La Vieja Herencia

Acto 4 Escena 1

(La escena toma lugar en la casa de los Olivera, donde los padres se sientan a charlar del cumpleaños y la reunión que tomó lugar en el día)

Susana: Y la pasamos lindo Ger, no tengo palabras para agradecerte lo que hacés por la familia.

Gerardo: Su, para vos lo mejor, y el agradecimiento tendríamos que hacértelo a vos por todo el amor y apoyo que nos das como madre, abuela y esposa.

Susana: (Pensativa) Lo único que falta ahora son los chicos con los nenes, a ver que decidieron con la herencia que les quiero dejar.

Gerardo: (Defensivo) Yo no me meto mas en el tema herencia, ni tuya, ni mía, ni de nadie. Es mas, cuando yo tenga que dejar algo mío en herencia que se encarguen los abogados.

Susana: Gerardo, no podés ponerte así por algo que paso hace tanto tiempo. Parecés un chiquilín, seguro que Jorge olvidó todo el conflicto ya.

Gerardo: Puede ser, pero este no es el mejor momento para hablar de eso, vos querés terminar con esto de la herencia, así que ahora lo terminás con los chicos. (Suena el timbre)

Susana: ¿Ger vas a abrir? Seguro que son los chicos.

Gerardo: Voy entonces, igual a esta hora y un domingo no puede ser nadie mas. (Gerardo sale de la escena)

Susana: (Irritada) Este Gerardo es tan terco a veces, cree que porque el tuvo problemas con la herencia todo el mundo va a tener problemas con la herencia. (Entra Gerardo con el resto de la familia)

Isabel: (A Susana) Abuela la pasamos muy bien conociendo el barrio.

Gabriel: (A Susana) ¿Abuela cuando nos podemos quedar?

Patricia: (A Gabriel) Hijo, la abuela está cansada y vos mañana tenés escuela, en la semana hablamos con la abuela.

Gerardo: Mis nietos pueden quedarse en casa el próximo fin de semana si quieren.

Carlos: (A Gerardo) Papá no hace falta, después arreglamos bien.

Rodrigo: Antes de que yo me olvide el tío Jorge mandó saludos para todos y feliz cumpleaños para vos mamá.

Susana: ¿Y que hicieron en la plaza? Cuéntenme un poco.

Carlos: Nada importante, sentarnos, recordar viejas épocas...

Patricia: (Interrumpiendo) Nos hamacamos un rato, comimos helado...

Rodrigo: (Interrumpiendo) Hablamos de la herencia... Digo de la hacienda...

Gerardo: (Sorprendido) ¿Hacienda? ¿Cual hacienda? Lo único que falta es que a Jorge no le haya alcanzado con la herencia sino que ahora tenga una bruta hacienda.

Patricia: (A Rodrigo) Tristemente no podemos ir atrás en el tiempo porque desencadenaste un monstruo Rodri.

Rodrigo: (Confundido) Pero estás diciendo como si hubiera firmado una declaración de guerra Patri.

Carlos: Y digamos que entre papá y Jorge hubieron fricciones por el tema herencia.

Susana: Hablando de heredar y esto y aquello ¿Ustedes decidieron algo ya? ¡Y vos no te vas a ninguna parte Gerardo Olivera!

Gerardo: (Sorprendido) ¡Pero esperá un poco policía! Dejame ir al baño al menos.

Susana: El baño no es huir de tu responsabilidad en la herencia Gerardo.

Carlos: No se desvíen del tema por favor. Menos vueltas y mas respuestas.

Patricia: (A Carlos) Creo que fuiste un poco demasiado directo Charli con ese comentario.

Susana: Bueno, ya estamos listos para el tema herencia. Como les dije al principio yo les quiero dejar una herencia en vida...

Rodrigo: (Interrumpiendo) ¿No sería mejor que dejes que los abogados se encarguen del tema herencia? Digo yo para que nos evitemos dolores de cabeza.

Susana: (A Rodrigo) Rodri yo ya la decisión la tomé para que sea lo mas rápido y equitativo para todos. Confío en la decisión a la que ustedes llegaron como hermanos.

Carlos: ¿Le digo yo o le dicen ustedes lo que decidimos? Porque me cuesta un poco comunicarle nuestra decisión a mamá.

Patricia: Lo digo yo entonces. Mamá tu intención de dejarnos la casa es buena, pero decidimos no aceptarla porque esto nos va a separar como hermanos y es lo que queremos preservar...

Susana: (Confundida) ¿La casa? Me parece que se confundieron y bastante feo.

Gerardo: (Tentado de risa) A mi no me mires, no tengo nada que ver en este teléfono descompuesto que hicieron.

Susana: (Sarcástica) Mas que teléfono descompuesto eran las dos latitas con el cordón cortado. ¿Si les dejamos la casa como herencia donde vamos a vivir?

Carlos: (Confundido) Ustedes se iban a ir a La Pampa... O eso fue lo que entendí.

Gerardo: (Confundido) Si, pero de vacaciones, si allá no tenemos casa ni edificio ni mansión ni nada.

Rodrigo: (Avergonzado) Entonces nos insultamos y nos dijimos de todo en vano, si la casa no es heredable.

Susana: Y la verdad si, porque yo tengo algo mas importante que la casa para dejarles como herencia.

Patricia: Si es la fortuna familiar mejor así, esa es mas fácil de dividir entre los tres.

Susana: Lo único que hay en la fortuna es para hacer viajes solamente, lo que les dejo en herencia es el piano.

Patricia: Si es el piano entonces que vaya para lo de Carlos, ya que iría muy bien en su tremenda casa.

Carlos: (A Patricia) A mi casa no entra ese piano nena, enchufaselo a Rodrigo que lo haga plata.

Rodrigo: (A Carlos) Si claro, entra el piano y salgo yo si mi casa es chica, el piano se queda con Patricia que tiene el novio músico.

Patricia: (A Rodrigo) ¿Pero que te comiste, un payaso? Iván no necesita un piano, ese piano se va a tu casa.

Rodrigo: (A Carlos) Quedatelo vos que podés pagar el flete. Si yo lo tengo que llevar a Korn o me rompo la espalda cargándolo, o me endeudo por un siglo con el flete.

Carlos: (A Patricia) Nena vos sos la que está mas cerca de acá. No te da ningún trabajo llevarte el piano.

Patricia: (A Carlos) Dáselo a tu hija que quería aprender a tocar el piano.

Carlos: (A Rodrigo) Dáselo a Jorge que el sabe tocar entonces, si llego con el piano a casa Luciana me mata.

Rodrigo: (A Carlos) ¿Y te creés que el tío a mi no? A duras penas me entraron la cama y la heladera en la casa. (Los tres hermanos siguen de fondo dando sus argumentos para no quedarse con el piano)

Susana: (A Gerardo) Con razón no te querías meter Ger, ahora entiendo todo perfectamente.

Gerardo: (Entre risas) Lo que se hereda no se roba Su, esto es bien típico de los Olivera.

--- TELÓN FINAL ---