Sizhui resultó ser su hijo, eso era más alarmante que el simplemente saber que le conoce. Ahora debía ver por el bienestar de su hijo, defenderlo y darle una vida nueva en este mundo que no es el suyo.
Debe ser algo horrible el encontrarte en un mundo donde no exististes y no conoces a nadie. Por suerte Lan Wangji está aquí para él.

"Sí, debemos hablar del tema. Hay muchas cosas que quiero saber. Pero primero nos haremos cargo de tu estadía aquí."

"¿Aquí?" Lan Sizhui preguntó extrañado.

"En el Jingshi." Lan Wangji confirmó.

"¿C-Con usted?" El asombro se mostró en los ojos del joven cultivador.

"Sería difícil explicar tu situación a la Secta y alojarte en los cuarteles de discípulos esta noche. No veo ningún inconveniente en que permanezcas aquí, si eso es lo que deseas." Ofreció el Jade, si el chico deseaba hacer otra cosa entonces movería montañas de ser necesario. Esperaba no tener que llegar a eso.

"¡Por supuesto que sí!" Se apresuró Lan Sizhui a responder. "Es solo que regresar a vivir al Jingshi después de tanto tiempo se siente extraño. He dormido algunas veces aquí cuando el maestro Wei decide que debo hacerlo, pero no me gusta crear problemas con mi presencia aquí." Sacudió sus manos en el aire para dejar más en claro sus palabras.

"¿Qué clase de problemas podrías crear con tu presencia aquí? Por lo que pude notar a ninguno de los dos nos molestaría tenerte con nosotros." Y es que tanto Lan Wangji como Wei Wuxian habían caído por el chico.

"Tener a un adolescente en el mismo cuarto de un matrimonio no es una idea sensata." Sizhui agregó desviando su mirada nerviosa y rascando su mejilla colorada. Sabía perfectamente que sus insinuaciones golpearían directo a su padre.

Laa orejas de Lan Wangji se tornaron carmesí.

"Mn." El Jade asintió sin hacer más preguntas sobre el tema. Su hijo no era el indicado para informarle sobre su vida íntima con Wei Ying.

"Tendremos que informar al tío Zewu Jun sobre mi presencia. El tío Qiren es quien me preocupa." Sizhui agregó sin ánimo. El tío Qiren definitivamente no tomaría bien la noticia. Podría explicar su adopción, pero no la razón por la que Lan Wangji había decidido hacerlo. "A menos que decidas no informarle sobre mi relación con el maestro Wei..." Esa parte no era muy emocionante.

"No." Lan Wangji respondió. No era una opción.

El semblante de Sizhui se iluminó ante esto, la tensión escapó de sus hombros. Era un alivio porque a estas alturas dudaba poder contenerse frente a estas versiones de sus padres. Había tanto que deseaba aprender de ellos y de sus vidas.

"Entonces esperaré a que me indiques cuando sea necesario que explique las cosas." Contar la misma historia tantas veces comenzaba a darle algo de seguridad.
"Ahora, sobre mi padre, Wei Wuxian..." Ambos Lan se miraron, por fin cada uno obtendría la pieza de información que esperaban compartir entre ellos. "Te contaré la historia de cómo hacer lo correcto lo llevó a la muerte."

La respiración de Lan Wangji se detuvo.

               ~°~°~°~°~°~°~°~°~°~°~°~

¡Lo logré! Logré terminar el capítulo antes de que terminara el día 😭

Pensé en posponerlo para hacerlo más largo, pero me sería imposible parar entonces y terminaría tomando dos semanas para publicar un solo capitulo.

Soporten un poco más, les prometo que en el siguiente Lan Zhan se enterará por fin de algunas cosas.

Pobre bebé, va a sufrir :c

En fin, muchas gracias por apoyarme siempre, espero disfruten la historia y podamos vernos en el siguiente capítulo 💜 Tengan bonita semana.

De cintas Lan a malentendidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora