Segunda oportunidad.

el jade del medico.

Como Wei Ying ha pedido 5 días de descanso después del velorio, es Jiang Cheng quien se encarga de sus pacientes. Afortunadamente el policía al que su hermano salvó está estable. Aún tiene el ventilador y esta sedado, pero su pronóstico es favorable. Es entonces cuando lo vuelve a ver.

Resulta que la persona con la que chocó es hermano del paciente de Wei Ying. Lan Xichen es un hombre demasiado amable y con un tono de voz gentil y aterciopelada que provoca que los nervios crispados de Jiang Cheng se calmen misteriosamente.

El hombre le devuelve sus pertenencias, las cuales Jiang Cheng ya había dado por perdidas y comenta con honestidad el estado de Lan Zhan.

-si sigue respondiendo tan bien al tratamiento, iremos disminuyendo la sedación en los próximos 3 días, no hay datos de hemorragias, sus niveles son buenos, tendrá una convalecencia larga, pero será cosa del pasado en un par de meses. Su hermano es joven y sano-

Lan Xichen le sonríe amablemente, saber que su hermano está recuperándose calma su espantado corazón.

Entonces, después de días de angustia e incertidumbre, finalmente mira al joven médico Jiang Cheng y se inclina totalmente agradecido. Es el mismo medico el que le informa que la cirugía no fue efectuada por él y que solo está relevando al médico responsable. Aun así, la sonrisa de Xichen no desaparece de aquel atractivo rostro de jade, lo invita a salir a cenar algo a manera de agradecimiento y Jiang Cheng acepta.

Nunca ha involucrado su vida personal con la laboral. En la universidad salió a un par de citas con algunas chicas, pero ya tiene muchos años que sabe que esas no son sus preferencias. Esta mal que quiera utilizar al hermano jade mayor para sacar un poco de su dolor y de sus frustraciones, pero oportunidades como estas no se dan dos veces en la vida. Xichen es un hombre bastante atractivo y uno no puede dejar pasar semejante lujo.

Jiang Cheng pide solo unos aperitivos y una botella del mejor whisky. Hablan de cosas vánales, Xichen no toma o dice ser muy malo con la bebida... pero es alguien bastante conversador.

Cheng se entera que es el CEO de una empresa y su hermano menor, rebelde, servicial y estoico ha optado por ser un humilde servidor público en la policía local.

Jiang Cheng lleva mucho más de media botella y el alcohol le ha relajado tanto como para sonreír y bromear coquetamente con el CEO. Le cuenta todo lo que pasó con su hermano, su esposa, y de sonreír bobamente, pasa a llorar.

Como ambos están cenando en un cuarto privado, es fácil para Xichen, rodear la pequeña mesa y abrazar al otro. Jiang Cheng es quien da el primer paso.

Se aferra a esos fuertes brazos y besa al Lan mayor. Gimotea necesitado, incluso da un trago a su vaso y comparte de la bebida a través de un beso sumamente húmedo. El whisky quema la garganta de Xichen y tose, con las mejillas arreboladas, alejando de si al médico.

-no creo que...- antes de poder decir algo más, cae profundamente dormido.

Xichen siente que su estado etílico disminuye considerablemente. ¿Es en serio?

Como puede, lo levanta y prácticamente lo saca en su espalda a un par de cuadras donde hay un hotel. De manera literal lo avienta a la cama y se sienta en la orilla de la misma sintiéndose totalmente decepcionado. El solo queria liberar el estrés del momento. Xichen le había dicho que era malo con la bebida, pero jamás se hubiera imaginado que fuera TAN malo.

Entra al baño para darse un regaderazo rápido, esperando a que el efecto del alcohol disminuya un poco. Casi se traga la lengua cuando al salir de la habitación, usando únicamente una toalla en su cintura, ve que Xichen ya está despierto en medio de la habitación, con mirada taciturna. En cuanto el CEO nota su presencia, una hermosa sonrisa se desliza por sus labios y se lanza contra él, abrazándolo efusivamente.