Lo que siento por ti [Teru x Akane] (Completa)

Capítulo 4.

Teru y Akane habían terminado de comer, y fueron a buscar a que juego subirse, el rubio vio uno donde estaban unos barquitos que en la parte de enfrente tenían dos cisnes juntando sus cabezas haciendo un corazón y que los llevaba a un túnel, sabia que era para los enamorados. Y se quería subir con el pelirojo, pero sabia que el se negaría, pero lo intentaría.

— oye Aoi, subamos a ese —dijo señalando el juego, al cual subían varias parejas, el pelirojo se sonrojo un poco.

— ¿que broma es esta persid… digo Teru? ¿Que no sabes que ese juego es para los enamorados? —preguntó aun sonrojado, pero con algo de enojo.

— no, no lo sabía —mintio —nunca había venido a un parque de diversiones, así que no lo sabia —se excusó.

— ¿encerio nunca había venido? —preguntó sorprendido.

— nop, estoy tan ocupado con ser exorcista y con la escuela que nunca eh tenido tiempo, y hoy hice unos arreglos para poder venir —dijo sonriendo.

— así que era por eso —pensó —¿encerio quieres subir a ese? —preguntó mirando el hacia el juego.
— sip —contestó asintiendo.

— bien, subamos —suspiro.

El rubio se sorprendió de que el pelirojo dijera eso, sonrió y ambos fueron al juego subieron al barco, algunas personas se les quedaban viendo, pero ambos chicos ni se daban cuenta de eso, el barco de ellos se empezó a mover entrando al túnel.

— hay muchos adornos en forma de corazón —dijo el rubio mirando a los lados.

— pues claro que si… este juego es para los enamorados —explicó Akane.

— ah es cierto —volteo a mirar al pelirojo un poco.

Después las luces bajaron un poco de intensidad, y musica romántica se escuchaba de fondo.

— creo que esto es un poco incómodo —hablo el pelirojo.

— ¿encerio? para mi no lo es—dijo el Minamoto dándole una sonrisa al pelirojo, haciendolo sonrojar un poco —te vez tierno sonrojado —dijo aun sonriendo.

— no estoy sonrojado —dijo un poco enajado.

— claro que si lo estas —lo agarro de la mejilla, haciendo que el pelirojo se sonroje mas —ahora estas todo rojito.

Luego sintieron el flash de una cámara voltearon hacia la dirección y en la parte de arriba había una cámara, Teru se puso feliz, trataría de quedarse con la foto y ponerla en una pared de su cuarto.

Akane estaba un poco rojo por la vergüenza de que le hayan tomado una foto así con el rubio.

Después salieron de aquel túnel, ambos bajaron de barco y un trabajador le dio al rubio la foto de ambos.

— gracias —dijo Teru, el trabajador asintió y se fue.

— oye dame esa foto la voy a tirar —dijo Akane, Teru miro la foto y la guardo en la bolsa de su suéter.

— me la voy a quedar —dijo sonriendo.

— ¿para que la quieres? —preguntó el pelirojo un poco enojado.

— quien sabe… —dijo y sonrió ladinamente haciendo enojar más al pelirojo.

— ya haz lo que quieras con ella —suspiro.